Por Fernando Almirón

Carlos Ruckauf y José Manuel de la Sota concretaron ayer el encuentro prolijamente programado por sus estrategas con el objeto de consumar una movida política dirigida a varios frentes. Dieron muestras de unidad y convivencia en medio de las disputas que enfrentan a los socios de la Alianza, elaboraron una serie de iniciativas –“nosotros hacemos propuestas”, según afirman– tendientes a reactivar las industrias básicas de las provincias de Buenos Aires y Córdoba y respaldaron mutuamente sus aspiraciones presidenciales al recortarse solos como los mejores candidatos del PJ para ganar las elecciones del 2003. Los otros posibles candidatos sintieron la estocada: Carlos Reutemann se mostró enojado (ver nota aparte) y Carlos Menem estuvo presente en las pancartas que fueron estratégicamente colgadas en las calles de Villa Carlos Paz, un destino turístico casualmente elegido por Alberto Kohan para este fin de semana.
El gobernador bonaerense aterrizó en la pista de la Escuela de Aviación Militar de Córdoba pasado el mediodía de ayer. Llegó acompañado de su esposa, María Isabel Zapatero, y de un reducido grupo de colaboradores. De inmediato se trasladó en una camioneta tipo van de color blanco hasta el barrio Villa del Lago donde De la Sota y su mujer, Olga Riutort, los aguardaban en la puerta de su residencia privada.
Saludos, un breve contacto con la prensa y hasta la noche. Los mandatarios se encerraron durante toda la tarde en el interior de la vivienda –también se tomaron algunos recreos para caminar por el parque y ser fotografiados– para elaborar la redacción final del documento que recién darán a conocer hoy, mientras en la parrilla del quincho cordobés se vaya dorando un sabroso corderito serrano.
Cuando los mandatarios desaparecieron detrás de la ligustrina, sólo una presencia se agitaba al ritmo del viento alterando el bucólico paisaje del vecindario: una veintena de pasacalles con la leyenda “Menem 2003” y “Menem Volvé”. A esto se sumó la sorpresiva presencia en Carlos Paz de Alberto Kohan, el hombre de mayor confianza del ex presidente.
“Estas son cosas que forman parte del juego político”, comentó escuetamente De la Sota cuando fue consultado por la inesperada visita, la que fue interpretada por dirigentes tanto del PJ local como del bonaerense como una presión sobre el mandatario que había acordado en octubre pasado una suerte de alianza estratégica con el menemismo, la que ahora amenazaba con romper en pos de un nuevo acuerdo con Ruckauf.
El temor menemista tiene sus motivos. La creación de un eje político dentro del partido liderado por los gobernadores de las dos provincias más importantes del país podría, efectivamente, dejar fuera del juego presidencial al resto de los aspirantes a disputar la máxima candidatura en el 2003. Y es más, quedarse con todas las fichas para llevar adelante las negociaciones con las minorías partidarias.
Incluso se habló de un proyecto que Ruckauf fue madurando en las últimas semanas y que buscaría impulsar junto a De la Sota. Se trataría de establecer un sistema de elección interna –monopolizada por ambos, claro– similar al utilizado por la Alianza, por el que el que obtenga más votos se queda con la candidatura presidencial y el segundo acompaña como segundo en la fórmula.
Al margen de las definiciones políticas que dejará el encuentro, ambos mandatarios trabajaron ayer en la presentación conjunta de una propuesta que le harán llegar al gobierno nacional para reactivar la industria automotriz, golpeada por continuas reducciones en las ventas al mercado interno. Entre las alternativas que manejan los dos dirigentes para impulsar la producción de autos figuran el establecimiento de una reducción coordinada de impuestos provinciales –sobre todo Ingresos Brutos–, y reclamar al gobierno central la rebaja de otras alícuotas nacionales que gravan los automóviles.
Los dos dirigentes también conversarán sobre la producción agropecuaria, más precisamente de carnes y lácteos, en el marco de la crisis internacional desatada en esos mercados por la reaparición del denominado “mal de la vaca loca”.
El resultado del trabajo conjunto en lo que se refiere a temas productivos y económicos se dará a conocer hoy mediante un documento que será presentado por ambos mandatarios en conferencia de prensa.
En lo político y para calmar los ánimos, De la Sota y Ruckauf anunciaron a través de voceros que ya decidieron viajar próximamente juntos a Santa Fe para sumar coincidencias con su par Carlos Reutemann, quien ayer regresó de los Estados Unidos donde fue operado de una dolencia en la columna vertebral, y que no se mostró tan parco como es habitualmente a la hora de comentar el encuentro en la villa serrana (ver aparte).

“LA GENTE NO DESESPERA POR SABER QUIEN ES EL CANDIDATO”
El Lole no se queda afuera

“Antes de hablar de candidaturas se deberían clarificar algunas cosas básicas en el justicialismo”, declaró ayer Carlos Reutemann apenas bajó del avión que lo trajo desde los Estados Unidos, donde fue intervenido quirúrgicamente de una afección cervical. El gobernador de Santa Fe se encontró a su regreso con que dos de los máximos referentes del PJ –Carlos Ruckauf y José Manuel de la Sota– ya estaban lanzados a la carrera presidencial, y para colmo compartiendo un fin de semana juntos en Carlos Paz. “La gente no está desesperada para saber quién será el candidato”, remató el ex deportista, que también tuvo palabras para Eduardo Duhalde y Carlos Menem.
La reunión entre Ruckauf y De la Sota en Córdoba se pactó cuando Reutemann estaba fuera del país y se inició casi a la misma hora en que el ex piloto de Fórmula Uno abordaba el avión que lo trajo de regreso a la Argentina después de su rehabilitación posoperatoria en un centro de salud norteamericano.
Es posible que el mandatario santafesino se haya sentido marginado de la movida de sus pares y por esa razón no haya ahorrado críticas hacia los dirigentes que a su entender apresuran su posicionamiento presidencial. A los que se refirió con cierto enojo.
Dijo de las candidaturas: “Antes de saber quién será candidato, el justicialismo tendría que clarificar cosas básicas históricas del PJ”.
Dijo de Ruckauf: “Tiene una fuerte instalación mediática y la firme voluntad de ser candidato, no lo veo mal. Es de esperar que en el justicialismo haya dos fórmulas, pero la gente no está desesperada por saber quién será el futuro candidato”.
Dijo de Menem: “De cara al 2003, el justicialismo debería darse un debate interno, porque hay muchas cosas que no concuerdan con los principios básicos del justicialismo”, dijo Reutemann con tono parco, y aclaró: “Se me acerca mucha gente que no está de acuerdo con muchas cosas de un plan neoliberal que instaló (Carlos) Menem en el período 1990-2000”.
Dijo de Duhalde: “Duhalde se equivoca cuando afirma que no me animo a participar de la interna presidencial. Cuando gané las elecciones a gobernador, me dijo que él no tenía ninguna posibilidad de ganar las elecciones. Por eso quería que yo fuera el candidato, supliéndolo, pero le dije que no me interesaba”, recordó el santafesino con ironía.
Ruckauf y De la Sota parecieron entender el mensaje y aseguraron que la próxima semana viajarán a Santa Fe para reunirse con el ex piloto.

DUHALDE SERA CANDIDATO A GOBERNADOR BONAERENSE
“Esa es una hipótesis posible”

Eduardo Duhalde blanqueó una nueva aspiración electoral a su ya anunciada candidatura a senador nacional del PJ por la provincia de Buenos Aires. Ayer no descartó públicamente la posibilidad de presentarse para encabezar un nuevo período al frente de la gobernación bonaerense.
“Es una hipótesis posible”, admitió Duhalde, a quien las encuestas por ahora lo señalan como seguro senador nacional después de las elecciones de octubre. El ex candidato presidencial podría así hacer un nuevo intercambio de cargos con Carlos Ruckauf. Duhalde fue vicepresidente de la primera gestión de Carlos Menem. Ruckauf fue vicepresidente de la segunda. Ruckauf reemplazó a Duhalde en la gobernación provincial, y ahora se propone como el nuevo candidato presidencial del justicialismo, lugar que ocupó Duhalde en 1999. Un extraña coincidencia en sus respectivas carreras políticas.
Claro que para que el ex gobernador pueda suceder al actual gobernador, que a su vez lo sucedió a él, Ruckauf tendría que ganar las internas partidarias y quedarse con la candidatura presidencial, caso contrario lo más probable es que busque se propia reelección para seguir al frente de la Casa de Gobierno de La Plata.
En este sentido Duhalde, que preside el Congreso Nacional Justicialista, aseguró que “va a haber internas porque el justicialismo no decide sus cargos de otra manera que con internas”. Se mostró confiado en que Ruckauf será el próximo Presidente: “es muy claramente el candidato más fuerte que tiene el justicialismo y su figura crece en todo el país”, dijo. Y no abandonó su caballo de batalla en política económica: “Tenemos que fundar las bases del nuevo modelo que tiene que hacerse respetando la convertibilidad y evitando por todos los medios más desequilibrios fiscales”, explicó desde Pinamar.

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