FUTBOLISTICAMENTE,
ESTAMOS BAJOS
El cauteloso Bermúdez
El capitán de Boca, Jorge
Bermúdez, abrió saludablemente el paraguas ayer y manifestó
que debido a los trabajos físicos de la pretemporada de verano,
él y sus compañeros futbolísticamente todavía
están en un nivel muy bajo y remarcó que, más
allá de sus deseos de ganarle hoy a River, lo importante será
llegar bien al inicio del Torneo Clausura.
Futbolísticamente todavía estamos en un nivel muy
bajo, porque en este momento el aspecto físico es lo más
importante para lo que se viene y por eso estamos un poco duros,
resaltó Bermúdez. Y agregó: No hay duda de
que es motivante jugar un Boca-River, pero no deja de ser un amistoso,
no es lo mismo que cuando es por los puntos, y seguramente será
un típico partido de verano, con los futbolistas muy duros por
la exigencia física de la pretemporada, que es la base de todo
el año. Bermúdez, uno de los pocos jugadores (se sumaron
Oscar Córdoba y Omar Pérez, nada más) que dialogan
con la prensa los días de atención, le sacó presión
al superclásico y cuando fue consultado sobre si era un duelo
especial enfrentar a River, el colombiano contestó: El fútbol
es un juego, no la lucha por la vida.
Ojalá podamos ganar, pero lo que tenemos en mente es tener
una base física para llegar bien al 11 de febrero, ése es
el objetivo principal, puntualizó. El colombiano señaló
en más de una oportunidad que si de él dependiera no
jugaría los partidos del verano, al recordar que el año
pasado se desgarró jugando ante River. Un concepto que comparte
con Chicho Serna. Sin embargo, Carlos Bianchi decidió incluirlo
en el equipo titular para enfrentar esta noche a River en Mar del Plata
y el propio Bermúdez se encargó de encontrarle el lado positivo.
Este partido y los que vengan servirán para sumar minutos
de fútbol, porque lo necesitamos. Igual estamos contentos porque
la base física ya la estamos consiguiendo y sabemos que de esa
manera, como desde hace tres años, podremos intentar logros importantes.
Para Bermúdez, que se hayan ido jugadores importantes y que el
año pasado se ganaran la Copa Libertadores, la Intercontinental
y el torneo Apertura no significa no tener la misma motivación.
Los triunfos son ya nuestro equipaje y no tenemos que mostrarlo
en cada esquina. Lo que tenemos que pensar es que iniciamos una temporada
desde cero, con la obligación de ser protagonistas porque es lo
que manda la historia.
NO
TOMARMELO TODO A LA TREMENDA
El razonable Gallego
Cuando esta noche, pocos minutos
antes de las 22.10, salgan los dos equipos a la cancha, los flashes y
las cámaras de televisión no apuntarán a los verdaderos
protagonistas, los jugadores, sino que la estrella en ese
momento será el entrenador de River, Américo Gallego. Aunque
los dirigentes de River, con su presidente David Pintado a la cabeza lo
desmientan, no salir ileso de los tres clásicos del verano con
Boca significaría la ida de Gallego de su cargo. Como el técnico
lo sabe, el estrés pudo más y el cuerpo no aguantó.
El miércoles pasado, en Mendoza enfrentando a Racing, Gallego se
sentó en el banco de suplentes y a los diez minutos se tuvo que
ir, aturdido por la realidad. La pregunta es: ¿hasta dónde
aguantará Gallego una derrota con Boca?
Parece, de alguna manera, una película de ciencia ficción,
porque sólo en ese estilo se podría escribir y justificar
un guión en el cual un entrenador corre riesgo, no sólo
su trabajo sino que también su salud, por un partido amistoso de
verano. Pero la realidad supera la ficción, basta con recordar
que el año pasado, después de un clásico, justamente
en Mar del Plata, Ramón Díaz por perder River con los juveniles
de Boca tuvo que abandonar la entidad de Núñez y recluirse
en alguno de sus campos en Entre Ríos durante varios meses.
La magia de Aimar o la gambeta de Ariel Ortega parecen ser las principales
armas de Gallego para salir ileso del primer superclásico, pero
el problema es que antes de empezar a jugarlo lo recibió herido.
Tal vez por eso, ayer prometió que de aquí en más
se tomará las cosas de otra manera para no perjudicar
su salud. Así lo dijo: A partir de ahora me voy a tomar las
cosas de otra manera. Lo que tuve fue un pico de presión alta,
algún día tenía que explotar y me pasó en
el partido con Racing, dijo Gallego en la conferencia de prensa
brindada ayer.
Tras el pico de presión sufrido en el partido que River jugó
ante Racing en Mendoza y reiniciar esta semana los entrenamientos, el
de ayer fue el primer encuentro de Gallego con la prensa. El Tolo
se mostró muy activo en el campo de juego mientras le daba indicaciones
a sus jugadores, y en la conferencia de prensa se lo notó de buen
ánimo, brindando alguna sonrisa ante ciertas preguntas.Esto
me demuestra que no tengo que tomarme las cosas a la tremenda, hay cosas
más importantes, reconoció el técnico.
LOS
EQUIPOS
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