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El Gobierno rechazó la posibilidad de aliviar la carga impositiva del sector automotor. La propuesta, lanzada la semana pasada por los gobernadores justicialistas Carlos Ruckauf y José Manuel de la Sota, fue calificada como �poco feliz� por José Luis Machinea. �Si creen que voy a cambiar porque me presionan a través de los diarios, están equivocados�, señaló el ministro, poniéndole punto final a la petición de los mandatarios provinciales para que bajen los precios de los autos y, de esa manera, las fábricas puedan colocar más unidades.
�La presión impositiva en el rubro automotor es la misma en todos los sectores de la industria�, justificó ayer Machinea durante una conferencia de prensa. Y, contundente, añadió: �No hay ninguna posibilidad de reducir el precio de los autos a nivel nacional�. Por otra parte, el titular del Palacio de Hacienda embistió contra los empresarios. �No entiendo sus declaraciones de hablar de rebaja de precios. A no ser que ellos mismos quieran paralizar las ventas. (Plantear el tema) ha sido un error. Estas cosas se hacen o no se hacen. Pero no se anuncian�, criticó. Justamente, el temor que comparten el Gobierno y los empresarios es que la discusión impositiva termine por afectar las ventas.
La ofensiva de Ruckauf y De la Sota es clara. Los gobernadores dijeron que están dispuestos a resignar parte de la recaudación impositiva, disminuyendo las alícuotas que gravan al sector automotor, como Ingresos Brutos y Sellos. A cambio, reclaman que las distintas municipalidades eliminen los impuestos que les cobran a las terminales y que la Nación se anote con una baja en Internos y en el IVA. También piden que las fábricas reduzcan los precios en una proporción similar al esfuerzo que harían las provincias y el gobierno nacional. El objetivo de los justicialistas es que los valores de los cero kilómetro caigan entre 15 y 20 por ciento. Alegan que con esa reducción podría reactivarse la industria, radicada mayoritariamente en Buenos Aires y Córdoba, debilitada por la recesión económica y el final del Plan Canje.
Sin embargo, las especulaciones de que la oferta de Ruckauf y De la Sota tuvo un buen recibimiento en el gobierno nacional duró poco. No bien bajó del avión que lo traía desde Nueva York, donde fue a convencer a los inversores de que la Argentina cumplirá con las metas fiscales y será inflexible en materia de gasto público, Machinea desairó a los gobernadores. �Una eventual rebaja del IVA no sería para los autos. Para eso se lo bajaríamos a los artículos de primera necesidad�, replicó el ministro. Y agregó: �No hay posibilidad de reducir los precios de los autos a nivel nacional en forma sustancial. Salvo que las terminales los reduzcan, o los gobernadores decidan bajar los impuestos a los Ingresos Brutos que afectan los precios�.
En la misma línea que Machinea, Chrystian Colombo, jefe de Gabinete, también le devolvió la pelota al tándem Ruckauf-De la Sota. �Buenos Aires y Córdoba tienen tasas (impositivas) muy altas�, calificó, dando cuenta de que, antes que la Nación, las provincias deberían disminuir la presión impositiva. �Además, no somos partidarios de una rebaja de impuestos en forma sectorial�, remató.
Por ahora, algunos empresarios del sector vienen manteniendo cierta cautela respecto de la posibilidad de bajar impuestos. Vicenzo Barello, presidente de Fiat, pidió que el Gobierno �por lo menos evalúe el tema�. Sin embargo, más que inclinarse por una rebaja sectorial de las alícuotas, reclamó una �gran reforma tributaria que sea capaz de relanzar la economía�. Otros, en cambio, solicitan tomar medidas en forma urgente. En esta fila se encolumna AFAC, la cámara que agrupa a los fabricantes de componentes para autos. �La actual carga impositiva �que explica el 47,3 por ciento del valor de los automóviles� implica precios más altos que limitan el acceso a los vehículos y, por ende, menor recaudación de impuestos para el Gobierno por la disminución en las ventas�, señaló ayer la Asociación a través de un comunicado de prensa. A su vez, Enrique Federico, director de Daimler Chrysler, también se mostró partidario debajar impuestos. Y recordó que la propuesta que ahora enarbolan los gobernadores del PJ es la misma que Adefa, la cámara que engloba a las terminales, le presentó a Machinea en agosto de 2000, cuando se analizó el impacto por la finalización del Plan Canje.
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MENORES PRECIOS EN CANASTA BASICA
Deflación en alimentos
La canasta total de alimentos, bebidas y productos de limpieza registró una baja en el valor de sus productos del 2,6 durante octubre-noviembre de 2000 respecto a igual período de 1999, según un relevamiento privado efectuado en las principales cadenas comerciales. La investigación estuvo a cargo de la consultora de mercado ACNielsen.
El estudio revela que la canasta de alimentos en ese bimestre sufrió una baja del 4,2 por ciento de facturación si se la compara con igual período de 1999. En tal sentido, la consultora aclaró que el rubro que más cayó fue el de alimentos básicos �aceites, arroz, caldo, galletitas, harinas, leches, manteca, margarina, pastas, polenta y sal de mesa�, cuya facturación descendió un 6,1 por ciento.
Respecto de la baja de precios, en el total canasta cayeron 4,6 por ciento, en tanto en la canasta de alimentos bajaron un 3,6 por ciento. Por su parte, los alimentos no básicos (cereales, conservas de pescado, espesantes para sopa, flanes, galletitas rellenas, ketchup, mayonesas y mermeladas) mostraron un retroceso de precios del 3,9 por ciento, según el informe de ACNielsen.
En cuanto a la canasta de bebidas, si se comparan los bimestres octubre-noviembre del 2000 con igual período de 1999, se observa que cayó un 6 por ciento en su facturación, siendo las bebidas no alcohólicas las que registraron la mayor caída, con un baja del 8,4 por ciento. |
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