Por Patrice Burchkalter
Desde Maranello

Algunos meses después de obtener su primer título mundial de pilotos de Fórmula 1 tras 21 años de abstinencia, Ferrari está dispuesta a permanecer en la cúspide, mostrando sus ambiciones tras la presentación de su nuevo coche, el F1-2001. La Scuderia, eufórica, aspira a que el auto con el cual Michael Schumacher y Rubens Barrichello participarán en el Campeonato del mundo de Fórmula 1-2001 alcance otro doblete (pilotos y constructores).
“Este año nuestro objetivo es ganar el campeonato”, anunció, ambicioso, Luca Cordero di Montezemolo, presidente de Ferrari, como si se sintiera liberado de la fuerte presión a la que el equipo se vio enfrentado, según pasaba el tiempo y se vivía un fracaso tras otro.
Serena, tras un 2000 excepcional, la escudería italiana piensa que con la llegada del 2001, “lo mejor está todavía por verse. El auto evolucionó en todas las líneas conforme a la nueva reglamentación y estamos más motivados que nunca”, declaró, por su parte, Jean Todt, director deportivo de Ferrari.
“Después de los años pasados dedicados a remontar la pendiente, lo logramos, y eso nos libera para poder intentar conservar el número 1, el mayor tiempo posible.”
Es el sentimiento común en la escudería italiana. Empezando por Michael Schumacher, poseedor de tres títulos mundiales (1994, 1995 y 2000), que espera haber iniciado una nueva era Ferrari. “Nunca antes mi motivación fue tan grande, y les puedo asegurar que daré todo de mí para que Ferrari esté en lo más alto –declaró el piloto alemán–. Por mi parte, comencé mi preparación un poco antes que lo habitual a causa de mi operación en noviembre.”
Un equipo decidido, con pilotos confiados, “estoy dispuesto a dar lo mejor de mí”, también insistió, por su parte, el brasileño Rubens Barrichello, la Scuderia cuenta con un nuevo monoplaza que, en grandes líneas, fue concebido por el sudafricano Rory Byrne, jefe de proyectos de Ferrari.
“La aerodinámica fue optimizada teniendo en cuenta el nuevo reglamento, –explicó el técnico–. Esto tiene una gran importancia puesto que son más exigentes que en 1998, por ejemplo, al obligarnos a modificar los chasis para mejorar la seguridad de los pilotos. El motor V10 fue rediseñado a fondo, lo mismo que las suspensiones, para que se adapten mejor a los neumáticos Bridgestone. Hubo un enorme desarrollo en todas las partes del auto, sobre todo en los alerones delanteros.”
El equipo Ferrari, Schumacher y Barrichello, por lo tanto, comenzará la temporada 2001 seguros de sus fuerzas. Pero también son conscientes de que habrá una competencia cada vez mayor. Especialmente por parte de McLaren-Mercedes. “En los papeles no veo grandes cambios con respecto al año pasado, pero está claro que no sabemos lo que han hecho los otros equipos. Pero al día de hoy esperamos una temporada casi idéntica a la 2000”, dijo Todt.
El parecer de los pilotos difiere muy poco. Si bien esperan pelear el título con McLaren, no decartan la posibilidad de la aparición de un tercero en discordia, Williams-BMW, quizás. Y probablemente de otros. “Pero únicamente con victorias ocasionales”, precisó Michael Schumacher.
Sin embargo, “siempre hay que enfrentar situaciones inesperadas –indicó Ross Brawn, el director técnico–. A lo mejor, McLaren pensó en algo que nosotros no tenemos”, concluyó.

Vendieron a la Minardi

La escudería Minardi se aseguró el martes su futuro en la Fórmula Uno tras anunciar que el magnate australiano de la aviación Paul Stoddart compró el equipo, por una suma estimada en 40 millones de dólares. La operación deja a Ferrari como el único equipo de propiedad italiana en la Fórmula Uno por primera vez desde la década de 1970, pues el fabricante automovilístico francés Renault compró Benetton el pasado año.
El acuerdo convierte a Stoddart, presidente del grupo de Aviación Europea, en el primer propietario australiano de F1 en las tres últimas décadas. “Minardi y Europea encajan como un guante –dijo Stoddart–. Después de varias idas y venidas, este acuerdo representa la solución ideal para todos los problemas de Minardi”, agregó.
Minardi estaba sin motores, pilotos y sponsor principal hasta la venta. Stoddart confirmó el uso de los motores Ford utilizados en la temporada pasada, aunque no hay confirmación acerca de los reemplazantes de Gastón Mazzacane y Marc Gené. “Estoy convencido de que esta colaboración nos llevará a grandes resultados –dijo Giancarlo Minardi–; yo pondré a disposición toda mi experiencia para que el equipo pueda demostrar lo que vale.” El italiano permanecerá como director del equipo.

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