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 Independiente se aseguró
el primer puesto del torneo de verano al empatar sin goles con Boca, en
un partido jugado en Mar del Plata, cuyo desarrollo lo favoreció
pero que no supo definir en la red. Con este resultado, Boca (5 puntos)
tiene que ganarle a Racing para poder quitarle el título a Independiente
(8 puntos). El torneo continúa mañana con River-San Lorenzo.
Desde el arranque estaban claras las dos propuestas. Piazza puso en la
cancha a lo mejor que tiene Independiente; Bianchi, en cambio, volvió
a innovar con una mixtura de titulares aplomados y juveniles en fogueo,
esta vez distintos a los jóvenes que jugaron contra Talleres. Hasta
la experimentación era despareja, porque si Bianchi usó
el partido para probar nuevos ensambles, Piazza la utilizó para
continuar ensamblando su formación elegida, la que arrancará
el torneo Clausura en dos semanas.
Y en la cancha tenía que producirse una diferencia entre lo que
entregaban una voluntad colectiva y la otra. Boca tuvo a favor, durante
el primer tiempo, el fuerte viento que azotaba el campo, pero salvo los
diez primeros minutos no pudo controlar la pelota, y el partido se transformó
en un monólogo de Independiente.
Basado en la movilidad y el quite de su mediocampo, el Rojo le escamoteó
la pelota que querían manejar Gaitán y Omar Pérez,
y comenzaron a abastecer principalmente a Vuoso, cuya rapidez y quiebre
de cintura hacían temblar la reputación de Ibarra.
El equipo de Bianchi había tenido un par de llegadas por intermedio
de Clemente Rodríguez, en sendas corridas con disparos al arco.
Pero su rival usaba el balón con mayor inteligencia, y como lo
controlaba con ciertacomodidad, inclinaba la cancha. Primero lo tuvo Forlán
tras una doble amague de Vuoso con centro atrás; después
fue un cabezazo del propio Cambiasso que cruzó todo el arco sin
que Vuoso pudiera acertar a empujarla; más tarde, cerca de la media
hora, una proyección de Vuoso por la derecha, que terminó
en un defectuoso centro atrás luego de que Rodríguez y Traverso
quedaran desairados; por último, un remate a la carrera de Prieto
que salió desviado.
A Independiente le faltaba la puntada final, y Boca no se desesperaba.
Entraba más en juego Guillermo que Herrera, pero siempre en cuentagotas.
Y el despliegue de Serna no alcanzaba en ambas áreas.
En el segundo período, el dominio de Independiente se mantuvo.
Sin embargo, la más clara del arranque la tuvo Boca, con una gambeta
de Guillermo en el área que Milito salvó sobre la raya.
Respondió el rival con un formidable remate de Cambiasso. Rocha
le contuvo un disparo a Herrera, y el ex Real Madrid devolvió con
un zurdazo que se fue cerca del palo. Pero el partido se fue sin que Independiente
pudiera plasmar su superioridad en el resultado.
AUNQUE
PINTADO DICE QUE FALTAN DETALLES
Aimar ya es ídolo en el Valencia
En medio de un clima de mucho
entusiasmo, Pablo Aimar llegó ayer a Valencia, donde era esperado
por más de 300 fanáticos en el aeropuerto de Manises. Al
grito de “vamos, vamos, campeón”, los hinchas del Valencia
le dieron la bienvenida a su nuevo ídolo, aun cuando el presidente
de River, David Pintado, aseguraba que el pase todavía no se había
concretado.
“Estoy muy feliz de estar aquí y lo que quiero es comenzar
a entrenarme tan pronto como sea posible”, fueron las primeras palabras
del jugador a los periodistas que lo recibieron en el aeropuerto. “Todo
el mundo con quien hablé me dijo buenas cosas del club. Solía
ver mucho la liga española en Argentina y conozco lo competitiva
que es”, señaló Aimar.
Luego de hacer una escala en Madrid, Aimar apareció ante la multitud
de aficionados vestido con ropa informal. Como ya sucedió con Palermo,
que recibió un jamón a su llegada al aeropuerto de Valencia,
la anécdota del recibimiento al jugador de River la protagonizaron
dos pintorescos seguidores valencianistas, conocidos como “los gemelos
de Rafelbunyol”, quienes detuvieron el vehículo que transportaba
a Aimar al hotel para entregarle un cesta de naranjas, fruto típico
de Valencia. También le mostraron una pancarta con la leyenda “Con
Aimar a ganar sin parar. Bienvenido pibe”. Valencia ya goza con la
llegada de su nuevo ídolo.
Habló
Diego y no se salvó nadie
Diego Maradona habló
desde Alemania y no se salvó nadie. Pelé, Joao Havelange,
Javier Castrilli, Daniel Passarella, los dirigentes de River y los políticos
argentinos fueron algunas de las víctimas de turno en las declaraciones
de Diego a Radio Mitre.
 Pelé: “¿Así
que lo están investigando por corrupción? Dios es justo,
por eso le pasa lo que le está pasando”.
Havelange: “No sabe lo
que es una pelota de fútbol, jugó al waterpolo. Le vendía
el arma a uno y las balas al otro, mirá qué malo que es.
Pero el malo de la película soy yo”.
Passarella: “Basta de
la mentira. Dicen ‘yo amo mi bandera’ y después van y
dirigen otro país. Passarella, ‘el Gran Capitán’
de la selección argentina hoy dirige a Uruguay. Me parece escupir
la bandera. O es ‘Gran Capitán’ o es gran desertor”.
Los dirigentes: “Los argentinos
bajamos 10 millones de dólares como si fuéramos a tomar
un café a la esquina. No me interesa lo que le quede a River, lo
que les quede a los dirigentes de River, porque siempre hay un picoteo”.
Castrilli: “En Argentina
te hacés el honesto, juntás en una conferencia de prensa
más de diez periodistas y te dan un cargo político. Lo meten
como el que va a impartir orden, como hacía en la cancha, y en
la cancha era un payaso”.
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