Por Diego Schurman
y Adriana Meyer

Los fiscales Eduardo Freiler y Federico Delgado impulsaron una denuncia penal contra Domingo Cavallo por presunta malversación de caudales públicos. La demanda había sido presentada por el abogado de la CGT rebelde, Héctor Recalde, al detectar la posible comisión de ese delito en la afirmación “por favor, no hablen más de los fondos reservados, porque ésa es la plata que hay para sacar las leyes”.
El textual figura en El Divorcio, de Martín Granovsky. Según el libro, Cavallo dijo la frase mientras se desempeñaba como ministro de Carlos Menem en un encuentro reservado con Carlos “Chacho” Alvarez, al que también concurrieron José Vitar y Graciela Fernández Meijide, actuales diputado del Frepaso y ministra de Desarrollo Social.
Recalde presentó la denuncia el 17 de enero. Además de la presunta comisión del delito de malversación de caudales públicos, el abogado de la CGT rebelde sospecha de otras dos violaciones a la ley: incumplimiento de los deberes de funcionario público y cohecho. Por sorteo, la causa recayó en el juzgado de Carlos Liporaci, el mismo magistrado que investiga la supuesta compra de votos en el Senado para la aprobación de la reforma laboral.
Hasta ahora la actitud de los tres testigos de la frase fue diferente. Alvarez optó por el mayor de los silencios, probablemente por haber sido uno de los promotores del ingreso de Cavallo al Gobierno. Fernández Meijide tampoco quiso pronunciarse sobre el tema. “Si hay una demanda de la Justicia se responderá a la demanda de la Justicia”, hizo saber a través de sus voceros.
Vitar, en cambio, admitió haber escuchado del ex ministro de Economía una peculiar concepción del manejo del dinero público. “No recuerdo bien las palabras precisas de Cavallo, pero sí el concepto de que él prefería no pelear los fondos estatales con destino a la política porque le parecía preferible eso y no que aparecieran fondos negros de cajas privadas”.
Por su parte, Granovsky abordó el tema en Villa Gesell, en una de las presentaciones de El Divorcio, donde ratificó la totalidad del contenido del libro. Los fiscales pidieron que el periodista fuera el primero en realizar una declaración testimonial para que precisara el contexto en el que Cavallo pronunció la frase y agregara todos aquellos datos que no signifiquen comprometer a las fuentes.
De todos modos, el libro y el propio Vitar dieron varias pistas al respecto. En la página 248 se explica que la reunión la solicitó Alvarez luego de ver a Cavallo en el programa de Mariano Grondona. El tema excluyente fue Alfredo Yabrán, a quien el ex ministro responsabilizó por la existencia de “una mafia enquistada en el poder”.
–Eran momentos donde se discutía la privatización del Correo y teníamos interés en producir una reunión con él –recordó Vitar en una conversación telefónica con este diario.
Si bien el interés de los fiscales es que el juez inicie la ronda de declaraciones con Granovsky, en su requerimiento para impulsar la acción penal, Freiler y Delgado ya le pidieron a Liporaci que convocara como testigos a Alvarez, Fernández Meijide y Vitar.
En cambio, Cavallo figura como “imputado” y por lo tanto su citación se decidiría más adelante, al menos en esta investigación. Es que los fiscales pidieron la presencia del ex ministro en la reciente apelación a la falta de mérito dictada por Liporaci en la causa por supuestos sobornos en el Senado. Al fin, se trata de un expediente conexo ya que también busca establecer la compra de votos en el Congreso.
En ese sentido, el polémico dictamen es claro cuando plantea la necesidad de que Cavallo declare “...sobre su posible conocimiento acerca de mecanismos de distribución de fondos reservados para facilitar la sanción de leyes”. El ex ministro, quien retornó el miércoles de Europa, transmitió nuevamente a este diario, mediante su vocero Sebastián García Díaz, que “por el momento” no hablará del tema.

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