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San Lorenzo continúa en problemas. Luego de la renuncia del técnico
Oscar Ruggeri, el equipo perdió anoche por 4-2 en su presentación
en la Copa Libertadores ante Jorge Wilstermann de Bolivia. Los jugadores
evidenciaron estar atravesando una profunda crisis anímica y futbolística.
El pobre desempeño que mostró en el torneo de verano parece
continuar también en el plano internacional.
De salida, el equipo boliviano se convirtió rápidamente
en dominador del juego. En los primeros minutos, a partir de la claridad
del argentino Guiberguis, Wilstermann se fue acercando al arquero Saja.
Y la primera aproximación con peligro fue a los dos minutos a través
de Cárdenas. El delantero desbordó por la izquierda y remató
cruzado, pero el tiro se fue al lado del palo. Y dos minutos más
tarde, a los cuatro, llegaría el primer gol del encuentro. Otro
argentino, Sozzani, convirtió de cabeza un tiro libre ejecutado
por Guiberguis.
A partir de ese momento, Wilstermann siguió presionando en el medio,
y no dejó que San Lorenzo se adelantara en el campo. Una de las
claves fue la posición de Tuzzio como volante central: el defensor
se encontraba perdido en ese lugar, y los bolivianos aprovecharon para
seguir teniendo la iniciativa. Y sobre el final del primer tiempo estuvieron
muy cerca de aumentar la ventaja, pero el colombiano Portocarrero salvó
en la línea un cabezazo de Cárdenas. Antes, Saja le desvió
un tiro a Cárdenas desde la derecha.
El conjunto ahora conducido por Víctor Hugo Doria no pudo construir
una sola jugada de peligro en toda la primera parte, y sólo se
acercó a Soria con tiros de media distancia. El que más
probó por esa vía fue el volante Leonardo Rodríguez.
El segundo tiempo fue una pesadilla para San Lorenzo. Los jugadores estuvieron
demasiado estáticos, y sólo en el final parecieron reaccionar.
Wilstermann aumentó, jugando cómodo, por intermedio de Cárdenas,
con un penal del arquero Soria, y otro toque de Galindo. Los descuentos
de Romagnoli (estuvo más movedizo que Rodríguez) y Portocarrero
no alcanzaron para tapar los problemas con los que convive San Lorenzo.
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Coloccini, refuerzo
sorpresa
El defensor del Milan y del seleccionado argentino Sub-20 Fabricio
Coloccini quedó ayer incorporado a San Lorenzo de Almagro
a préstamo por seis meses, en principio sin opción
de compra. Coloccini ya fue inscripto en la lista de buena fe que
presentó San Lorenzo, pocas horas antes del partido de anoche
ante el Jorge Wilstermann, en Cochabamba. La contratación
se formalizó ayer, pero el acuerdo por Coloccini se alcanzó
el martes a última hora. “La gente del Milan quiere
que agarre experiencia para que vaya más maduro a Europa”,
explicó el jugador, quien antes de pasar por el Milan jugó
en Argentinos y en Boca. Por el pase de Coloccini a San Lorenzo
se frustró el del mediocampista de Rosario Central Daniel
Quinteros, a pesar de que el martes ya le habían confirmado
de palabra que lo suyo estaba solucionado. “Estoy muerto. Me
hicieron viajar con la ropa para quedarme en Buenos Aires como jugador
de San Lorenzo y resulta que ahora no puede ser. El martes estuvimos
hasta las diez de la noche y estaba todo arreglado. Que actuaron
mal no queda ninguna duda”, sentenció el dolorido Quinteros.
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