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Por Diego Schurman
 El premio por la suspensión
del paro general que previsiblemente anunció ayer la CGT oficial
llegó por la noche: Patricia Bullrich le agendó a Rodolfo
Daer una nueva cumbre con Fernando de la Rúa. Será en los
próximos días, cuando el jefe cegetista y el Presidente
pongan en funcionamiento la denominada mesa de diálogo. En el ínterin
la ministra buscará sumar a esa comisión a la CGT rebelde
y la CTA, las otras dos centrales sindicales.
Daer había convocado a un paro de 36 horas para el 1 y 2 de marzo.
Lo hizo, sorprendentemente, con tres meses de anticipación, quejándose
por un cúmulo de medidas sobre las que destacó a la reforma
previsional, aunque en el fondo su gran preocupación sigue siendo
el futuro de las obras sociales.
Justamente una de las llaves que abrió la puerta del entendimiento
fue el compromiso del Gobierno de saldar la deuda de 37 millones de pesos
que mantiene con un grupo de obras sociales. La otra razón que
pesó en la suspensión de la medida de fuerza fue la dificultad
para garantizar el éxito de la huelga sin el apoyo de los gremios
del transporte, en su mayoría nucleados en la CGT rebelde de Hugo
Moyano.
La mesa de diálogo, que contemplará la participación
empresaria, fue un conveniente acuerdo entre el Gobierno y los sindicalistas
para poner en el freezer los gritos de guerra.
u Para los “gordos” –como se denomina a los dirigentes
de la CGT oficial– fue un bálsamo no solo porque estaban huérfanos
de apoyo gremial sino también de respaldo político. De hecho,
en el justicialismo, fuera y dentro del Congreso, nadie les obsequió
su hombro, apenas algunas palabras de comprensión en voz muy, pero
muy, baja.
u Para el gobierno la suspensión del paro fue un éxito en
si mismo. Pero, además, con la inclusión del gremialismo
en la mesa de diálogo –que le da a la CGT una legitimidad
que no lograba ni de sus pares ni del PJ– intentará brindar
contención para prevenir protestas futuras.
La mesa se pondrá en marcha entre mañana y el lunes. Daer
quería que fuera lo más rápido posible. Pero Bullrich
pidió un mayor plazo para sumar al rebelde Moyano, y al líder
de la CTA, Víctor De Gennaro, a la comisión tripartita.
El camionero dijo que participará si se amplía la agenda.
Es decir, si se incluye en las discusiones un aumento del salario mínimo
y la entrega de subsidios para jefes de familia desocupados, entre otros
temas que no contempla el programa oficial. El pedido por ahora suena
a utopía, sobre todo por la idea que deslizó días
atrás el jefe de Gabinete, Chrystian Colombo, de volver a podar
los salarios del sector público.
Con De Gennaro la discusión es otra. El Gobierno no quiere que
represente a la CTA junto a Luis D’Elía, uno de los líderes
de los piqueteros de La Matanza. Bullrich mantiene un duelo personal con
el dirigente, sobre el que pesan dos juicios por supuestos manejos irregulares
en la distribución de los planes Trabajar. El grado de conflictividad
de la CTA con la Alianza está en alza. La semana pasada marchó
denunciando el incumplimiento de la entrega de asistencia social y anunció
un paro para el 4 y 5 de abril contra el “modelo económico”.
Esos días se reúnen en el país los ministros de Economía
y cancilleres del Mercosur para tratar distintos temas referentes al tratado
del Area de Librecomercio de las Américas (ALCA).
Contrariamente, la CGT de Daer se ilusiona con tener mayor injerencia
en el Ejecutivo, transformando la mesa de diálogo en un consejo
económico social. Es decir, en una comisión de funcionamiento
permanente al estilo europeo, en donde se confeccionen proyectos de ley
con el consenso de empresarios y funcionarios.
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Audiencia por la Banelco
La CGT rebelde pedirá audiencia con el juez Gabriel Cavallo
para ponerse a disposición de las investigaciones sobre presuntos
pagos de coimas en el Senado. Así lo anunció ayer
el titular de ese sector, Hugo Moyano, uno de los que dijo haber
escuchado del ex ministro de Trabajo, Alberto Flamarique, “para
los senadores tenemos la Banelco”, un eufemismo para figurar
la compra de votos en la Cámara baja.
“El 98 por ciento de la población sabe que en el Senado
hubo joda. Y sin embargo acá los senadores se siguen candidateando
como si no pasara nada. En este país los únicos que
van en cana son los que roban gallinas o los que piden en el supermercado
para comer, pero lo que se afanaron el país deambulan de
un lado para el otro como si no pasara nada”, remató
Moyano.
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CORTE
DE RUTA EN LOMAS DE ZAMORA
“Congreso de los pobres”
Unos 150 desocupados mantuvieron
cortado ayer durante tres horas el Camino Negro, a la altura de la localidad
de Villa Centenario, en el partido de Lomas de Zamora, en reclamo del
otorgamiento de planes Trabajar.
Los manifestantes dijeron pertenecer a la agrupación de desempleados
Congreso de los Pobres, y realizaron el corte desde el mediodía
hasta las 15, quemando cubiertas e impidiendo el paso de vehículos
en el cruce del Camino Negro con la calle Virgen de Itatí.
Los piqueteros solicitaron planes Trabajar, una “tarifa social”
para el servicio eléctrico y aclaraciones al gobierno provincial
sobre el pago de terrenos fiscales que han sido ocupados por pobladores
de Villa Centenario. La protesta se levantó cuando llegaron al
lugar funcionarios de la Municipalidad de Lomas de Zamora, que se comprometieron
a elevar los reclamos al Ejecutivo bonaerense. El Congreso de los Pobres,
que organizó la protesta, nuclea a desocupados de la zona sur,
y ha decidido apoyar políticamente al Polo Social del sacerdote
Luis Farinello.
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