Por Susana Viau
El reporte del subcomité
del Senado norteamericano, todavía sorprendido por una operatoria
de magnitud nunca vista, ha dejado dos heridos graves en su
primera embestida: el Citibank y Raúl Moneta. Los disparos se escaparon
de la misma arma: el Federal Bank. El banco off shore de Bahamas, pivote
de una vasta y prolongada operación de circulación de dinero
de procedencia dudosa, fue definido, según los documentos incautados
por el subcomité, por el propio Martín López, el
hombre del Citibank encargado de las relaciones con el Grupo Moneta:
era el canal utilizado por los clientes de banca privada para
sacar dinero del país y reingresarlo blanqueado bajo la forma de
préstamos. Ese continuo y gigantesco back to
back que, en ocho años, movió mucho más de
4 mil millones de dólares correspondía a las 200 o 250 cuentas
de clientes del Federal Bank. La revelación de la identidad de
los titulares de esas cuentas, sin duda, podría encender la mecha
del mayor escándalo políticojudicial y financiero de que
se tenga memoria.
Prolijo, el Comité empezó por tratar de conocer las señas
de los propietarios del Federal Bank: En una conversación
telefónica con la cabeza del Banco Central de Bahamas, éste
confirmó al staff de minoría (del subcomité) que
el actual propietario del Federal Bank es similar al reportado por el
Citibank para el Grupo Moneta, con el 33 por ciento de las acciones para
Raúl Moneta; 33 por ciento para los miembros de la familia Moneta;
30 por ciento para Benito Jaime Lucini; el 3 por ciento para Pablo Juan
Lucini y el 1 por ciento propiedad de Jorge Rivarola. El primer
secreto a voces salía, con cierta facilidad y un telefonazo, a
la luz. Raúl Juan Pedro Moneta no podrá continuar alegando
que es ajeno a la fantasmagórica entidad.
En un segundo paso, un memorándum de febrero de 1997 firmado por
Martín López dejaba pocas dudas respecto a cuál era
la función del Federal Bank en la estructura operativa del Banco
República: a) para canalizar a los clientes de banca privada
del Banco República, a los que les provee el back to back y un
vehículo fuera de Argentina donde ellos pueden canalizar su dinero
y reubicarlo en el Banco República por medio del Federal Bank (...),
b) para canalizar el cash flow el flujo de efectivo de los
socios del Banco República y servirse con estos depósitos
y activos del Federal Bank como un puente, financiando los préstamos
dirigidos a las compañías asociadas con el CEI y c) para
financiar UFCO. El back to back (que la grafía
siempre práctica de los ejecutivos escribe como b2b)
es ni más ni menos que el mecanismo por el cual se saca al exterior
un dinero que vuelve en forma de préstamos otorgados
por off shores o sociedades opacas. En buen romance, la forma más
habitual de blanqueo o de lavado.
Luego, el subcomité indagó el rol del CEI (Citicorp Equity
Investment), propietario en la actualidad de un amplísimos espectro
de medios de comunicación: El Citibank no era sólo
corresponsal para el Banco República y el Federal Bank, el Citibank
era también socio con el Grupo Moneta, el Banco República
y, por un breve tiempo, con el Federal Bank en una compañía
holding llamada CEI Citicorp Holdings (...) Para comprender la relación
entre los bancos corresponsales es necesario también familiarizarse
con su colaboración de negocios. Tal como adelantó
este diario en su edición del domingo 25, el Federal Bank era socio
del Citi y de Moneta en el CEI. Un dato más para ilustrar que el
Citi y Moneta falseaban la realidad cuando afirmaban ignorar quiénes
eran los dueños del Federal Bank.
El informe puntualiza asimismo cuándo se iniciaron las relaciones
de corresponsalía del Citibank con el Banco República y
el Federal Bank: El Citibank abrió su cuenta corresponsal
con el Banco República en 1989. Y abrió su cuenta de corresponsal
con el Federal Bank en 1992. Las fechas no son una pura casualidad.
La relación con el República (1989) coincide con la asunción
presidencial de Carlos Menem; la cuenta corresponsal conel Federal es
de 1992, el comienzo de las privatizaciones. El mismo citibanker responsable
de las relaciones con el grupo Moneta, Martín López, reconoció
ante el subcomité que, en esa calidad, nunca visitó
(el Federal Bank) y no sabe si alguien del Citibank lo hizo. Preguntado
acerca de dónde estaba domiciliado el banco, Lopez dijo que tenía
el feeling de que era en Uruguay, en las oficinas de algún
representante o abogado.
El subcomité preguntó a Lagos por qué el Citibank
había dicho ignorar quiénes eran los propietarios del Federal
Bank y López contestó que no había visto la carta
pero supo que el BCRA buscaba información sobre el Federal Bank
y tuvo la impresión (nuevamente el feeling) de que el Central estaba
jugando algún tipo de juego. Repreguntado acerca del
sentido de esa frase, López explicó que porque uno de los
firmantes de la carta había sido previamente el encargado de las
relaciones con instituciones financieras del Boston Bank y debía
conocer a los propietarios del Federal Bank. López agregó
que mantuvo una conversación al respecto con el consejo del Citibank
de Argentina y con su presidente, Carlos Fedrigotti, en la que opinó
que el Citibank no debía responder positivamente el pedido de aclaración.
Luego de esa charla, dijo, Fedrigotti escribió la carta y la envió.
Agregó que Fedrigotti sabía definitivamente
por esa época que el Federal Bank pertenecía al Grupo Moneta
pero que, su negativa fue técnicamente correcta puesto
que no tenía ninguna prueba legal para documentarlo y esa información
debía estar guardada en el Citibank de Nueva York. Los formalismos
y argumentos técnicos quizás no alcancen el
viernes para que los citibankers respondan en audiencia pública
por qué negaron conocer lo que conocían a la perfección.
Carlos Fedrigotti es, junto a López, uno de los testimoniantes
citados por el subcomité.
El subcomité del Senado hizo en su informe especial hincapié
en el desusado volumen de las operaciones investigadas entre el Federal
Bank, el Citibank de Nueva York y el Banco República: El
staff revisó las declaraciones mensuales del Federal Bank en su
cuenta corresponsal del Citibank y determinó que (...) desde noviembre
de 1992 hasta mayo del 2000 se movieron más de 4.400 millones de
pesos . Esta cifra excede la cualquiera de los otros bancos off shore
que, durante el mismo período, fueron examinados por el staff.
Los cuates
El capítulo argentino del informe del subcomité de investigaciones
denota en sus proporciones la importancia de las operaciones sospechosas
de lavado realizadas por los bancos norteamericanos con los bancos argentinos.
Los otros dos casos investigados, además del Federal Bank, son
el de la financiera Mercado Abierto, propiedad del financista Aldo Ducler,
acusado de canalizar el dinero del cartel de Juárez (ver páginas
4 y 5). Esas tres situaciones tienen para el subcomité un común
denominador: la presencia del Citibank como banco corresponsal y como
escala de la cuenta en la que se albergó parte de la coima del
Proyecto Centenario.
Claves
Los investigadores
del Senado norteamericano quedaron muy sorprendidos con la magnitud
de las operaciones de la off shore Federal Bank.
Los asombró la
cantidad de dinero transferida y la cantidad de movimientos en plazos
notablemente cortos.
Carl Levin, el presidente
del Subcomité, se ocupa de temas de lavado de dinero desde
hace más de 20 años.
En el informe emitido
ayer, los senadores dijeron que no habían visto un fenómeno
así en ningún otro caso mundial.
Tal como adelantó
Página/12, el Senado dio por probada que el Federal pertenecía
a Raúl Moneta.
Estableció que
el Citibank no solo sabía ese dato clave: también
que ese régimen de propiedad era central en la relación
entre el Citi y el Federal.
Para los senadores, la
llave de esa centralidad está dada por la asociación
entre el Citi y Moneta, que se extiende así al Citi y el
Federal.
El subcomité retó
al Citi porque no siguió normas estrictas sobre lavado de
dinero frente a una entidad montada en un lugar que, como Bahamas
hasta el año pasado, estaba considerada como plaza de alto
riesgo por su capacidad de convertir dinero negro en blanco.
También explicó
las triangulaciones con Mercado Abierto, de Aldo Ducler, y el propio
Federal Bank, en un caso para reciclar dinero del narcotráfico
y en otro para transferir, hasta donde pudo ser probado, un millón
de dólares proveniente de coimas.
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Maggio tiró
la toalla
Pablo Maggio, abogado del Citibank, asesor de Nicolás Di
Tullio en la entrevista que el hombre acusado de invertir dinero
del cartel de Juárez mantuvo con el agente especial de la
aduana norteamericana Perino, y asesor del director del Banco Central
Manuel Domper, decidió ayer no volver a renovar su contrato
con el BCRA. Según se explicó extraoficialmente, Maggio,
que tenía un despacho al lado de Domper, encargado de monitorear
el control de lavado de dinero, dijo que su alejamiento se debía
al tratamiento que la prensa había dado a su nombre. Oficialmente,
el Banco Central sí informó, en cambio, que Pablo
Maggio no es abogado de Nicolás Di Tullio. El abogado de
Nicolás Di Tullio es Eduardo Marquardt. Página/12
pudo corroborar que Marquardt compartió tareas profesionales
junto a Daniel Saint-Jean, socio en la actualidad de Pablo Maggio
y letrados ambos del Citibank NA.
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LAS
INVESTIGACIONES DE LA BICAMERAL PARLAMENTARIA
El foco puesto sobre Pou
Por Felipe Yapur
La comisión bicameral
especial sobre el lavado de dinero celebrará hoy su tercer encuentro
donde, como sucedió en los dos anteriores, recibirá más
material y, según adelantaron sus integrantes, definirá
un cronograma de citaciones entre las que estaría incluido Pedro
Pou. La reunión se realizará inmediatamente después
de que finalice la Asamblea Legislativa donde Fernando de la Rúa
inaugurará el nuevo período de sesiones ordinarias.
Hace quince días los bloques de senadores y diputados de la Alianza
anunciaron prácticamente al unísono la intención
de impulsar la remoción de Pedro Pou de la presidencia del Banco
Central de la República Argentina (BCRA), fruto de las denuncias
por lavado de dinero. Los primeros convocaron a la comisión bicameral
especial que debe aconsejar la continuidad o no del titular del Central
al presidente Fernando de la Rúa. Los miembros de la Cámara
baja anunciaron la conformación de una comisión investigadora.
La primera funciona, lenta, pero por ahora camina. La de Diputados todavía
no se concretó, aunque en el bloque oficialista juran que comienza
la semana que viene.
Durante estas últimas dos semanas que pasaron, la conducción
del bloque de la Alianza se reunió dos veces con los diputados
que investigaron el lavado de dinero, la radical Elisa Carrió y
el demócrata Gustavo Gutiérrez. En esos encuentros se acordó
la convocatoria de la comisión investigadora, se decidió
que estará integrada por los titulares de los bloques y se les
ofreció a los dos legisladores la presidencia y la vicepresidencia
de la comisión. Según fuentes de la bancada oficialista,
éstos aceptaron el convite.
No está pinchada la comisión, aseguran en el
sector frepasista, y agregan que cuando regresen Carrió y
Gutiérrez de los Estados Unidos la comisión comenzará
a trabajar. Asimismo indicaron que la duración de la comisión
prácticamente está acordada y que no superará los
tres meses. En el bloque radical, las coincidencias son totales.
Los
datos son contundentes
Por Eduardo Tagliaferro
Detrás de su ronquera
hay algo más que cansancio. La línea telefónica trae
también cierta satisfacción por la contundencia del informe
del Subcomité del Senado norteamericano. En diálogo con
Página/12 desde Washington, la diputada Elisa Carrió dice
que se abre la posibilidad de construir una República en
serio.
¿Tanto la entusiasmó la audiencia en la que se conoció
el informe del subcomité presidido por el senador Carl Levin?
La audiencia ha superado con creces todas las expectativas. Casi
la mitad del informe está dedicado a las maniobras del Federal
Bank en triangulación con el Banco República y el Citibank
de Nueva York. En este sentido es más de lo que nosotros pensábamos,
el informe ha sido contundente.
¿En qué se expresa su contundencia?
En los datos. Se ha demostrado que mintieron los miembros del Citibank
de Nueva York, los responsables del Citibank Argentina y (el banquero
Raúl) Moneta. Todos han mentido con el objetivo de esconder al
verdadero dueño del Federal Bank. Hoy se sabe que el Federal Bank
pertenece al grupo Moneta.
Además de ocultar la pertenencia del Federal Bank a Moneta,
¿se ocultan detrás de esta maniobra fondos proveniente de
la corrupción?
El Federal Bank estaba destinado a encubrir y canalizar inversiones.
En este informe se ha demostrado que hay operaciones sospechosas de millones
y millones de dólares. Después habrá que determinar
si el origen de estos fondos es la corrupción, dinero sucio de
las privatizaciones, narcotráfico o alguna otra cosa.
¿De este informe surgen indicios que la Justicia argentina
podría incorporar a causas que estén en trámite?
Se habla de la cuenta Daforel, mencionada en la causa por la venta
ilegal de armas. En el tema de IBM-Banco Nación aparece Gastón
Figueroa Alcorta (ex asesor de Claudia Bello). Pero hay casos en los que
habrá que profundizar, por ejemplo el de un funcionario que no
está acusado por la Justicia pero que tiene una cuenta de dos millones
de dólares. Este funcionario va a tener que explicar el origen
de esa cuenta. Nosotros sabemos que ahí hay un delito, pero en
realidad, al no tener causa abierta en la Argentina, no hay evidencia,
como sí la hay en el caso IBM-Banco Nación. Por eso el caso
de este funcionario no figura en el informe.
¿El Senado comprobó que detrás de Moneta hay
personajes vinculados al poder político de la última década?
En principio se prueba la complicidad de Moneta con John Reed, Richard
Handley y Bill Rhodes, todos directivos del Citibank. Moneta es el testaferro
de negocios que no pertenecen al sector político por excelencia,
aunque pueda haber tenido, en algunos casos, negocios con funcionarios
políticos.
¿Todo esto con la aquiescencia de Pou, titular del BCRA?
Estamos frente a una mega operación de lavado de dinero.
La audiencia ha superado todas las expectativas, no sólo por el
espacio que se le dedicó al tema sino también por la contundencia
de lo datos. En este sentido es más de lo que nosotros pensábamos.
Pou no sólo no investigó sino ahora también se informa
que le habría expedido una especie de certificado a Carlos Fedrigotti
para que esté presente en la audiencia del próximo viernes.
Además habrá que investigar el comportamiento del directorio
del Central. Entre ellos el caso de Javier Bolzico, un hombre de (Alberto)
Kohan.
¿Qué cambiará en la política argentina
luego de este informe?
El informe puede ser una bisagra. A partir de ahora se abre la posibilidad
de construir una República en serio, ya que el modelo tuvo que
tener una justicia adicta. Este informe es una reivindicación de
la política, muestra que cuando hay voluntad y se trabaja se puede
llegar ala verdad y la justicia. Ahora dependera de la investigación
que se realice en la Argentina. Estamos frente a un hecho de relevancia
mundial. Es el primer caso de lavado de dinero investigado por este subcomité
que complica a las autoridades de bancos privados, del Central y de la
Justicia. La batalla recién empieza.
Al
rengo hay que verlo caminar
Por E. T.
Por un lado, estaba pendiente
del informe del Subcomité del Senado norteamericano, ya que significaba
la conclusión de años de investigaciones iniciadas en Mendoza,
su provincia. Por el otro, el diputado Gustavo Gutiérrez seguía
con atención el plenario que en Buenos Aires realizaba el Consejo
de la Magistratura, finalmente frustrado, para decidir la suerte del juez
Luis Leiva, que precisamente instruyó la caída del Banco
Mendoza. Tan sorprendidos por la falta de controles del BCRA, aquí
están desconcertados por el no funcionamiento de la Justicia argentina,
dijo en diálogo con Página/12.
¿El informe del Subcomité da precisiones, nombres
y apellidos vinculados en la maniobra de triangulación de fondos?
¿Hay nombres vinculados a la política argentina?
En la lista sí hay nombres. Pero sobre el informe no quiero
hablar. Ni Carrió ni yo queremos farandulizar este tema. Hay que
ver la operatoria en su conjunto. Todavía debemos leer atentamente
el informe y hacer una traducción correcta. Luego ordenaremos las
transferencias, fundamentalmente de los funcionarios públicos,
y veremos cuáles son las figuras delictivas en las que se encuadrarían.
¿Qué cargos podrían corresponderles a los implicados
en las maniobras?
Evasión impositiva es la figura en la que podrían
encuadrarse transferencias de dinero tan importantes. También podría
haber incumplimiento de los deberes de funcionario público. Hasta
la sanción de la ley de lavado y su reglamentación, se consideraba
lavado lo que provenía de la droga. Pero en los casos de evasión
se puede aplicar la ley penal tributaria.
¿Cuál fue la mayor sorpresa entre los investigadores
norteamericanos?
El contexto político en el que se produjo el informe es mucho
más de lo que esperábamos. Por su dureza, el Senado norteamericano
actuó contra el Citibank como lo hizo contra la empresa Microsoft.
¿Qué otras cosas le llamaron la atención del
subcomité?
Nos llamó la atención la dureza del senador Carl Levin.
Investigando el Citibank de Nueva York, no entienden cómo pudo
manejar esa masa de fondos sin informar, sin que existieran controles
del BCRA, sin que interviniera la Justicia. Más que por los incumplimientos
del Central, aquí están desconcertados por la no existencia
de Justicia en la Argentina.
¿De este informe se desprenden pruebas que podrían
ser incorporadas a expedientes como el de IBM-Banco Nación o la
venta ilegal de armas, por ejemplo?
Si la Justicia argentina quiere investigar hay elementos. En la
Argentina no se está investigando a nadie, salvo a (Víctor)
Alderete y María Julia Alsogaray.
¿Evalúa que la Justicia argentina iniciará
nuevas actuaciones?
Le voy a responder con un dicho del campo. Al rengo hay que verlo
caminar para ver de que lado renguea. Si nosotros nos hubiéramos
comportado como el juez Adolfo Bagnasco, que cada vez que venía
a Estados Unidos realizaba una conferencia de prensa, seguramente no hubiéramos
avanzado mucho. Como muestra fíjese como se comportó el
Consejo de la Magistratura en el caso del juez Luis Leiva.
¿Qué opinión tiene de la reunión plenaria
del Consejo?
Poca vida le doy al Consejo de la Magistratura si acepta presiones
como las que realizaron Moneta y Manzano, que se encargaron personalmente
de llamar a los consejeros para influir en su decisión. Si no pregúntele
al senador Antonio Romero Feris, que no atendió sus llamados.
¿Qué se puede esperar de las audiencias públicas
de hoy y mañana? ¿Cómo continúa el tema?
Las audiencias serán muy importantes. Se podrán escuchar
explicaciones de boca de los propios funcionarios del Citibank, e incluso
existe la posibilidad que alguno de ellos se arrepienta y confiese mayores
cosas. El Senado nos hizo depositarios de las 25 cajas con el detalle
del informe y la documentación de las transferencias y boletas
de depósitos. Nosotros las entregaremos a las autoridades del Parlamento
argentino.
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