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ATENTAN CONTRA UN SECRETARIO DE LITERAS
“Un mensaje al juez”

Ingresaron a la casa del secretario Pablo Bertuzzi. Sólo robaron su computadora, dejaron un cuchillo sobre su cama y dos escobas cruzadas. Mientras, el juez Literas desmintió su renuncia.

Mensaje: Sus papeles estaban revueltos en forma concienzuda, había sobres y cajones abiertos. Los delincuentes no robaron ningún objeto de valor.

Ayer violaron el domicilio
de un secretario de Literas.

Por Adriana Meyer

Ayer fue un día muy agitado en el juzgado de Gustavo Literas, el magistrado que investiga al banquero menemista Raúl Moneta. Uno de sus secretarios, Pablo Bertuzzi, sufrió una intimidación cuando desconocidos ingresaron a su domicilio, le robaron la computadora portátil, dejaron un cuchillo sobre su cama, dos escobas cruzadas en el jardín y grabaron música clásica en su contestador. “Aunque no soy el secretario del caso Moneta no descartamos que haya sido un mensaje para el juez”, comentó Bertuzzi a Página/12. Mientras Literas se enteraba de los detalles del ataque desmentía a este diario su alejamiento del cargo (ver aparte).
Pablo Bertuzzi es el secretario federal que redactó el procesamiento de los jefes de la Fuerza Aérea y de las autoridades de LAPA por la catástrofe aérea que provocó 67 muertes en 1999. Vive solo en una casa ubicada en Temperley. El martes, cerca de las 21, sus padres –que viven en la misma cuadra– le avisaron que alguien había entrado en su domicilio. Al llegar Bertuzzi encontró las rejas forzadas, el living y el comedor intactos, el televisor y el equipo de música en su lugar, pero se sobresaltó al ingresar a su estudio. Sus papeles estaban revueltos en forma concienzuda, había sobres y cajones abiertos. Los delincuentes no robaron ningún objeto de valor, pero realizaron una tarea muy puntillosa con los elementos de trabajo del secretario federal, que hasta ayer no había encontrado ánimo de revisar si le faltaba alguno de ellos.
Cuando llegó a su dormitorio advirtió que tampoco se habían fijado en los trajes, su reloj u otro objeto personal, pero faltaba su notebook y una impresora. Bertuzzi explicó a Página/12 que allí tenía copias de resoluciones del caso LAPA y de una investigación sobre hackers que vulneraron el sistema informático de la Corte Suprema, pero no había ningún documento original. “Quizás no querían impedir nuestro trabajo, sino sólo saber en qué andamos”, reflexionó.
Sobre la cama encontró uno de sus cuchillos de colección cruzado con la propia vaina y en el jardín los intrusos repitieron el mensaje –cuyo sentido es desconocido para Bertuzzi– formando una cruz con dos escobas. Los cuchillos estaban en el living y fue lo único que tocaron en esa parte de la casa. El secretario reconoció que no es un conocedor de la música clásica de modo que, si quisieron darle alguna señal, no logró captarla. A continuación había una voz femenina que preguntaba: “¿estás ahí?”. Pero, al parecer, no tiene nada que ver con la intimidación.
“No tengo problemas personales, creo que esto debe ser por mi trabajo pero aún no puedo descifrar de dónde viene el mensaje”, comentó Bertuzzi. Además de la causa por el accidente de LAPA y el asunto de los hackers tiene a su cargo el proceso por la caída del banco Medefin, cuyo directorio fue llamado recientemente a indagatoria, y gran cantidad de casos de drogas.
“Cacho” Bertuzzi ocupa la secretaría federal 24 que corresponde al juzgado que ocupaba Carlos Branca, ahora subrogado por Literas. Entró a Tribunales a los 18 años, en el juzgado federal 3, y fue discípulo del ex juez Néstor Blondi. Cuando Branca sintió que su situación empeoraba lo nombró secretario como una forma de cambiar la imagen del juzgado: Bertuzzi representaba un funcionario de carrera y sin manchas. Goza del aprecio de la mayoría de sus colegas.
El juez federal de Lomas de Zamora Jorge Ferreyro Pella está investigando la intimidación a partir de la denuncia que hizo Bertuzzi en la Policía Federal. La división Científica encontró en la casa algunas huellas que les permitirían trabajar con una pista firme. Aunque el secretario de Literas se resiste a tener custodia, Ferreyro Pella habría ordenado que uniformados sigan sus movimientos las 24 horas.

 

Becerra en la mira

El Procurador General de la Nación apareció ayer en la tan vapuleada trama del lavado de dinero. El abogado Ricardo Monner Sans advirtió al senador Mario Losada –en su carácter de presidente de la comisión parlamentaria que debe dictaminar sobre la continuidad de Pedro Pou al frente del Banco Central– sobre dos revelaciones que involucrarían a Nicolás Becerra. El letrado cita un párrafo escrito el domingo 25 de febrero por Joaquín Morales Solá en el diario La Nación: “Moneta, Ducler y las últimas conducciones del Citibank de la Argentina quedarían seriamente dañados con el informe de Washington. El jefe de los fiscales podría resultar cuestionado también por los favores judiciales que le habría hecho a su comprovinciano Moneta”. Y reproduce una frase del libro de Juan Gasparini y Rodrigo de Castro Pinochet-Al Kassar-Menem, la delgada línea blanca, narcoterrorismo en Chile y Argentina: “Becerra fue sorprendido en flagrante fuga de divisas efectuada por conducto de la casa de cambios Cash”. Monner Sans presentará hoy el mismo escrito en los juzgados de Jorge Ballestero y Gustavo Literas que investigan causas relacionadas con el lavado de dinero, y también dejará una copia en manos de la Unidad Fiscal de Investigación Tributaria y Contrabando (UFITCO), que depende de Becerra. Según el abogado, el estudio de Luis Moreno Ocampo se habría contactado con Gasparini en el marco de una posible querella penal por calumnias e injurias. Sin embargo, esa iniciativa estaría –por ahora– desactivada. La preocupación de Monner Sans se centra en la posible designación de Becerra en la comisión oficial que investigará los casos de lavado de dinero y evasión.

 

LEIVA NEGO VERSIONES SOBRE SU INMEDIATA RENUNCIA
“Tengo cosas pendientes acá”

Por A.M.

En los convulsionados tribunales federales de Retiro ayer jugaron al teléfono descompuesto. Aunque distintas fuentes aseguraban que el juez federal Gustavo Literas estaba a punto de presentar su renuncia, este magistrado negó que eso fuera a ocurrir en lo inmediato. El ex juez de la Corte Suprema Mariano Cavagna Martínez visitó a la camarista Luisa Riva Aramayo y le habría anunciado que “se lleva” dos jueces a su estudio: Adolfo Bagnasco y Literas. Este último no niega que ése será su destino cuando decida abandonar el cargo, e incluso ya pidió a la Corte Suprema que hiciera una auditoría de su juzgado, pero insistió en desmentir la versión de su renuncia. “Cavagna me invitó, pero nunca le dije que sí porque aún tengo cosas pendientes acá”, explicó Literas.
Para ratificar que no tiene intenciones de dimitir, el magistrado aseguró a Página/12 que tiene pensado viajar a los Estados Unidos por el caso Moneta. En esa causa investiga el presunto vaciamiento del Banco República y sostiene que ya tiene acreditados los mecanismos que habría utilizado quien fuera el banquero preferido de Carlos Menem. El interés de Literas tiene que ver con los nombres que podría aportarle el demócrata Carl Levin, a cargo de la comisión especial sobre lavado de dinero en el Senado norteamericano.
No caben dudas de que Cavagna Martínez se reunió con Riva Aramayo. Sin embargo, fuentes de la Cámara Federal indicaron que la visita sólo tuvo razones profesionales. “No tienen tanta confianza y además no es el modo adecuado”, explicó un funcionario. Pero cuando este diario le comentó que Literas había pedido una auditoría a la Corte Suprema –al igual que su colega Bagnasco– no dudó en exclamar: “Entonces se va”.
En la Cámara están sorprendidos por esta modalidad (requerir ser auditados) que califican de “insólita”. Sostienen que los ignoraron como sus superiores jerárquicos. Literas argumentó que acudió al Alto Tribunal porque “la constante exposición pública que han alcanzado determinadas causas han llevado a que distintos sectores cuestionen la imparcialidad e idoneidad con las que el suscripto desempeña su función”. Y pidió que la medida fuera ejecutada “a la brevedad” porque la situación descripta “compromete el ejercicio” de su tarea como juez. De hecho, ayer la diputada Elisa Carrió afirmó que “Literas es Moneta”. El magistrado le respondió que, “si esto fuera así, ella no habría llevado copias del expediente del caso a los Estados Unidos”.

 

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