El
presidente Fernando de la Rúa inauguró ayer el ciclo lectivo
con una apelación a una educación igualitaria
en la que las escuelas más humildes tengan el mismo nivel
de las grandes escuelas. Aprovechando una pausa de su agenda casi
monopolizada por la asunción del nuevo ministro de Economía,
Ricardo López Murphy, De la Rúa visitó imprevistamente
la Escuela Nº 6 Carlos Guido y Spano, de Villa Luro,
donde pronunció el discurso oficial de apertura de clases. Todos
los niños son iguales en su derecho de aprender y todos los maestros
son iguales en su derecho a enseñar en condiciones dignas,
destacó ante maestros y alumnos. A pesar de las palabras presidenciales,
los gremios docentes no mostraron nada de optimismo para el año
escolar que comienza. La titular de CTERA, Marta Maffei, pronosticó
que las clases vienen mal: el Pacto firmado entre la Nación
y las provincias congela los recursos por cinco años. No se podrá
absorber el aumento de la cantidad de alumnos. Sí o sí habrá
conflicto.
Las clases comenzaron en Capital, Formosa, Jujuy, La Rioja, Entre Ríos,
San Juan, Neuquén, Santa Cruz, Santiago del Estero, Tucumán,
Santa Fe y Tierra del Fuego. A pesar de los atrasos en el pago del incentivo
docente, un acuerdo de último momento con la Ctera alejó
el fantasma de la huelga. Por eso, las autoridades de la cartera educativa
expresaron su satisfacción por el inicio del ciclo lectivo, que
no padeció demasiados contratiempos, salvo un paro con mucho acatamiento
en Santiago del Estero y algunos problemas edilicios en La Rioja. Pero,
para el Gobierno, algo empalideció el regreso a las aulas: la foja
de servicios del nuevo funcionario del Palacio de Hacienda ha despertado
en los gremios temores posiblemente fundados. Ha tenido siempre
una posición dura respecto a la educación pública,
incluso ha planteado la privatización y la modificación
del Estatuto del Docente, destacó ayer Maffei, con alarma.
El ministro Hugo Juri se refirió a esos temas en diálogo
con Página/12 unas horas después de protagonizar otro de
los actos de inauguración, esta vez en Hernandarias (Entre Ríos),
junto con el secretario de Educación Básica, Andrés
Delich. Yo no puedo anticipar conflictos porque la política
educativa es una política de la Alianza. Es posible que haya algunos
momentos de tensión con el tema del incentivo docente, pero no
porque no se lo quiera pagar, ya que está incluido en el presupuesto,
señaló. Cómo es percibido López Murphy
es algo que deben contestar los gremios. Yo no voy a hacer presunciones
sobre lo que están percibiendo. López Murphy es miembro
del gabinete desde el inicio del gobierno de la Alianza, agregó.
A pesar de que el año lectivo promete convulsiones, el Presidente
se dedicó a enumerar los objetivos del Gobierno para el área.
Así, por ejemplo, subrayó que la educación
es prioridad y volvió a insistir -como a fines del año
pasado, en la inauguración del portal Educ.Ar en la necesidad
de que la informática e internet se incorporen a todas las
escuelas del país. En esa dirección, De la Rúa
explicó los fines del proyecto que coordina su hijo Fernando Aíto,
que permitirá conectar todas las escuelas a la red para capacitar
(a los alumnos) en el uso de esta nueva tecnología y para que navegando
por ella conozcan el mundo. La visita del mandatario a la escuela
Carlos Guido y Spano de Villa Luro estuvo precedida por una
serie de vacilaciones propia de los cambios de planes generados por el
cambio de gabinete. En un primer momento, De la Rúa tenía
previsto hacer un acto desde la Base Marambio, con la presencia de alumnos
de escuelas de Tierra del Fuego. Descartada esa posibilidad, se pensó
en dirigir un mensaje por cadena oficial desde la Casa Rosada. Finalmente,
se decidió por el establecimiento porteño, en donde estuvo
acompañado por el secretario de Educación, Daniel Filmus.
En Entre Ríos, el ministro de Educación, por su parte, también
se dedicó a celebrar el retorno a las aulas. Acompañado
por el arzobispo local, monseñor Estanislao Karlic, y el gobernador
Sergio Montiel, Juri afirmó -a tono con las declaraciones del Presidente
que los pilares de su gestión son la calidad
educativa y la equidad y remarcó la importanciade que se
sancione el proyecto de ley que garantice un mínimo de 180 días
de clase. Además, explicó las características
del Proyecto Equidad, una iniciativa oficial que prevé
la entrega de libros de textos a 14 mil escuelas de todo el país,
lo que equivale a 1.200.000 estudiantes.
En un día en que coincidieron diversos actos, la Ciudad de Buenos
Aires tuvo también el suyo. El jefe de Gobierno, Aníbal
Ibarra, y su vice, Cecilia Felgueras, se hicieron presentes, junto con
Filmus, en la escuela nº 22 Hipólito Bouchard,
de Flores Sur, una de las escuelas bilingües impulsadas por esta
gestión de la Alianza. Es un compromiso y un símbolo
iniciar este ciclo lectivo en una de las escuelas que incorpora el bilingüismo.
Hoy ya no alcanza saber leer y escribir en una sola lengua; es necesario
dominar al menos otra, dijo Ibarra. Hasta ahora los establecimientos
educativos que incorporaron este programa son sólo 12. Pero en
el gobierno de la ciudad esperan que el plan piloto se vaya
extendiendo a otros centros de enseñanza de la jurisdicción.
Informe: Martín Piqué.
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