|
Con
una brillante demostración de manejo y confirmando todo lo bueno
que había desarrollado durante el fin de semana, el arrecifeño
Marcos Di Palma (Chevrolet) se impuso en la final del Turismo Carretera
en el autódromo de Nueve de Julio, tercera del calendario 2001.
La segunda ubicación le correspondió al piloto de Tandil,
Fabián Acuña (Ford), tercero fue el campeón Guillermo
Ortelli (Chevrolet), cuarto Rafael Verna (Ford) y quinto finalizó
Ernesto “Tito” Bessone (Dodge).
En pista, la quinta posición había quedado en poder del
“Pumita” Diego Aventín (Ford), pero por un incidente
que mantuvo con Bessone en el último giro recibió un recargo
de 30 segundos por “maniobra peligrosa” y así quedó
muy relegado en la clasificación final.
El más chico de los hermanos Di Palma había comenzado su
exitosa mañana adjudicándose la primera de las tres series,
a seis vueltas, también en forma contundente, y con los valiosos
puntos obtenidos se colocó en la segunda ubicación del campeonato
a sólo cinco puntos del líder, el “Gurí”
Martínez.
Si bien ganó en forma contundente, Marquitos esperó pacientemente
en un lugar del circuito para realizar su acostumbrado festejo con el
derrape de su auto, luego llegó el momento de las declaraciones
y ahí le dedicó el triunfo a la familia de Jorge Recalde,
fallecido el sábado, porque “yo sé lo que es pasar
por ese dolor. Seguramente, allá en el cielo estará junto
a mi viejo manejando, corriendo y divirtiéndose con un auto”,
manifestó el piloto de Arrecifes.
Al referirse al desarrollo de la competencia, el menor de los Di Palma
señaló que “en las maniobras de paso con Verna y Acuña
no tuve problemas, fue difícil porque ellos también andaban
muy bien”.
Con respecto al repetido festejo que realiza cada vez que gana una carrera
—con el de ayer lleva conseguidos 5 triunfos en el TC— y que
le ha costado algunas importantes multas económicas, Marquitos
indicó que “esta vez lo hice en un lugar tranquilo, ellos
(por los dirigentes) lo evaluarán, pero no creo que me vayan a
sancionar”.
Consultado sobre si ahora se “tirará” a la obtención
del campeonato, Di Palma aseguró que “me da lo mismo, no pienso
en eso. Yo quiero luchar para que el TC sea cada día más
grande”.
El tandilense Fabián Acuña se mostró muy contento
por el segundo lugar obtenido y que fue su primer podio en mucho tiempo.
“El auto funcionó bien, mientras estuve en la punta traté
de hacer diferencias pero los que venía atrás no me dejaron.
Estoy feliz porque al final pude mantener el segundo puesto. Necesitaba
terminar así una carrera”, expresó Acuña.
Con mucha tranquilidad y algo de resignación, el campeón
Guillermo Ortelli sostuvo que “fue una carrera bárbara”,
aunque luego se mostró algo fastidioso por lo que él considera
algunas maniobras poco habituales de Acuña. “Me sorprendió
mucho con sus maniobras de frenaje, son cosas de las carreras pero ya
pasó”, enfatizó.
En tanto, el “Gurí” Omar Martínez lamentó
el despiste de la serie que lo retrasó en la final, pero consideró
muy positivo el desempeño de su auto en la última parte
de la carrera. “Fue una carrera dura, muy difícil para avanzar
desde atrás. Pero no me puedo quejar porque tuvimos un buen resultado
porque el auto tuvo un buen ritmo en la parte final”, indicó
Martínez.
El piloto entrerriano consideró que el sexto puesto fue muy bueno
para sus aspiraciones de llegar al título de la presente temporada
y precisó que “es cierto, estuvimos beneficiados por unos
toques, pero las carreras son así. Los 100 kilos se sienten, pero
el auto está equilibrado”.
|
