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DE GENNARO Y MOYANO RATIFICARON EL PARO QUE COMIENZA HOY
“Como en el amor, acá vale todo”

Se profundiza el enfrentamiento con el Gobierno. La medida durará 24 horas. No habrá colectivos ni recolección de residuos. La CGT oficial no adhiere.

Moyano cuestiona el modelo económico, más que a los ministros.
Igual, considera que Cavallo y López Murphy son lo mismo.

Por Diego Schurman

El mismo perro con distinto collar. De esa manera interpretaron en la CGT rebelde y la CTA la irrupción de Domingo Cavallo en el Gobierno. Por eso las dos centrales sindicales decidieron confirmar el paro general de hoy, donde pesará la ausencia del transporte y se producirán, pese a las advertencias oficiales, innumerables cortes en rutas y accesos a la Capital Federal. “Como en el amor, en el paro vale todo”, justificó el camionero Hugo Moyano, dispuesto a profundizar el enfrentamiento con la Alianza.
La dureza del sindicalista no encontró eco en sus pares de la CGT oficial. Los “gordos” –como se denomina a los dirigentes de las grandes corporaciones: Luz y Fuerza, Comercio, Sanidad, etc– desistieron de adherir al paro luego de recibir el compromiso del ministro de Economía de anular el paquete de medidas de su predecesor, Ricardo López Murphy. “Nos dijo que no hay ajuste, así que nos quedamos sin razón para convocar a la huelga”, reflexionó Rodolfo Daer ante Página/12.
Cavallo no logró la misma disponibilidad en la CGT rebelde. Moyano también se resistió a dialogar con la ministra de Trabajo, Patricia Bullrich, con quien mantiene una tirante relación desde aquel programa de Mariano Grondona donde se dijeron de todo menos lindo. En su lugar conversó Juan Carlos Schmid. “Me aseguró que con Cavallo se abría una expectativa nueva. Pero no se trata de una cuestión de nombres sino de rumbo económico”, señaló el titular del gremio de dragado y balizamiento.
El segundo llamado de Bullrich fue menos amable: le recordó el cronograma de servicios mínimos que deben garantizar los gremios. Por decreto, en las horas picos de una huelga están obligados a circular el 50 por ciento de los subtes y colectivos, algo que rara vez se cumple.
La preocupación de la ministra de Trabajo es fundada. La CGT rebelde nuclea a los gremios del transporte, un sector clave para garantizar el éxito de cualquier medida de protesta. Pero la expectativa de Bullrich estaba puesta sobre los anuncios de cortes en las rutas del interior y accesos a la Capital, que podría derivar en represión policial.
Como si fuera poco, también se sumarán a la huelga algunos gremios de la industria, como metalúrgicos y mecánicos, y los trabajadores bancarios. Pero sobre todo, los docentes nucleados en la CTA de Víctor De Gennaro, que mantienen firme la protesta que iniciaron ayer y que, junto a los estatales de ATE, volverán a marchar hacia la Plaza de Mayo.
Es que las nuevas incorporaciones al gabinete nacional no son alentadoras para los sindicalistas: recuerdan que durante el menemismo Cavallo desfinanció las obras sociales recortando los aportes patronales. Y que Armando Caro Figueroa, flamante vicejefe de Gobierno, no cumplió con su promesa de bajar la desocupación. Por el contrario, mientras fue ministro de Trabajo la Argentina tuvo su índice récord.
Claro que la CGT rebelde y la CTA se mueven políticamente por distintos andariveles. Moyano mantiene excelentes relaciones con Carlos Ruckauf y hasta se animó a decir que es el mejor candidato a presidente para el 2003. En retribución, el gobernador justicialista no descartó sumar en la lista de candidatos a diputados bonaerenses a Saúl Ubaldini, integrante de la central rebelde.
Para analizar la conflictividad social, Moyano no sólo se sentó en los últimos días con Ruckauf. También lo hizo con el secretario general del Ejército, Eduardo Alfonso –según reveló Clarín–, en una rutina que se mantiene “desde hace por lo menos 9 meses”, de acuerdo a la información que la CGT rebelde acercó a este diario.
De Gennaro también se muestra defraudado con una Alianza que soñaba como alternativa al modelo menemista. Aunque, a diferencia de Moyano, se mantiene distante de la interna justicialista de la que sí suelen participar tanto la CGT rebelde como la oficial.

 

Quién para y quién no

Trenes: Funcionarán con normalidad: los gremios ferroviarios no se plegaron al paro.
Subtes: Metrovías implementará un servicio de emergencia, porque el personal de la empresa apoya la huelga.
Colectivos: No habrá servicios de corta, media y larga distancia.
Taxis: El Sindicato de Peones de Taxis apoya el paro, pero no los dueños de los vehículos, por lo que muchos de ellos saldrán a trabajar.
Vuelos: Habrá cancelaciones y demoras. Adhieren a la huelga las azafatas y el personal administrativo.
Educación: La actividad en todos los niveles educativos seguirá paralizada, al continuar el segundo día del paro de 48 horas.
Tribunales: Los empleados judiciales adhieren el paro, aunque habrá un sistema de “guardias”.
Bancos: Los bancarios pararán, aunque pertenecen a la CGT “tradicional”.
Hospitales públicos: Sólo habrá guardias y funcionará el SAME.
Recolección de residuos: No habrá ningún tipo de servicio.
Combustibles: Los despachantes de nafta trabajarán con normalidad. Sin embargo, pueden existir inconvenientes con el abastecimiento.

 

BULLRICH NIEGA SU RENUNCIA Y ATACA A LOS GREMIOS
“Quieren liderar la oposición”

Por D.S.

Patricia Bullrich no se guardó nada.
–Acá no vale todo, como dijo Moyano. El no puede hacer cortes de ruta como si nada. Ni tampoco nos va a armar el gabinete. Para eso que se presente a elecciones y que lo voten.
Había sido una jornada de arduas negociaciones. No sólo para convencer a la CGT rebelde y a la CTA para que levanten el paro general. También para frenar los rumores que le daban pocos días de permanencia al frente del Ministerio de Trabajo.
–Yo estuve hablando con el presidente De la Rúa y estoy más firme que nunca.
–Pero las renuncias están a la orden del día
–No es mi caso. Yo estoy abocada a mi tareas.
–Una de ellas fue intentar evitar el paro general.
–Lo convocaron de urgencia por el paquete que presentó López Murphy. Levantado ese paquete no hay argumentos para seguir con la protesta. Es irracional. Moyano dijo que él no levanta paros y para mí lo sostiene por la interna sindical, para mostrarse distinto a Daer (de la CGT oficial) que sí recapacitó y dio marcha atrás.
–Tanto Moyano como De Gennaro dicen que la protesta es contra el modelo, sea López Murphy o Cavallo su representante.
–Si no les gusta que ganen las elecciones y pongan al ministro que les parezca. No nos van a decir, presionándonos con paros y marchas, cómo tenemos que gobernar.
–Cavallo salió tercero con alrededor del 10 por ciento de los votos.
–Pero De la Rúa, que ganó la elección, decidió que Cavallo fuera su ministro. Además, la Organización Internacional de Trabajo dice que el paro no es una herramienta para efectuar cambios de la política en general sino que se debe utilizar para cuestiones particulares.
–El alto índice de desempleo, que los sindicalistas lo ubican como resultado del modelo, ¿no le parece una razón sensata para llamar a una huelga?
–Mire, a mí me parece que el llamado al paro fue por una razón y ahora la cambiaron por otra. Los sindicalistas quieren aparecer a la cabeza de la oposición como sea. De todos modos, estamos tratando de ampliar los recursos que existen en el ministerio.
–¿Cómo será el paro?
–Vamos a ver cómo se desarrollan los acontecimientos. Pero acá no vale todo. Nosotros cumplimos con nuestras obligaciones y ellos tienen que cumplir con la suyas, entre ellas cumplir con los servicios mínimos que dispone la ley.
–¿Qué argumento esgrimió cuando habló con Daer, Moyano y De Gennaro?
–Yo les dije que no tenía sentido, que había cambiado la situación. Les recordé que cuando se levantó el impuesto docente, se levantó el paro. Pero bueno, son cabezas duras, no entienden.
–¿Cómo interpretó el encuentro entre Moyano y el secretario general del Ejército, Eduardo Alfonso?
–Me sorprendió. Me parece que son reuniones sociales, es un país libre. Moyano puede tener los amigos que quiera y no está mal que los militares tengan amigos sindicalistas. No hay un trasfondo como ocurría en la década del ‘70.

 

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