“Mientras
Argentina se prepara para conmemorar el 25º aniversario del último
y más sangriento golpe, ¿es posible que las violaciones
a los derechos humanos cometidas entonces sean al fin castigadas? A pesar
de que la Justicia se ha tomado su tiempo, la posibilidad parece ahora
más cercana que nunca. (...) A principios de mes el juez federal
Gabriel Cavallo declaró inconstitucionales las leyes de Punto Final
y Obediencia Debida. (...) Aunque el fallo de Cavallo se aplica sólo
a un caso, abre el camino para fallos similares en otros casos, incluidos
todos aquellos cometidos en la ESMA.”
(De la nota “Caso no cerrado”, publicada por
la revista británica The Economist.)
“Mientras
Argentina se prepara para conmemorar el 25º aniversario del último
y más sangriento golpe, ¿es posible que las violaciones
a los derechos humanos cometidas entonces sean al fin castigadas? A pesar
de que la Justicia se ha tomado su tiempo, la posibilidad parece ahora
más cercana que nunca. (...) A principios de mes el juez federal
Gabriel Cavallo declaró inconstitucionales las leyes de Punto Final
y Obediencia Debida. (...) Aunque el fallo de Cavallo se aplica sólo
a un caso, abre el camino para fallos similares en otros casos, incluidos
todos aquellos cometidos en la ESMA.”