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Por Pablo Vignone
Desde
Interlagos, San Pablo
 Una camioneta roja se cruza
delante del taxi, un guardaespaldas negro hace ampulosas señas
desde la cabina mientras otra pick-up se cuela detrás y abre el
camino a un Fiat Marea verde. Tras los cristales se adivinan las siluetas
del campeón del mundo de F-1, Michael Schumacher y su mujer Corinna.
La caravana, que sale en urgido tropel del Hotel Transamérica,
el cuartel general de la F-1 en esta ciudad, parece propia de una comitiva
presidencial. Es que la obsesión por la seguridad ha alcanzado
límites insospechados en esta visita de la F-1 a Brasil, donde
a partir de hoy, en Interlagos, de 11 a 12 y de 12 a 13, se celebrarán
los entrenamientos, de los que participará el argentino Gastón
Mazzacane.
La muerte del comisario de pista Graham Berevidge en Australia introdujo
una fiebre por la seguridad dentro de la pista que aquí en San
Pablo se trasladó a las afueras. Nada ayudaron las declaraciones
del local, Rubens Barrichello, el coequiper de Schumacher, quien una semana
atrás declaró que si tuviera que dejar la F-1, no estaba
seguro de volver a vivir en San Pablo: Barrichello se crió aquí,
cruzando la calle, en Interlagos, y fue muy criticado.
Pero el debate estaba planteado, y los niveles de la paranoia no han descendido,
como sí lo ha hecho el interés por esta carrera, quizás
a causa de los 80 dólares que cuesta la entrada más barata.
Cuando salen de su reclusión en el hotel, la mayoría de
los pilotos viene al circuito en helicóptero; la Federación
Internacional (FIA) se ha traído tres generadores eléctricos
propios para evitar los constantes cortes de luz que ocurren en Interlagos,
y crece entre el circo permanente que sugiere no regresar a San Pablo:
nada gracioso para la organización de la carrera, que en los últimos
años se gastó más de diez millones de dólares
en remozar la pista que data de los ‘50.
Esa remoción incluyó, para este año, la creación
de 23 “jaulas” en las que estarán los banderilleros de
la carrera, que ahora son considerados blancos perfectos de la tecnología
suelta de los coches de Fórmula Uno.
Esa seguridad de la que tanto se habla aquí es la que quiere transmitir
Gastón Mazzacane cuando se le pregunta lo que resultó polémica
en la Argentina fierrera del último mes: ¿Seguirá
conduciendo para Prost por lo que resta de la temporada? El piloto platense
fue muy explícito: “Mi presente es fantástico pese
a las duras críticas que recibo –señaló ayer–
porque tengo la gran oportunidad de estar en este equipo, en el que hay
optimismo y tranquilidad”. Preguntado por las “críticas”
a las que se refirió, fue más específico: “Son
críticas duras porque para criticar hay que estar presente en el
lugar y tener fundamentos para criticar mi trabajo”. Mazzacane aclaró
que la presión de la prensa le “molesta” pero que no
resulta comparable con la que se autoejerce para buscar resultados. “Yo
creo que lo que hice hasta ahora es correcto”, dijo antes de rehuir
la inevitable pregunta sobre la duración de su contrato. “No
pienso volver a hablar del tema.”
Alain Prost, su jefe de equipo, también se negó a hablar
de temas contractuales, pero el tetracampeón deslizó sutilmente
la cuestión de la búsqueda de resultados. Más llamativo
resultó la opinión de Jaquees Kremer, el presidente de PSN,
el principal sponsor de Mazzacane, que según rumores aportaría
nueve millones de dólares de patrocinio al equipo francés.
“Los contratos no sirven si no hay resultados: y eso vale para Gastón,
para mí en mi puesto, o para ustedes en sus periódicos.”
Fue más enfático cuando este diario le preguntó si
la relación de patrocinio con Prost depende de la continuidad de
Mazzacane. “No”, respondió. “Aunque, claro, esperamos
que Gastón consiga mejores resultados.” Hoy, en los entrenamientos,
Mazzacane tendrá la chance de empezar a desandar el camino que
puede llevarlo a conseguirlos.
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OPINION
Por Alain Prost
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El mejor trabajo posible
Creo que los resultados del equipo Prost no fueron tan malos en
estas dos carreras que pasaron, Australia y Malasia. Es cierto que
había ciertas expectativas, provocadas por las pruebas de
invierno, y que dos novenos puestos no eran lo que esperábamos.
Pero estamos detrás de desarrollar técnicamente el
AP-04 antes de encontrar resultados. Hasta después de la
carrera de Imola, a mediados de este mes, no habrá grandes
cambios en el auto, así que no se puede esperar un salto
de calidad, pero después introduciremos un nuevo paquete
aerodinámico en el coche para mejorarlo.
No somos necios: necesitamos resultados, como cualquiera que está
en este ambiente en el que cada vez se mueve más dinero.
Y el potencial del coche es superior a lo que se vio en esas primeras
dos carreras. Aunque, siendo también realistas, nadie puede
creer que nosotros competimos contra Ferrari y McLaren por el título
del mundo. De todas maneras, esperamos mucho de esta carrera de
Brasil. La pista de Interlagos nos va a caer mucho mejor, pese a
que el suelo es más abrasivo y a Gastón le gusta el
trazado.
Sé de las especulaciones que se están produciendo
en la Argentina alrededor de Gastón. Está solo, lejos
de su casa, es el único piloto de Fórmula Uno de un
gran país fanático por las carreras, y que ejerce
toneladas de presión sobre él. Pero yo creo que es
joven y está progresando. Nosotros le estamos dando todo
para que haga lo mejor que pueda. Es cierto que su primera carrera
en el equipo fue horrible y por culpa nuestra no pudo correr. En
Malasia las condiciones fueron muy difíciles y costó
trabajo poner todo junto. Sin embargo, creo que si el auto no se
rompe, si conseguimos la fiabilidad, Gastón podrá
conseguir los resultados que pretende. Viene demostrando un mejor
desempeño, se va perfeccionando poco a poco, hará
buenas carreras.
¿Qué espero de él? Que haga el mejor trabajo
posible. En este equipo somos 250 personas, y desde el cocinero
hasta los dos pilotos trabajan por el mejor resultado posible.
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COMENZO
EL 96º ABIERTO DE ARGENTINA DE GOLF
Gran arranque de Angel Franco
Por Adrián
De Benedictis
El golf ya comenzó a
vivir su gran fiesta. El 96º Abierto de Argentina, que a partir de
este año forma parte del prestigioso Tour Europeo, comenzó
ayer en el Jockey Club Argentino, en San Isidro, y con 700 mil dólares
en premios ya se convirtió en una cita de lujo. Entre los argentinos,
el más destacado en la primera jornada fue el cordobés Angel
Cabrera, que finalizó su vuelta con tres golpes por debajo del
par (70). El defensor del título, Vicente Fernández, cerró
su primer día con 69 golpes (-1), mientras que Eduardo Romero alcanzó
a igualar el par después de desperdiciar dos oportunidades claras
para cerrar con birdie (un golpe por debajo del par).
Entre los 156 jugadores, de los cuales 70 son golfistas regulares del
Tour Europeo, el paraguayo Angel Franco está encabezando la tabla
general, después de realizar una gran vuelta que terminó
con menos seis (-6). En su primer día, el público no se
acercó en gran número como sucedió en la última
Copa del Mundo que se disputó en diciembre pasado. De todas maneras,
se espera que entre hoy y el domingo (día de cierre del certamen)
los amantes del golf elijan disfrutar en persona a figuras de la talla
del italiano Constantino Rocca o de Joakim Haeggman, Anthony Wall, Van
Phillips y Alex Cejka, entre otros.
Uno que busca su primer éxito es Cabrera, y su buen inicio lo ubica
como uno de los que protagonizará el Abierto. En ese sentido, el
argentino explicó ayer que espera “realizar un buen torneo
para estar más cerca del título. Mi objetivo es coronarme
aquí en mi país, y en una competencia tan importante”.
Cabrera intentará hoy seguir alimentando su ilusión para
alcanzar ese logro.
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