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Por Pedro Lipcovich
 Un joven murió tratando
de salvar a su abuela de la creciente; la anciana no aparece y “se
espera lo peor”, según Defensa Civil; además, hay 300
evacuados y 2000 damnificados por las inundaciones en la pequeña
localidad de Palma Sola, provincia de Jujuy. El desastre se originó
en el desborde del arroyo Santa Rita, causado por las lluvias. También
en Mendoza y Salta hubo daños y evacuados por las lluvias, y, en
esta última provincia, un micro que iba en tour de compras a Paraguay
quedó varado 10 horas, con un metro de agua a su alrededor, hasta
ser rescatado por peones de la estancia “La Moraleja”.
Todos los vecinos de Palma Sola habían dejado sus casas porque
venía la inundación, pero él “estaba cuidando
a la abuelita; seguro que trató de sacarla y, como no pudo, la
creciente se lo llevó a él también”, dijo a
este diario una fuente de Defensa Civil jujeña. El discreto heroísmo
del joven –“tenía unos 21 años”– permanecerá
anónimo porque su cadáver no había sido identificado
hasta anoche. La abuela no había aparecido y “se espera lo
peor”, según la fuente.
Palma Sola es un poblado de 4000 habitantes, a 159 kilómetros al
este de San Salvador de Jujuy, donde el clima es estrictamente tropical.
En la madrugada de ayer, la lluvia que arreciaba desde el día anterior
provocó la crecida del arroyo Santa Rita: a 2000 personas se les
inundó la casa. Unas 300 fueron evacuadas y permanecen en el colegio
secundario. A siete kilómetros de Palma Sola, la destrucción
de un puente dejó intransitable la ruta 6.
En la ciudad de Salta, la lluvia –que cayó sin interrupción
durante más de 24 horas hasta sumar 25 milímetros–
anegó calles e inundó viviendas en barrios periféricos.
Hubo problemas en el tránsito y protestas vecinales por “falta
de limpieza y de obras para evitar las inundaciones”.
El director de Defensa Civil salteño, Víctor Ola Castro,
dijo anoche a este diario que “en la capital ya está todo
bien, pero hay problemas en el este de la provincia, departamento de Anta,
Municipalidad de Pizarro”. Allí, “a 50 familias se les
anegaron las casas, con pérdida de bienes”.
En la misma zona, un ómnibus quedó varado durante 10 horas
en la ruta 5. El vehículo, de la empresa Internacional, cruzaba
la provincia desde Sáenz Peña, Chaco. Sus 45 pasajeros iban
hacia Paraguay en “tour de compras”. El agua subió hasta
un metro a su alrededor –habían caído 93 milímetros
en pocas horas–, mientras varios de ellos, desesperados, trataban
de conseguir ayuda mediante sus teléfonos celulares. Finalmente
fueron rescatados por peones de la cercana estancia “La Moraleja”.
En la provincia de Mendoza, varias familias fueron evacuadas en los departamentos
de Las Heras y San Martín, donde se derrumbaron techos y casas
enteras. Cayeron 45 milímetros en un par de días, siendo
que la media anual de la provincia es 200 milímetros.
El Servicio Meteorológico Nacional anunció que “mañana
el tiempo seguirá desmejorando y recién el viernes mejorarán
las condiciones”.
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