Por John Gittings
y Martin Kettle *
Desde Shanghai y desde Washington
China y los Estados Unidos
se retiraron ayer detrás de un muro de secreto diplomático
mientras procuraban bajar la temperatura de los últimos días
y comenzar a resolver la crisis causada el domingo por la colisión
en el aire entre un avión norteamericano espía EP-3 y un
caza chino. Los esfuerzos diplomáticos que estamos realizando
son muy intensos, dijo el vocero de la Casa Blanca Ari Fleischer.
Estados Unidos y China están conversando seriamente,
insistió. Mientras George W. Bush repetía sus expresiones
de pesar por la pérdida de un caza chino y la desaparición
de su piloto, funcionarios norteamericanos de alto rango comenzaron una
serie de encuentros en Pekín y en Washington. Por su parte, el
presidente chino Jiang Zemin inició una gira latinoamericana, que
ayer lo llevó a Chile. Como viajará durante 20 días,
según estaba planeado, se considera que su ausencia no contribuirá
a la pronta solución de la crisis del avión espía.
China dio ayer una respuesta precavida al pesar, no menos precavido, que
inicialmente había expresado el secretario de Estado norteamericano
Colin Powell por la desaparición del piloto chino. El vocero del
Ministerio de Relaciones Exteriores chino, Sun Yuxi, encomió la
declaración norteamericana como un paso dado en la dirección
correcta. China, sin embargo, ahora espera que Estados Unidos acepte
su responsabilidad y pida disculpas. Dijo que China consideraría
los medios para que funcionarios norteamericanos puedan visitar nuevamente
a la tripulación del avión espía, pero sólo
si Washington adoptaba una actitud cooperativa.
El presidente Bush pronunció ayer su propia formulación
de pesar en un discurso a editores de periódicos en Washington.
Lamento que un piloto chino esté desaparecido y lamento que
uno de sus aviones se haya perdido, y nuestras plegarias se elevan por
el piloto y su familia, dijo. Nuestras plegarias también
se elevan por la tripulación de nuestro avión y tienen que
volver a su patria, dijo como respuesta a una pregunta. Mi
mensaje a los chinos es que este incidente no debería desestabilizar
nuestras relaciones. Nuestra relación con China es muy importante.
Pero ya es tiempo de que nuestra gente vuelva a casa, añadió.
Powell dio continuidad a su expresión de pesar del miércoles
enviándole una carta al vicepremier chino, Qian Qichen, en la que,
según se supo, desarrolla una serie de puntos que están
en la mesa de conversaciones entre ambos países. La carta fue en
Pekín el eje de los diálogos entre el ministro de Relaciones
Exteriores chino, Tang Jiaxuan, y el embajador norteamericano, Joseph
Prueher, como lo fue después en Washington en los dos encuentros
del vice de Powell, Richard Armitage, con el embajador chino Yang Jiechi.
Estamos en un punto sensible en las negociaciones... y ahí
es donde están las cosas por ahora, resumió Fleischer.
Las dos partes parecen comprometidas en encontrar una solución
diplomática y la Casa Blanca incluso llegó al punto de insistir
en que quería que los grupos de congresistas que lo tenían
planeado viajaran a China. El tono de los comentarios de Washington se
volvió menos confrontacional, y los mismos funcionarios que antes
decían que estaban frustrados por la falta de progreso de las negociaciones
ahora decían que todo se veía mejor.
Powell, que ayer cumplía 64 años y estaba celebrando, dijo
que ayer se había levantado a las dos y media de la mañana,
todo por ese asuntito que estamos teniendo con China. Un editorial
en el diario oficial (en lengua inglesa) China Daily comenzaba con la
observación conciliatoria: aparentemente ni Pekín
ni Washington quieren una crisis con todas las letras. Y acababa
subrayando el legítimo pedido chino de una disculpa, compensación
y explicación. Lo que no repetía era la anterior demanda
china de que Estados Unidos suspendiera los vuelos espía. Pero
los observadores temen que el mínimo que podría aceptar
China ya es mucho más de lo que Estados Unidos concedería
nunca. El gobierno chino parece haber priorizado antes que nada que el
odio de la opinión pública nunca quede fuera de control.
Policías armados detuvieron ayer a numerosos manifestantes apostados
en las inmediaciones de la embajada norteamericana. Un hombre que llevaba
la pancarta Las deudas de sangre deben ser pagadas con sangre
fue detenido. O por lo menos alejado de la zona residencial.
* De The Guardian de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Claves
Después que
el miércoles lo hiciera el secretario de Estado Colin Powell,
ayer fue el turno del presidente norteamericano George W. Bush para
expresar públicamente su pesar por la desaparición
del piloto chino cuyo caza chocó el domingo con el avión
espía de su país que ahora está retenido en
la isla de Hainan.
China apreció
el gesto, pero espera una disculpa formal norteamericana.
Aunque el clima parecía
ayer más distendido, los observadores estiman que cualquier
pedido chino de mínima seguirá siendo de máxima
a los ojos de Estados Unidos.
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ISRAEL
REDOBLA SU RESPUESTA A LA INTIFADA
Apretando clavijas palestinas
Por Ewen MacAskill
Desde Jerusalén
Israel aumentó ayer las
represalias contra los palestinos al matar a un comandante de la organización
fundamentalista Jihad Islámica con un aparato explosivo colocado
en una cabina de un teléfono público. La Jihad Islámica,
que es responsable de muchos atentados con bombas en Israel, amenazó
con vengar su muerte. Un cazabobos israelí similar, en 1996, fue
seguido por una ola de atentados suicidas con bombas.
El ataque en la ciudad de Jenin de Cisjordania ocurrió sólo
horas después de que soldados israelíes le dispararan a
un convoy que llevaba al negociador palestino Mohammed Dahlan de regreso
de conversaciones de paz. Dahlan salió ileso, pero uno de sus guardaespaldas
recibió un disparo en la pierna y otros resultaron heridos cuando
su vehículo volcó. Dahlan, un miembro del círculo
íntimo del líder palestino, Yasser Arafat, es el palestino
más importante que recibe el fuego israelí. Los palestinos
afirman que fue un torpe intento de asesinato mientras que los israelíes
insisten en que los palestinos abrieron fuego primero. El ejército
israelí prometió una investigación.
Después de un miércoles relativamente tranquilo donde hubo
iniciativas políticas por parte de ambos lados, el primer ministro
Ariel Sharon volvió ayer a apretar las clavijas. Además
de la muerte de Ahmed Mahmoud al-Atar, un palestino de 15 años
que estaba tirando piedras, el gobierno israelí amenazó
con añadir a la ya deteriorada situación la licitación
de 700 nuevas casas para los colonos judíos en la predominantemente
palestina Cisjordania. Los pacifistas israelíes condenaron el anuncio,
mientras que Estados Unidos dijo que la movida era provocativa. Usando
un lenguaje mucho más fuerte que en declaraciones previas sobre
asentamientos judíos, el vocero del Departamento de Estado Richard
Boucher dijo: Continuar con la actividad de asentamientos por parte
de Israel significa inflamar aún más una situación
ya volátil en la región. Esto es provocativo y hemos insistido
consistentemente en que ambas partes se abstengan de actos provocativos.
El comandante de Jihad Islámica, Iyad al-Hardan de 25 años,
murió instantáneamente ayer cuando explotó el teléfono
luego de que insertara una tarjeta telefónica. Había sido
liberado de una prisión de la Autoridad Palestina después
que comenzó la Intifada en setiembre pero fue nuevamente arrestado
por la policía palestina seis semanas atrás. Se le permitía
salir regularmente para hacer llamadas. Una fuente de la Autoridad Palestina
dijo: Israel es responsable de esta operación de asesinato
al poner materiales explosivos dentro del teléfono.
El incidente de los disparos que involucró a Dahlan, que es jefe
de seguridad en Gaza, tuvo lugar en la frontera entre Israel y Gaza. Un
vocero del ejército israelí, teniente Olivier Rafowics,
dijo, después de una investigación preliminar, que los palestinos
abrieron fuego desde el primer jeep, desde la ventana de atrás
de la derecha y luego los soldados israelíes dispararon a la fuente
del jeep. Dijo: Esta afirmación de asesinato es infantil
e infundada. Estábamos reunidos con él y otras personas
de seguridad para tratar de reanudar las conversaciones de paz. No tiene
lógica el tratar de asesinarlo.
PREVINIERON
ATENTADOS DE BIN LADEN
El terror que no llegó en Europa
Por Lola Galán
Desde
Roma
La policía italiana detuvo
ayer en Milán y en la vecina localidad de Busto Arsizio, en el
norte del país, a cinco personas, de nacionalidad argelina y tunecina,
sospechosas de pertenecer a una célula terrorista del grupo islámico
que financia el millonario árabe Osama Bin Laden. Otros cinco presuntos
cómplices, acusados de haber facilitado alojamientos e infraestructura
al grupo, están siendo buscados. La presencia en Italia de este
grupo, que funcionaba, según la policía, como una célula
de apoyo logístico a otros comandos de la organización en
Europa, fue detectada hace tres meses y levantó una enorme polvareda
en la prensa italiana. Los medios de comunicación ligaron la presencia
de los terroristas islámicos con un inminente atentado contra la
embajada de Estados Unidos en Roma, en Via Veneto, que no llegó
a producirse. La sede diplomática quedó cerrada durante
varios días por este motivo.
La operación llevaba a cabo en Italia está ligada al desmantelamiento
de otras células terroristas islámicas que operaban en Francia,
Bélgica, Reino Unido y Alemania. En este último país
fue detenido anteayer un argelino que había logrado huir de la
redada efectuada en diciembre pasado por la policía alemana, en
la que fueron detenidos cuatro de los cinco miembros de un comando que
preparaba un atentado en el centro de Estrasburgo. Este golpe terrorista
quedó abortado gracias a la intervención de la policía.
La detención del quinto terrorista, identificado por la fiscalía
de Karlsruhe como Samir K., se produjo en el ámbito de una operación
en la que fueron registrados ocho apartamentos de personas sospechosas
en Baviera y Assia. Los fiscales italianos que han conducido la investigación
se declararon convencidos de haber identificado una célula terrorista
peligrosísima, que se mantenía en contacto con
grupos similares en otros países europeos. No obstante, faltan
elementos para que los cinco detenidos puedan ser acusados de la preparación
de un ataque a la embajada estadounidense en Roma.
La fiscalía de Milán acusa a los detenidos de asociación
delictiva orientada al tráfico de armas y explosivos y a la falsificación
de documentos. La de Busto Arsizio (Varese), también en Lombardía,
aplica el arresto por un presunto delito de reclutamiento de mercenarios.
Según el fiscal Stefano Dambruso, el grupo cumplía
esencialmente una actividad de apoyo logístico, dando cobijo en
diversos pisos en Lombardía a importantes activistas del terrorismo
islámico internacional, ligados a Bin Laden.
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