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Por
Eduardo Tagliaferro
 No
duda en afirmar que si se comprueba que un ex secretario suyo, el contador
Guillermo Etchechoury, cobró coimas por la venta ilegal de armas
“aumentaría su juicio pesimista sobre la humanidad”.
El expediente judicial es su principal obsesión, desde que fue
involucrado. En una entrevista con Página/12, el ex ministro de
Defensa Oscar Camilión insiste en “que fue engañado”
y que si es convocado nuevamente a declarar por los cargos de asociación
ilícita, también tendrían que ser citados Carlos
Menem y Domingo Cavallo.
–¿El ex presidente Carlos Menem pudo haber desconocido que
Panamá no tenía fuerzas armadas?
–Eso me parece conveniente preguntárselo al ex presidente
Menem y a los ministros que suscribieron los decretos. Si usted me pregunta
si era llamativo o no la respuesta es: en efecto, era llamativo.
–¿Qué opina del fallo de la sala II de la Cámara
Federal, cuando pide que debe investigarse la existencia de una asociación
ilícita vinculada a los lugares más destacados del poder
político?
–Sobre el fallo de la Cámara tengo opiniones encontradas.
Es un balance mixto. Discrepo en que haya revocado la falta de mérito
que en mi caso había dictaminado el juez (Jorge) Urso. Pero, por
otra parte, estoy de acuerdo en la indicación de que se analicen
los aspectos económicos de esta causa. En cuanto a la traspolación
que hace de la figura de la asociación ilícita reconocida
en el ámbito de Fabricaciones Militares al nivel ministerial, pienso
que si eso supone que bajo la figura de asociación ilícita
nos indagarían al ex ministro Guido Di Tella, a Antonio Erman González
y a mí mismo en ese caso considero que habría que extender
la indagatoria al ministro (Domingo) Cavallo y al ex presidente Menem.
Todos suscribieron los decretos. Esta decisión de la Cámara
es discutible, aunque debo reconocer que ha tenido un efecto inesperado.
–¿Usted confirmó a Sarlenga como interventor de Fabricaciones
Militares a pedido de la Presidencia de la Nación?
–Que había una relación entre Sarlenga y los niveles
de Presidencia puede deducirse de ese pedido. No me consta el vínculo
con Emir Yoma.
–El juzgado federal allanó el Banco General de Negocios buscando
supuestas coimas depositadas por un ex secretario suyo, el contador Guillermo
Etchechoury. ¿Que opinión le merece el hecho?
–Me causa asombro. Creo que esas sospechas van a ser desvirtuadas
por las investigaciones que se hagan. La idea de que puede haberse producido
un soborno de esa naturaleza a una persona como Guillermo Etchechoury
me haría aumentar mi juicio pesimista sobre la naturaleza humana.
Pero realmente no lo creo posible. Veremos qué relación
se puede deducir de los allanamientos judiciales.
–¿Es factible, en una maniobra de esta envergadura, que el
jefe de la asociación ilícita no fuera funcionario público?
–No sé si la maniobra entra en el esquema de la asociación
ilícita, pero evidentemente acá hubo una organización
que se proponía hacer operaciones irregulares. ¿Quiénes
integran esa organización?, es el objetivo fundamental de ese proceso.
Lo que es evidente es que hay una serie de aspectos en este operativo
que no se pudieron haber hecho si sólo participaban niveles bajos
de responsabilidad política. Había niveles altos en esa
organización, entre otros quienes permitieron tamaño desplazamiento
de armas del Ejército. Porque, en un momento dado, sólo
se exportaron armas del Ejército con desconocimiento de las autoridades
del área de Defensa, por lo menos durante mi paso por el cargo.
Cuál fue el nivel exacto de la jerarquía que permitió
todo esto es lo que tiene que ser determinado en la investigación.
No sé si la imputación que se le hace al señor (Emir)
Yoma resistirá un análisis técnico o no, lo que importa
saber es si tuvo alguna responsabilidad y se benefició con ella.
El objetivo básico es saber quiénes se beneficiaron con
esta operación. Haydos planos: el de la política universal
y las responsabilidades penales. La gente está preguntándose
si hubo negociados o no. Eso le preocupa más que saber si se violaron
o no embargos internacionales,
–¿Algún embajador norteamericano o funcionario de organismos
internacionales le hizo algún comentario sobre si Argentina violó
el embargo de la ONU?
–Jamás. Así como el escándalo de la aparición
de armas argentinas en Ecuador fue motivo de muchos comentarios. Especialmente
en Perú, ya que el tema de Ecuador fue netamente delictivo. El
tema Croacia jamás fue tema de preocupación internacional.
Ni Defensa, ni la Cancillería recibimos comentarios.
–El ex embajador James Cheek ¿nunca habló con usted
de estos temas ni aún después de que dejara el cargo de
ministro?
–No, nunca. Entiendo que Fine Air no tenía los papeles en
regla, a lo mejor requirieron una ayuda de la embajada. Me parece inverosímil
que se haya realizado alguna gestión a nivel del embajador. De
aquí a deducir que los norteamericanos podrían estar interesados
en que se le vendiera armas a Ecuador me parece un absurdo.
–¿Usted fue engañado?
–Me engañaron totalmente. Jamás se me pasó por
la imaginación que el decreto que firmé de venta de armas
a Venezuela no fuera genuino. No acepto que se diga que yo era renuente
a la operación a Croacia. No la conocía, nunca me la plantearon.
–¿Podría decir que Menem y otros ministros también
fueron engañados?
–Para poner un solo ejemplo. Me parece que el ministro Cavallo no
pudo estar vinculado con la operación. Lo mismo digo de Guido Di
Tella. No hablo por otros.
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OTRAS
VOCES
Melchor
Cruchaga (secretario de Justicia):
 “El
Gobierno no interfiere con la Justicia y no queremos saber cómo
piensan y hacia dónde se orienta una investigación,
porque el es propio Poder Judicial el que lo tiene que resolver.
Si se lo tiene que citar a Cavallo, se lo citará. Pero cuando
revisamos los expedientes –eran más de veinte cuerpos
en su momento– no había ningún elemento que le
permitiera al juez Urso citarlo por entonces, sería simplemente
un elemento probatorio adicional. Insisto en que hay que dejar trabajar
a los jueces y a los fiscales”.
James
Cheek (ex embajador de Estados Unidos):
“Las embajadas no tenemos que gestionar permiso de aterrizaje
para el vuelo comercial, porque ya hay un acuerdo bilateral que
da autorización a cualquier empresa norteamericana a entrar
en servicio de charter, de carga y pasajeros. Solamente tienen que
solicitar el permiso de aterrizaje, pero no es un trabajo para una
embajada. En su momento, cuando salió a la luz el escándalo,
me llamaron los hermanos Fine de Miami por teléfono a la
Embajada. No sé por qué me llamaron, pero hablaron
largamente conmigo tratando de convencerme de que eran inocentes,
que no sabían nada de la carga y que pensaban que fue para
Venezuela. En ese momento, ellos estuvieron bajo la lupa de las
autoridades de los Estados Unidos”.
uKarim Yoma (hermano de Emir Yoma):
“Emir no tiene nada que ver con este tema del tráfico
de armas y tuvo un pico de presión por el asombro que le
produjo ser detenido por la orden de un juez. Hace pocos días
hubo una resolución de la Cámara Federal hablando
sobre ese problema y en ningún momento guardaba relación
alguna con mi hermano. Alguien, para intentar salvarse o deslindar
responsabilidades, intentó trasladar sobre mi hermano alguna
acusación que rechazo totalmente. Creo que esto es parte
de una campaña persecutoria contra la familia y parte de
la oposición proviene del propio partido peronista. Mi hermano
es el dueño de una empresa de la cual comen cinco mil personas
y guste o no guste somos los principales exportadores de cuero del
país” (ver asimismo nota de opinión en página
2/3).
Alberto
Kohan (ex secretario general de la Presidencia de Carlos Menem):
 “Este
es un tema demasiado serio como para tomarlo a la ligera y lamentablemente
en muchos casos se lo toma a la ligera. Estamos entrando en un peligroso
terreno, que es el prejuzgamiento. La Argentina ya vivió
años de condena por sospecha y yo prefiero no caer en eso.
Se duda del honor en la tapa, total después si hay que aclarar
algo es en la página 30. Confío y creo en la Justicia
y hay que dejar que la Justicia trabaje. Por lo pronto, no sé
con qué derecho se sospecha del Partido Justicialista en
el marco de esta causa. Si un señor tiene pruebas de algo,
tendrá que presentarlas donde corresponda, que es la Justicia”.
Elisa
Carrió (diputada nacional):
 “Los
investigadores van por el camino correcto, no sólo por lo
que dicta el sentido común, sino por lo evidenciado en el
expediente. Nombrar a Emir Yoma es decir Carlos Menem. Tengo la
esperanza de que el ex presidente sea citado por la Justicia a declarar
en el caso de las armas. Menem fue la expresión de la premoralidad
en la Argentina y su gobierno fue devastador. La verdad no puede
ser detenida aunque hay pactos de impunidad que aparecen en los
proyectos económicos. Respecto de Domingo Cavallo, su firma
también aparece en los reintegros por las exportaciones de
oro. Y en los Estados Unidos hay una teoría que cada vez
se hace más fuerte, que dice que el dinero ilegal se lava
con las exportaciones de oro, que son difíciles de controlar.
Creo que con el tiempo todas las causas se van a ir uniendo”.
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