Con el impuesto a las transacciones financieras y el Bono Patriótico,
Domingo Cavallo resolvió en tres semanas los problemas más
acuciantes que ponían al país al borde del abismo. Ambas
medidas fueron para ganarse una tregua con los acreedores. Ayer se concretó
la emisión del bono por 2000 millones de dólares, suscripto
por 67 bancos, los cuales podrán integrar como parte de los encajes
que exige el Banco Central. El ministro de Economía apeló
a esa medida heterodoxa para escapar al ahogo financiero, mientras los
bancos concretaron un negocio redondo. Cobrarán por los bonos a
un año una tasa de interés del 9 por ciento, 5 puntos
por arriba de lo que ganaban manteniendo el dinero en efectivo inmovilizado
en el Central. La ganancia es de 150 millones de dólares.
La colocación había sido pactada la semana pasada. Los 2000
millones, junto a otros 1500 millones que recaudará Economía
en los próximos días con emisiones de otros títulos
uno de ellos será adquirido por las AFJP0, le permiten a
Cavallo tener cubiertas las necesidades de financiamiento hasta mediados
de año. El mecanismo utilizado en la emisión de ayer generó
una polémica respecto a si se está ensuciando
la Convertibilidad, ya que los encajes bancarios forman parte de las reservas
que garantizan la paridad cambiaria.
El viceministro de Economía, Daniel Marx, dio su opinión
en ese debate. Destacó que cuando empezó la convertibilidad,
el respaldo de las reservas del Banco Central a la moneda nacional era
bastante menor al actual. Y siguió: La convertibilidad
significa hoy mucho más que hace cinco o más años
atrás, ya que todos los pesos en circulación están
respaldados por dólares. La utilización de los bonos
como parte de los encajes generó además un hecho político
de mayor significación. Para imponer su idea, Cavallo atacó
duramente al presidente del Banco Central, Pedro Pou, quien siempre se
enorgulleció de su política dura en el manejo de los encajes.
Por esa política es que el ministro lo acusó de ser uno
de los culpables por la interminable recesión.
Las ofertas para adquirir el Bono Patriótico sumaron 2115,2 millones
de dólares, apenas por encima de los 2000 que se colocaron. El
Banco Nación fue el que acercó la mayor oferta, al solicitar
275 millones, de los cuales le fueron suscriptos 260 millones. Luego le
siguieron los bancos Galicia (255 millones), BBVA Francés (208
millones), Río (189 millones), Ciudad de Buenos Aires (102 millones)
y el HSBC (94 millones). Cavallo flexibilizó de hecho la política
de encajes y accedió a fondos que no podía conseguir en
los mercados internacionales. Superada la situación de mayor urgencia,
ya que el Gobierno no tenía recursos para cubrir vencimientos de
deuda, el ministro espera que se consolide una baja del riesgo país,
que desde su asunción ha sido lenta. Marx destacó que los
recursos conseguidos permitirán enfrentar un desvío
temporario de las metas fiscales y que la mayor solvencia
fiscal mejorará la percepción de los mercados.
Sin embargo, anteayer Economía convalidó en la licitación
de Letras de Tesorería una tasa que el ministro había calificado
como ruinosa para el país. Marx asumió la tarea
de explicarlo. La tasa de corto plazo en dólares que paga
Argentina está en niveles que son comparables con los de México,
que es un objetivo que nos puso el ministro, argumentó. La
tasa de Cetes en México es una tasa que, medida en dólares,
es bastante similar a la de Argentina agregó, lo que
ocurre es que México tiene una deuda de corto plazo bastante superior
a la Argentina y, además, tiene mayor volatilidad. Lo único
que reconoció el viceministro fue que en las tasas de largo
plazo todavía estamos lejos y esto es un poco dónde tenemos
que trabajar.
Respecto a la deuda, Economía entregó ayer un informe que
especifica que a diciembre último ascendió a 128.018 millones
de dólares, 4352 millones más que la medición de
octubre, cuando ascendía a 123.666 millones. Por otra parte, Marx
se refirió al tema del posible paso a una canasta demonedas. El
peso sigue valiendo un dólar, enfatizó, y no
hay ninguna expectativa, ningún interés, ni ninguna manera
de cambiarlo.
Después del
sexto día, descansó
Después de seis jornadas consecutivas de aumentos, el índice
MerVal de la Bolsa de Buenos Aires anotó ayer una caída
del 1,5 por ciento. Con un volumen de negocios de 27,5 millones,
las operaciones estuvieron en línea con lo que pasó
en Wall Street, donde el índice Dow Jones bajó 0,9
por ciento. Los ADR argentinos en Nueva York perdieron 1,5 por ciento
en promedio. En tanto, el call experimentó un incremento,
pues se debió operar a cinco días. Se transó
entre 9,25 y 9,75 por ciento en pesos, y osciló entre 7,5
y 7,75 por ciento en dólares. Por otra parte, el Banco Central
informó ayer que en marzo se produjo una caída de
depósitos en el sistema financiero de 1700 millones de pesos.
La baja se produjo ante la gravísima crisis que derivó
en el recambio de Ricardo López Murphy por Domingo Cavallo.
El Central precisó que, si bien las colocaciones a
plazo fueron las que experimentaron las mayores caídas nominales
(1100 millones), en términos porcentuales el descenso fue
de 2 puntos, mientras que las cajas de ahorro, con una merma nominal
menor (400 millones), fueron la más castigadas en términos
porcentuales (3 por ciento).
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PETROLERAS
AUMENTARON LAS NAFTAS POR EL IMPUESTO
Al final, el consumidor paga
Los combustibles que comercializan
las firmas Repsol YPF y Esso tienen desde ayer nuevos precios para el
público. Las naftas aumentaron, el gasoil común no registró
variaciones y disminuyó el gasoil agropecuario. Los
expendedores denunciaron que se trata del traslado al público del
reciente impuesto a las transacciones financieras.
El nuevo precio sugerido para la nafta común pasó de 0,934
a 0,944 pesos el litro, el de la Super pasó de 1.059 a 1.079 pesos
y el de la Especial (Fangio XXI) aumentó de 1,159 a 1,174 pesos.
En tanto Esso, que solo aumentó el precio de las naftas, lo hizo
de manera uniforme en 2 centavos.
Repsol YPF informó que el gasoil común se mantiene sin cambio,
a 0,509 pesos el litro, el gasoil para el sector agropecuario para consumos
superiores a 35 mil litros bajó de 0,397 a 0,387 pesos. Para consumos
menores a 5 mil litros por compra, bajó de 0,429 a 0,419 pesos
el litro. Según la empresa española las variaciones de precios
se debieron a la variación de la cotización internacional
del crudo y sus derivados.
En tanto, la Federación de Empresarios de Combustibles (FECRA)
consideró que los aumentos en las naftas dispuestos por Repsol
YPF y Esso resultaron del traslado del impuesto al cheque.
Carlos Calabró, titular de FECRA, sostuvo que al final el
que termina pagando todo es el consumidor. Agregó que la
coincidencia en las subas por parte de las dos empresas muestra
la falta de competencia que existe en el mercado y negó que
los variaciones se deban al aumento del crudo, pues en los últimos
dos meses se produjeron importantes bajas.
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