Un
menú de diferentes tipos de ojos, narices, mejillas y mentones,
entre otros rasgos físicos, estará disponible a partir de
la semana próxima en una página de internet, para que quienes
hayan sido víctimas de algún delito puedan hacer su propio
identikit de la cara del agresor. La iniciativa surgió de un grupo
de vecinos y comerciantes de La Plata que, cansados de la indiferencia
de las fuerzas de seguridad de la provincia, implementarán
este sistema con el fin de favorecer la captura de los que no nos
dejan vivir tranquilos, explicó a Página/12 Rodolfo
Cabrera, dueño de un maxikiosco y factotum de www.lanzadera.com/asaltados.
Los comerciantes y vecinos de La Plata estamos cansados de ser víctimas
de delitos, apuntó, enojado, Cabrera, y explicó que
por esa razón, en noviembre del año pasado, pusimos
la página en Internet www.lanzadera.com/asaltados, y ahora brindamos
esta posibilidad. El sistema de dictado de rostro a través
de la computadora se realizará mediante un kit informático,
similar al que emplea la policía, y que le permitirá al
usuario modificar todos los rasgos faciales a partir de un perfil básico,
para realizar un identikit de la persona que haya cometido el delito.
En la página se destaca la necesidad de combatir la impunidad a
través de la información, apuntando la importancia de que
tomen estado público la descripción de los agresores y los
documentos con los que las víctimas dan parte a las autoridades,
frente a la falta de una política por parte de la provincia
que resguarde la seguridad del ciudadano, manifestó Cabrera.
El sitio en internet incluye también una serie de recomendaciones
sobre formas de defensa y prevención del delito sin el uso de armas,
y un link llamado ¡Yo fui asaltado!, adonde las víctimas
de asaltos pueden enviar su historia con todos los detalles: fecha, hora
y lugar del asalto, descripción de los asaltantes y una descripción
de todo lo ocurrido. El denunciante puede mantener su anonimato o, en
caso de que envíe algún dato personal para que sea publicado,
debe dejarlo expresado en su relato.
Otro de los comerciantes afectados, que prefirió ocultar su nombre,
comentó a este diario que está muy molesto con los policías
porque no se puede esperar nada de ellos. Siempre dan las mismas
excusas: indiferencia o ineficacia, se quejó el hombre. Parece
que la sociedad no participa de la élite policial.
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