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Por Claudio Scaletta
 Tras diez días de paro,
el conflicto que enfrenta a las empresas del grupo Aerolíneas Argentinas
con sus trabajadores entró en una nueva impasse. Como se esperaba,
y luego de que la firma tensó al máximo la disputa mediante
204 nuevos despidos, el Ministerio de Trabajo dictó “por última
vez” una conciliación obligatoria por el plazo de 10 días.
La disposición ministerial intimó a la empresa para que
deje sin efectos los despidos y al gremio de técnicos aeronáuticos
para que deje “sin efecto toda medida de acción directa”.
Citó además a las partes a una audiencia para las 11 horas
de hoy.
El secretario de Trabajo, Anselmo Riva, sostuvo en conferencia de prensa
que Aerolíneas no respetó el compromiso anteriormente asumido
de garantizar la estabilidad laboral por dos años y que esta estabilidad
debe ser la contrapartida de cualquier “sacrificio” que se requiera
a los trabajadores. También agregó que la esta conciliación
era “la última herramienta” que le quedaba al Estado
para mediar en el conflicto. Por último, abogó para que
las partes “se pongan las pilas y negocien con toda celeridad y responsabilidad”.
Tanto la empresa como los trabajadores anunciaron que acatarán
la medida que rige desde la cero horas de hoy.
La titular de la cartera laboral, Patricia Bullrich, quien manifestó
una actitud prescindente durante todo el conflicto –asegurando, a
tono con el resto del gobierno, “que era un problema de una empresa
privada”– se paseó ayer por los hangares de Ezeiza. Respondió
así a una invitación de los trabajadores (formulada en un
programa televisivo) para que vea personalmente el deterioro de las condiciones
de mantenimiento de las aeronaves. En su recorrido escuchó los
relatos de los técnicos sobre el vaciamiento del sector, la falta
de inversiones y de repuestos. Algunos trabajadores, mientras describían
esta situación a Bullrich y tras diez días de no abandonar
sus puestos de trabajo, no lograron contener sus emociones.
El levantamiento compulsivo de la medida de fuerza trajo alivio a los
restantes gremios del sector. Pues, aunque se solidarizaron con los reclamos
de la Asociación del Personal Técnico Aeronáutico
(APTA), ya habían logrado acuerdos individuales con la empresa
española y temían que la continuidad del conflicto, con
la total paralización de los vuelos, termine con la quiebra de
la firma o con los acuerdos duramente negociados. Aunque la gente de APTA
se mostró satisfecha por la vuelta al trabajo –“hubo
un gran cambio de actitud”, dijo a este diario el secretario general
del gremio, Ricardo Cirielli– vale aclarar que la conciliación
no representa más que una salida provisoria y todo dependerá
de los acuerdos que logren alcanzarse en los próximos 10 días.
Según dijo a Página/12 una alta fuente de Aerolíneas
Argentinas, la situación de la empresa “no tiene salida”.
A pesar de los fuertes aumentos tarifarios dispuestos por todas las firmas
que operan en el mercado local en los vuelos de cabotaje –para revertir
las pérdidas por 200 millones de dólares producidas durante
el año 2000–, Aerolíneas continúa con un resultado
negativo de 20 millones mensuales. Y esto a pesar de que se redujeron
en 15 millones los gastos operativos. En estos números influyeron
fuertemente los aumentos en los precios de los combustibles y un mercado
recesivo. Además, en lo que va del año las ventas cayeron
en 38 millones de pesos sobre lo programado. Con esta realidad se estima
que las pérdidas respecto al 2000 se reducirán en apenas
6 o 7 por ciento. Con esas cifras, el objetivo del Plan Director, poner
a la todavía aerolínea de bandera en condiciones de venta,
difícilmente podrá cumplirse.
El conflicto con los trabajadores de Aerolíneas comenzó
en marzo con 8 despidos, consecuentes medidas de fuerzas y el primer dictado
de conciliación obligatoria. Que la agudización se haya
producido a fines de abril y principios de mayo coincide con el momento
de máxima baja anual en la demanda de pasajes. Esto llevó
a algunos analistas a presumir una planificación por parte de la
empresa. Los primeros 224 despidos que dieron origen al paro finalizado
ayer se produjeron sin causa y, por lo tanto, con las correspondientes
indemnizaciones. Los 204 que se sumaron el 1º de mayo fueron en cambio
“con causa” por no cumplir con “el 50 por ciento de servicio
mínimo”. La cifra de trabajadores que perdieron su trabajo
supera los 500 si se suman los 80 contratos que no fueron renovados. No
obstante, según fuentes de la empresa, de los 224 despedidos inicialmente
70 no se reincorporarán a sus tareas, pues ya pasaron a cobrar
sus indemnizaciones, una suma mayor que la del plan de retiros voluntarios
que ofrecía la firma.
Aunque los técnicos comenzaron a trabajar desde anoche, hoy sólo
podrán operar unos pocos vuelos. Las tareas propias de volver a
poner en movimiento la flota demandará 3 ó 4 días.
APARTAN
AL JUEZ QUE INCOMODABA A ANTELO DE RENAULT
A Rueda lo dejaron en llanta
En su reciente viaje a Francia,
Domingo Cavallo escuchó de parte de las máximas autoridades
de Renault a nivel mundial un planteo sugerente. Le dijeron que deben
optar entre Argentina y México para instalar una nueva planta industrial.
Pero le recordaron que el presidente de la compañía en Argentina,
Manuel Antelo, atraviesa una situación difícil en la Justicia,
ya que fue procesado por supuesto contrabando. Ayer hubo una novedad en
esa causa, muy favorable a Antelo. La Cámara Federal de Apelaciones
de Córdoba, donde se tramita el expediente, decidió apartar
del caso a Luis Rueda, integrante del tribunal que revocó dos veces
fallos de primera instancia que desprocesaban al ejecutivo.
Rueda integra la Sala B de la Cámara de Apelaciones, que en julio
de 1997 y en octubre de 1999 revocó el sobreseimiento de Antelo
y otros directivos de Renault que había dictado el juez federal
Ricardo Bustos Fierro, el mismo que emitió un fallo polémico
al habilitar la re-relección de Carlos Menem. La resolución
adoptada ayer por otro tribunal de Córdoba atiende al pedido de
recusación de Rueda que había presentado Antelo, el principal
acusado en las millonarias maniobras de evasión al fisco. Los jueces
consideraron que Rueda incurrió en prejuzgamiento por “enemistad
manifiesta”.
Con esa decisión, la causa por contrabando que se inició
en 1994 se sigue dilatando. Fuentes judiciales indicaron que se corre
el riesgo de que la acusación quede en la nada, ya que el caso
podría prescribir a la brevedad. Rueda tiene la posibilidad de
apelar su alejamiento ante la Cámara Nacional de Casación
y, si quisiera, ante la Corte Suprema de Justicia. Pero eso no haría
más que estirar los plazos procesales, lo que jugaría a
favor de los acusados. Rueda se abstuvo de precisar si recurrirá
la medida y se limitó a responder que “estoy analizando la
cuestión”.
La maniobra que se investiga ocurrió entre octubre del ‘93
y enero del ‘94. Ciadea –por entonces dueña de la marca
Renault en Argentina– exportó a Uruguay, con carácter
definitivo, autopartes y kits completos para 2600 utilitarios Trafic.
Por esa venta, la Aduana reintegró impuestos por 2,3 millones de
pesos, ya que los envíos eran computados dentro de la compensación
prevista en el régimen automotor común entre Argentina y
Uruguay. Luego, Ciadea importó bajo el rótulo de vehículos
completos a las camionetas Trafic, sin pagar aranceles, en virtud del
mismo régimen. Franco y Mauricio Macri, ex titulares de la empresa
Sevel, están procesados por maniobras similares.
El caso que involucra a Renault tuvo una importante repercusión
nacional e internacional, a tal punto que el embajador de Francia en Argentina,
Paul Dijoud, se quejó tiempo atrás al gobernador José
Manuel De la Sota por el procesamiento de los directivos de la empresa.
Más sutiles, las autoridades de Renault en Francia le recordaron
a Cavallo hace algunos días que la firma tiene que elegir entre
Argentina y México para instalar una planta fabril. Cavallo prometió
una solución favorable. Y llegó.
La Aduana le había puesto un valor a la demanda judicial: 520 millones
por la deuda fiscal y diferentes multas.
Mendiguren,
presidente
José Ignacio de Mendiguren
asumirá hoy, a las 17.30, como nuevo presidente de la Unión
Industrial Argentina, en reemplazo de Osvaldo Rial. El empresario textil,
que hasta ahora se desempeñó como secretario de la entidad,
fue elegido por unanimidad por las dos fracciones que integran la UIA.
Fernando de la Rúa y Domingo Cavallo asistirán a la ceremonia,
que se realizará en Parque Norte. Ayer, De Mendiguren elogió
el hecho de que Cavallo aplicará medidas pro competitivas por sectores
de la industria. “Las autoridades reconocieron el problema”,
señaló. “
Las medidas les va a cambiar el panorama a las empresas industriales”,
añadió. Además de dirigente de la UIA, De Mendiguren
es director del Banco Nación.
Feletti,
presidente
El presidente del Banco Ciudad,
Roberto Feletti, fue designado ayer como nuevo titular del directorio
de Red Link. El mandato del economista de la Alianza durará un
año.
La Red Link está integrada por 64 entidades financieras. De ese
total, 37 son bancos, entre los que figuran el Ciudad de Buenos Aires,
el Provincia de Buenos Aires, Nación, Banca Nazionale del Lavoro,
Itaú, ABN Amro y el Hipotecario.
La red cuenta con 3364 cajeros automáticos, de los cuales 3315
están distribuidos por todo el país y otros 349 se encuentran
situados en el Uruguay. Por otro parte, tiene presencia internacional
a través de acuerdos con otras redes. Rodolfo Schamsanovsky, del
Banco de la Pampa, secundará a Feletti en el directorio.
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