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Por Adrián De Benedictis
 La asamblea de futbolistas convocada
ayer por Agremiados resolvió la continuidad del paro que había
decretado el lunes pasado, ya que no consideró totalmente satisfactoria
la propuesta formulada por la Asociación del Fútbol Argentino
(AFA), no tanto por los números como por las condiciones. El sindicato
de los jugadores (FAA) condicionó el levantamiento de la huelga
a la aceptación, por parte de la AFA, de un petitorio de condiciones
que los dirigentes de Agremiados se negaron a revelar anoche, pero que
incluye, por ejemplo, la abolición de la ley del 20 por ciento.
En caso de que la entidad que preside Julio Grondona acepte ese petitorio,
Agremiados levantará automáticamente el paro sin necesidad
de convocar a una nueva asamblea. “Hoy estamos mejor, pero el conflicto
sigue siendo duro”, opinó el secretario general de FAA, Sergio
Marchi.
Cerca de las 22 ya se sabía que los jugadores persistirían
con la medida, pero fue unos minutos antes de las 23, luego de que le
comunicaran telefónicamente la decisión a Grondona, que
los máximos dirigentes de Agremiados –Marchi, Carlos Pandolfi,
Juan Carlos Touriño, Jorge Domínguez– confirmaran oficialmente
que los futbolistas no “prestarían servicios” durante
el fin de semana, ya que pese a que la propuesta de la AFA había
sido “aceptada parcialmente”, faltan definir cuestiones de fondo
que tienen que ver con “dignificar la profesión”.
Los futbolistas fundamentaron su negativa a levantar la huelga en que
no está claro quiénes se harán responsables de aportar
el dinero para saldar las deudas ni cómo se van a pagar esos montos,
aunque estaban de acuerdo sobre los porcentajes ofrecidos por la AFA:
el 35 por ciento de la deuda global que los clubes tienen con los jugadores,
a pagar por la entidad madre el 30 de este mes, y el 65 por ciento restante
desembolsado por los clubes antes del 30 de julio próximo, con
avales de la AFA. Sin embargo, pretenden que esa propuesta sea homologada
por el Ministerio de Trabajo, lo que estirará la medida hasta por
lo menos el lunes.
Además, continúan existiendo discrepancias sobre el monto
total de la deuda, ya que Agremiados da por supuesto que la AFA se hace
responsable de todo lo que la entidad gremial reclama, unos 55 millones
de pesos; sin embargo, la AFA maneja una cifra, surgida de auditoría,
de 38 millones de pesos, correspondientes a sueldos, primas y premios
no abonados desde junio de 1999 hasta el 30 de abril del 2001.
Pandolfi insistió en que la decisión de sostener la medida
tiene que ver con la voluntad “de que no se vuelva a repetir la cuestión
de fondo” que aqueja al fútbol argentino. “Queremos que
haya un antes y un después de esta medida”, admitió
a este cronista Fabián Carrizo, el volante de Huracán que
es uno de los líderes de opinión de los futbolistas.
Lo determinado por la asamblea de ayer fue lo siguiente:
1º: Ratificar el cese parcial de actividades decretado en la reunión
del 30 de abril.
2º: Facultar al Consejo Directivo a entablar negociaciones con la
AFA a los efectos de acordar el monto, el plazo y la forma de pago de
las remuneraciones por todo concepto adeudadas a los planteles profesionales,
como así también las condiciones que impidan que en el futuro
se incurra en nuevos incumplimientos, y aseguren el cobro puntual e íntegro
de las remuneraciones que se pacten con los futbolistas.
3º: Para el caso de lograrse el cumplimiento de lo acordado en la
cláusula anterior, se faculta al CD a levantar la medida.
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Diez años sin
la Magia
Fueron los últimos 41 minutos de su exitosa carrera como
futbolista. Exactamente el 5 de mayo de 1991, hoy hace diez años,
Ricardo Enrique Bochini (foto) jugó su último partido
oficial con la camiseta de Independiente. En ese encuentro ante
Estudiantes, que se jugó en Avellaneda y terminó 1-1,
el volante tuvo que salir lesionado en el primer tiempo por una
fuerte falta de Pablo Erbín. De esa manera se despedía
uno de los más talentosos jugadores que dio el fútbol
argentino, en el que jugaba profesionalmente desde el Metropolitano
de 1972. Campeón del mundo en México 1986, hoy trabaja
con las divisiones inferiores del club de sus amores; el “Bocha”
quedará para siempre en la historia grande del fútbol
argentino.
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LOS
JUGADORES NO SABIAN QUE HACER
C y D, obligados a jugar
Por A.G.
Mientras en la sede de Futbolistas
Argentinos Agremiados (FAA) los jugadores de Primera A, Nacional B y Primera
B discutían sobre seguir o no con el paro, varios de los muchachos
de la C y la D no tenían certezas de que hoy tuvieran que presentarse
a disputar los partidos correspondientes a sus respectivos torneos. Claro
que la AFA programó sus partidos y el equipo que no se presente,
perderá los puntos.
“Antes que nada, ¿sabés si nosotros jugamos?”,
contestó el delantero de Fénix, Sebastián Neuspiller,
cuando Página/12 lo consultó acerca de su opinión
sobre la medida de fuerza. “Mi intención es no jugar para
solidarizarme con la medida. Pero si el técnico me lo pide, voy
a tener que ir porque me debo al club”, comentó Neuspiller,
estudiante de medicina y el máximo goleador de la categoría.
En cambio, el defensor de Central Ballester, Lucas Abrigo, ya tenía
certezas sobre su presencia en el partido ante Centro Español,
por la Primera D. “Nosotros jugamos, porque el paro no nos abarca.
En el plantel ni siquiera se habló del tema”, señaló
Abrigo. Algo más de incertidumbre tenía el zaguero de Ituzaingó,
Néstor López, que esta tarde será titular ante Lamadrid
por el Reducido de Primera C. “El técnico nos dijo que nos
teníamos que presentar, así que me parece que jugamos”,
contó López.
Lo curioso fue que la primera información sobre la continuidad
de la medida de fuerza dispuesta por los jugadores la dio el delantero
de Laferrère, Guillermo Szeszurak, uno de los futbolistas a los
cuales el paro no lo afecta. Szeszurak, ídolo de la infancia de
Javier Saviola por su paso por Excursionistas, estará hoy en la
cancha de San Miguel donde su equipo se enfrentará con Urquiza
por el Reducido de la C.
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