River perdió 2-0 ante Emelec el partido de ida de los cuartos de final de la Copa Libertadores, en Guayaquil. La diferencia no es determinante para el partido de vuelta, el jueves en el Monumental, pero castigó la falta de precisión del equipo argentino, que tuvo muchas ocasiones para igualar.
Desde el arranque se fue estableciendo cierta superioridad visitante en el desarrollo del encuentro. Los encuentros entre Ortega y Saviola, bien apoyados por Pereyra y Zapata, germinaban con mayor ahínco cerca del área defendida por Viteri. Sin embargo, tuvo que darse la caída de la propia valla como para que River llevara verdadero peligro al arco rival.
Durante los primeros 20 minutos se registraron pocas situaciones realmente de riesgo. Cardetti tiró una volea de zurda por arriba del travesaño cuando apenas se jugaban 5 minutos, Candelario disparó un tiro libre por encima del horizontal cerca de los 8. River insinuaba más, y por eso sorprendió la apertura del marcador.
Fue una jugada desafortunada: Wellington Sánchez escapó por derecha a la marca de Sarabia (lo más flojo de la defensa visitante) y remató bajo, al primer palo, un disparo que Bonano no pudo retener, y que antes de la segunda reacción del arquero, el ex Gimnasia de Jujuy Pedro Aguírrez envió al fondo del arco. Una ventaja inesperada para los dirigidos por el argentino Rodolfo Motta.
El gol inauguró una ofensiva de River que mereció la igualdad pero chocó contra la figura del golero ecuatoriano Viteri: a los 24, sacó al corner un disparo de cardetti. Del tiro de esquina, Ortega cabeceó al gol pero el arquero reaccionó también en gran forma.
A los 29, una combinación por derecha terminó en la habilitación de Cardetti para Ortega, pero cuando el jujeño iba a rematar al empate, Aguírrez barrió despejando; y dos minutos más tarde, un contragolpe entre Ortega y Saviola terminó en una pase milimétrico del primero que el juvenil acabó desperdiciando al tirar apurado.
Un minuto más tarde, Ortega sacó un remate cruzado desde la izquierda que contuvo el arquero y, a los 33, Cardetti ejecutó un tiro libre esquinado que salió rozando el palo, sin que nadie la empujara. A los 38, una fuerte falta de Aguírrez sobre Ortega derivó en un tiro libre: Cardetti cedió para Zapata que estrelló la pelota en el travesaño. Pero el empate no llegó. Peor aún: Ortega tuvo que quedarse en el vestuario.
Sin tanto fútbol en el complemento, River perdió precisión y puntería. Los contragolpes de Emelec se hicieron peligrosos y una jugaba combinada en el área de River, rematada por Candelario al arco, puso el 2-0. En el último minuto, Cardetti tiró afuera un penal que le cometieron.

BOCA, ANTE JUNIOR, CON GUILLERMO Y DELGADO
Una fórmula de la Gran Siete

Con una nueva fórmula ofensiva, con dos delanteros por los costados y sin centrodelantero, Boca comenzará hoy el tramo más exigente en la defensa de su título de último campeón de la Copa Libertadores de América, cuando enfrente al Junior de Barranquilla, en Colombia, en el partido de ida de los octavos de final del torneo continental. El encuentro comenzará a las 23.00 horas, será arbitrado por el brasileño Antonio Pereira y televisado en directo por Canal 13.
Boca, que superó con comodidad la primera ronda, ganó cinco partidos seguidos en el grupo 8 y se clasificó anticipadamente –aunque cayó con una formación mixta en su última presentación ante Deportivo Cali–, tiene ahora un doble compromiso: conseguir su pasaje a los cuartos de final y levantar el rendimiento del equipo, ya que en esta etapa del certamen los rivales se vuelven más exigentes y casi no queda margen para el error.
Frente a este panorama, Bianchi decidió incluir en la formación a los mejores exponentes del equipo. Retornará el arquero colombiano Oscar Córdoba en lugar de Roberto Abbondancieri, y habrá una variante importante en la ofensiva: los delanteros serán Marcelo Delgado y Guillermo Barros Schelotto. No habrá ningún centrodelantero desde el arranque, porque debido a las fallidas respuestas de Fernando Pandolfi y Antonio Barijho, Bianchi decidió poner a Delgado y Schelotto, aunque ambos jueguen por afuera, porque son los que más han rendido en los últimos encuentros. Con este esquema habrá que prestarle mayor atención al juego de Juan Román Riquelme, quien jugará un poco más adelantado en la cancha y tratará de tener más presencia en la zona de definición.
Por su parte, Junior, subcampeón del fútbol colombiano, clasificó segundo en el Grupo 1 que ganó Central, y demostró que impone una localía fuerte, pero también que es vulnerable cuando juega fuera de Colombia. Los colombianos perdieron en Liniers frente a Vélez (2-0) y en Rosario ante Central (1-0), y su entrenador Norberto Peluffo ya adelantó que el partido de vuelta, en La Bombonera, no será sencillo.

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