|
Por Fernando Cibeira La brecha abierta entre el Frepaso y su creador, el ex vicepresidente Carlos �Chacho� Alvarez, es cada vez más evidente. Ayer, luego del reportaje a Página/12 en el que Alvarez dijo que en octubre votaría a Elisa Carrió, el jefe del bloque de diputados de la Alianza, Darío Alessandro, advirtió que no hay que �dinamitar� la coalición porque si no queda como única opción el justicialismo. Alessandro aclaró que tiene �una posición diferente� a la que mostró Alvarez en la entrevista y que, en todo caso, las decisiones se tomarán luego de discutirlas en el seno de la fuerza. En la conducción frepasista ya no dudan de que Chacho va por la construcción de un nuevo núcleo �progresista�, pero entienden que no pueden desentenderse del gobierno que ayudaron a crear. �Chacho se está inventando su propia película con las partes de la realidad que le convienen, pero está claro que tenemos que hacernos responsables de lo que nos corresponde�, explicaba uno de los principales dirigentes frepasistas. En el Frepaso admiten que no hay nadie que piense exactamente igual sobre cuál es la actitud que debe adoptar la fuerza. Pero, detalles más o menos, Alessandro, Aníbal Ibarra, Juan Pablo Cafiero, Graciela Fernández Meijide, Nilda Garré y los intendentes frepasistas del conurbano entienden que deben permanecer en la Alianza, aunque con una mayor autonomía de las iniciativas de la Rosada. Ibarra, incluso, comenzó a incursionar en la variante de forjar una Alianza �progresista� con los sectores del radicalismo que responden al ex presidente Raúl Alfonsín. �Tenemos que revitalizar un sujeto político que está devaluado en la Argentina, que es la Alianza. De desaparecer la Alianza, dejamos a la Argentina con una sola opción de política y gobierno real, que es el embudo o cuello de botella en el que está la Argentina hoy�, explicó Alessandro en diferentes radios. En el Frepaso entienden que Alvarez se equivoca al pensar que la fuerza puede integrarse como si nada a una nueva alianza que tenga como vértice a Carrió, la mimada de las encuestas de popularidad en Capital. Primero, porque no lo consideran ventajoso desde lo político. �Si la Alianza fracasa no gana Carrió, gana Ruckauf�, evaluaba ayer un importante dirigente. Segundo, porque no lo creen viable. �Nos tenemos que hacer cargo de la realidad. Acordarnos que Chacho y los cinco ministros progresistas que tuvo este gobierno se dedicaron más a competir entre ellos que a cambiar el modelo. Que, en su momento, Chacho fue el que más hizo porque (el cavallista Juan) Llach asumiera en Educación y que lo puso a Cavallo más que el propio De la Rúa�, puntualizaba ayer un dirigente que hasta hace poco respondía ciegamente a Alvarez. Dentro de la fuerza, rumiaban cierta bronca por la nueva aparición de su antiguo líder. �Anunció que se alejó de la política pero sigue hablando: es una posición tramposa�, insistía el dirigente. �Dijo que iba a dejar que decidiéramos libremente pero a cada rato nos está diciendo qué tenemos que hacer�, agregaba. Con todo, en público, los frepasistas continuarán preocupándose en mantener posiciones que no puedan ser mostradas como antagónicas �aunque sí diferentes� de las de Alvarez. Además, reconocen que en sus intervenciones, Chacho se confiesa consciente de que la fuerza política no puede adoptar sus posturas, un dato que, en definitiva, lo llevó a anunciar su retiro de la actividad partidaria. Para Alessandro, según declaró, el futuro mediato del Frepaso tiene que apuntar a tres cosas mucho antes que tentar una unión con Carrió, con lo que puntualizó las actuales diferencias del partido con Chacho: Gobernabilidad: el Frepaso tiene que demostrar que tiene poder de gestión, un déficit que suele achacársele a las fuerzas progresistas. Para ese objetivo, es indispensable fortalecer la labor de Juampi Cafiero en el Ministerio de Desarrollo Social y la de Ibarra en la ciudad. Alianza: ratificar a la coalición como opción de poder y no pronosticar su muerte prematura. Propuestas: la mejor forma para el Frepaso de diferenciarse de las políticas de la Rosada no es con más críticas sino que con proyectos que demuestren alternativas al modelo neoliberal. |
|