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 A pesar de tomar todas las precauciones
que deben tomar los amenazados por ETA, el periodista Gorka Landaburu
resultó herido ayer al explotarle un paquete bomba en su domicilio
de Zarauz (Guipúzcoa). Landaburu, que trabaja para Cambio 16, Diario
de Andalucía, Canal Sur y otros medios, sufrió pérdida
completa del primer dedo de la mano derecha, amputación y fracturas
en ambas manos, heridas múltiples en cara y abdomen y una hemorragia
intraocular, según el parte médico facilitado por el hospital
donostiarra Nuestra Señora de Aranzazu. Poco antes del ataque,
el consejero vasco de Interior, Javier Balza, había anticipado
la inminencia de una nueva ola de atentados etarras. “Por desgracia
estamos convencidos de que, tras las elecciones, ETA va a intentar actuar
para demostrar que sigue existiendo a pesar de que la sociedad vasca le
ha dicho clarísimamente que no tiene razón de ser”,
opinó.
El lehendakari (presidente vasco) en funciones, Juan José Ibarretxe,
y gran vencedor con su Partido Nacionalista Vasco (PNV) en las elecciones
autonómicas del domingo, se desplazó desde la capital Vitoria
a San Sebastián acompañado del consejero de Sanidad, Gabriel
Inclán, para visitar a Landaburu. El periodista había sido
atacado en otras ocasiones, como el 7 de octubre de 1998 cuando varios
desconocidos lanzaron cócteles molotov contra su domicilio, y el
8 de septiembre de 1995, cuando varios encapuchados pintaron el anagrama
de ETA en la fachada de su vivienda.
Landaburu pertenecía a Euskadiko Eskerra y es militante socialista
desde 1993, cuando esta formación se fusionó con el Partido
Socialista vasco (PSE). En los comicios del domingo, la plataforma independentista
Euskal Herritarrok (EH/Ciudadanos Vascos) –considerada el brazo político
de ETA– sufrió una derrota que le hizo perder la mitad de
sus bancas en el Parlamento. ETA ha enviado paquetes bomba a varios periodistas
durante el último año y mató a balazos a un columnista
político, lo que puso en alerta a otros escritores. Landaburu tiene
escolta y cumple todos los recaudos de los posibles blancos de ETA. Pero
Asunción Cobeaga, secretaria del periodista, dijo que el paquete
fue enviado de manera que luciese como una publicación que Landaburu
recibe normalmente cada mes. La explosión se produjo tras abrir
un paquete postal que recibió el lunes y que aparentemente contenía
un ejemplar de la revista de Elkargi Sociedad de Garantía Recíproca,
una sociedad mercantil de naturaleza financiera.
A nivel político, ayer el conflicto pareció distenderse
un poco tras las tensas semanas de campaña electoral. El conservador
Partido Popular (PP), en el gobierno en Madrid, prometió estudiar
la propuesta de diálogo de Ibarretxe. El PP había cortado
todo contacto con el PNV de Ibarretxe luego de que éste aceptara
los votos de EH para ser elegido en 1998. El lunes, el presidente del
PNV, Xabier Arzalluz, había propuesto una negociación por
la paz con diálogo de todos los partidos, “como en Irlanda”.
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