Por Eduardo Febbro
Desde
París
Louis-Ferdinand Céline
salió ayer del purgatorio. El manuscrito de la obra maestra del
autor maldito de la literatura Céline, Viaje al fondo de la noche,
fue rematado ayer en París por 11 millones de francos, algo más
de 1.500.000 dólares, un record para este tipo de manuscrito. La
identidad del comprador no fue revelada pero las 876 páginas del
manuscrito, rayadas, tachadas y mil veces corregidas, permanecerán
en Francia ya que la Biblioteca Nacional de Francia interpuso su derecho
prioritario para que el texto original no deje el territorio.
Aplausos y un prolongado rumor de estupefacción recorrieron la
sala de remates de Drouot-Montaigne cuando el martillero de esta célebre
y selecta casa de remates bajó el martillo por tercera vez. Nadie
esperaba que el manuscrito de Céline llegara a semejante cotización.
Uno de los expertos que lo había evaluado calificó de milagro
el precio final, mientras que el portavoz de Drouot-Montagne admitió
que se trataba de algo totalmente extraordinario: Imagínese,
las estimaciones no habían sobrepasado los 4 millones de francos
(563 mil dólares). A título comparativo, un pasaje
de la novela Ulises de James Joyce se vendió en diciembre pasado
en poco menos de 10 millones de francos, mientras que el manuscrito Del
lado de Swan de Marcel Proust alcanzó en junio de 2000 los siete
millones de francos.
Céline y su prosa única no sólo revolucionaron la
literatura francesa sino también el mercado de los manuscritos
literarios. Para los estudiosos, el hallazgo del texto de Céline
tiene un valor inestimable, ya que permite comprender los mecanismos mediante
los cuales se construyó una de las obras más importantes
y sombrías del siglo XX. El manuscrito presenta una versión
de Viaje al fondo de la noche bastante diferente de la primera edición
de la novela publicada por la editorial Denoël en 1932. Desde ya,
el texto original presenta un cambio considerable en cuanto a la identidad
de quien cuenta la historia, es decir del yo de la novela.
En la primera versión, el narrador no es Bardamu sino Arthur Ganate,
el personaje conformista de la novela. Entre el manuscrito y la edición
final Céline cambió la identidad del narrador y con ello
le aportó a la novela una de las transformaciones más determinantes
de Viaje..., tanto más cuanto que ese nuevo yo de la
segunda versión y el montaje verbal con que se confunde con las
otras voces le dan a la novela esa dimensión polifónica
inédita, que aún hoy marca a los lectores que la abordan
por primera vez. La lectura del manuscrito permite constatar también
los cambios realizados en el desarrollo de la historia, así como
las detalladas y repetidas correcciones palabra por palabra efectuadas
por Céline.
La historia del manuscrito de Viaje al fondo de la noche guarda una enorme
parte de misterio. Vendido por Céline en 1943 por unos 20.000 francos
actuales y un pequeño cuadro de Renoir, las huellas del texto se
perdieron para siempre en 1950 luego de la muerte de su comprador, Etienne
Bignou. El autor ya era conocido en Francia, tanto por su obra como por
los panfletos antisemitas que escribía y sus simpatías con
la inaceptable causa del nazismo. En 1944, Céline viajó
a Alemania, donde asistió al ocaso del Tercer Reich. La derrota
del nazismo y las purgas contra sus cómplices no tardaron en alcanzarlo.
Refugiado primero y luego encarcelado en Dinamarca, Céline regresó
a Francia donde vivió ignorado por casi todos. Fue el escritor
maldito, el hombre proscrito de la República de las letras
y, al mismo tiempo, el médico de los pobres con una existencia
confinada en su casa de la localidad Meudon, sumergido en una miseria
negra sólo poblada por su mujer Lucette y sus decenas de perros
y gatos. Durante más de 40 años, el manuscrito dio lugar
a las más increíbles supersticiones: se lo decía
perdido, recuperado y quemado por Céline, escondido en la Argentina
en manos de neonazis refugiados. Finalmente, el texto apreció tan
misteriosamente como se había esfumado. A sus 87 años, el
librero Pierre Berès puede sentir que los treinta que pasó
buscando el manuscrito no fueron en vano: a fines de 2000, el manuscrito
le llegó de manos de un misterioso coleccionista inglés.
Viaje... es una de las obras inigualables del siglo XX. Los críticos
franceses dividen la historia de la literatura francesa en un antes y
después de su aparición. Con la misma razón, Miguel
Briante y Osvaldo Soriano dividían la historia personal de una
vida entre un antes y un después de la lectura de Viaje al fondo
de la noche.
EL
IMPUESTO AL LIBRO, SIN NOVEDAD
La ley IVA a salir
La polémica por el marco
impositivo que regirá la producción de libros en el país
no pudo ser resuelta ayer, pese a las reuniones mantenidas entre la cámara
que nuclea al sector y legisladores, por lo que se aplazó el tratamiento
de la Ley del Libro. Sin embargo, la Cámara Argentina del Libro
(CAL) adelantó que quedó casi descartado la aplicación
del IVA con una alícuota del 10,5 para la venta al público
de libros, mientras que la polémica se mantiene por el pago de
ese impuesto en la etapa de elaboración. En este sentido,
el texto original del proyecto de ley, en su artículo 11, contempla
la exención del IVA para la producción y comercialización
del libro en todas sus etapas.
Al día siguiente que en el Boletín Oficial se confirmó
la exención del IVA para algunos textos, la CAL continuó
el debate con el diputado Raúl Baglini, presidente de la Comisión
de Presupuesto y Hacienda que impulsa el cambio del texto original
y el secretario de Ingresos Públicos, José María
Farré. Luego del encuentro, el vicepresidente de la CAL, Daniel
Divinsky, dijo que Baglini les adelantó que la ley tal como
vino del Senado no puede salir, pero admitió que los
denominados libros de estampas, con dibujos para colorear destinados a
los niños, no deberían ser gravados. Baglini nos dijo que
el proyecto del Senado es inviable, pero se mostró más flexible
y ofreció eximir del IVA a los alquileres de las librerías.
Sin embargo, al persistir las diferencias los representantes de la CAL
se reunieron también con diputados del Partido Justicialista, hoy
lo harán con los de la Alianza y mañana dialogarán
con todos los bloques. Fuentes de la Cámara de Diputados, por su
parte, anticiparon que, al no haber acuerdo, el proyecto de la Ley del
Libro se tratará en un lapso de diez días. El
texto original de la ley asegura que el Estado nacional reconoce
en el libro y la lectura instrumentos idóneos e indispensables
para el enriquecimiento y trasmisión de la cultura.
Mientras tanto, el mundo del cine continúa su propia puja: el secretario
de Cultura y Medios de Comunicación, Darío Lopérfido,
y el director del INCAA, José Miguel Onaindia, informarán
hoy sobre los resultados de las reuniones mantenidas con la industria
cinematográfica y el Ministerio de Economía. Ambos funcionarios
y los principales referentes de las entidades que nuclean a directores,
productores, actores y trabajadores del sector ofrecerán una conferencia
de prensa a las 15.15 horas en la sede del Incaa, en Lima 319.
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