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LA PECULIAR INTERPRETACION DEL CASO ARMAS DE LIBARONA
“Emir era el candidato ideal”

Para el abogado Mariano Cúneo Libarona, su defendido, Emir Yoma, es víctima de una conspiración. �No hay pruebas�, repite a cada frase, mientras descalifica testigos y testimonios. Habla regularmente con Carlos Menem.

“Desinteresadamente yo colaboro
con los abogados de Menem”,
explica Cúneo Libarona.

Por Eduardo Tagliaferro y Adriana Meyer

El cansancio no calma su verborragia. Aunque no lo admita, aceptó la defensa de Emir Yoma más por lealtad que por fama o dinero, que ya figuraban en el haber de Mariano Cúneo Libarona. Resistido por el entorno íntimo de Carlos Menem, admite que habla cotidianamente con el ex presidente sobre la causa en la que se lo señala como el jefe de la asociación ilícita que vendió ilegalmente armas a Croacia y Ecuador. Un largo camino recorrió desde que asumió la defensa de Amira Yoma, en el denominado Narcogate, alternando con el estudio Iribarren y Asociados y Julio Maier. Dice con tanta vehemencia que en el “expediente no hay pruebas” que quien lo escuche pensará que Emir enfrenta una conspiración de idiotas. “Emir fue el sospechoso de siempre del gobierno menemista”, afirma en un reportaje exclusivo con Página/12.
–¿Cómo evalúa la situación de Yoma en la causa por las armas?
–Si se analiza jurídicamente el expediente, la causa está sin pruebas. El expediente debe ser el reino de las pruebas, no basta con la imaginación. Para mí las que hay, al margen de su origen extraño, son absolutamente endebles para sostener la acusación de organizador de la asociación ilícita.
–¿A qué se refiere cuando habla de pruebas con un origen extraño?
–Es muy rara la confesión de (Luis) Sarlenga, es muy rara la aparición de Lourdes (Di Natale). Ella aparece cuando dejan de pagarle, Yoma la denuncia por extorsión y fue a la revista Noticias.
–¿Ella afirmó que en su momento usted le dijo “tu jefe está detrás de lo de las armas”?
–Cuando dijo eso yo ya no vivía con ella, después la metió a Aurelia (Eli Hoffman). Uno la escucha a Lourdes y se da cuenta que no es normal, lo dice el peritaje médico, tiene tendencia a la fabulación. Peritaje que no hice yo sino los médicos de la Corte.
–¿Quien lo escucha diría que después de 6 años de investigación, en los casi cien cuerpos de la instrucción no hay nada?
–Para mí no hay elementos probatorios. Si se agarran sólo de lo que dice Sarlenga no hay fundamentos. Si se analiza esto jurídicamente tiene que terminar bien para mi cliente. Confío en que el tribunal lo analice desapasionadamente, sin tener en cuenta lo que dicen los medios. Los medios reflejaron lo que dijo Sarlenga. Fue él quien declaró que pasó por las oficinas de Emir a buscar un sobre con el número de cuenta de Daforel en el que debía depositar 400 mil pesos. Sarlenga dijo: el número me lo mandó Lourdes en un sobre, se lo dio a alguien que no voy a decir quien fue. Lourdes solo dijo “puede ser, tal vez”. Además la declaración fue absolutamente indicativa ya que no le preguntaron qué sabía ella, sino que previamente le leyeron la declaración de Sarlenga. ¿Por qué no dijo lo del sobre y el papelito en su primera declaración? La primera vez dijo “yo sospecho que es la cuenta de Yoma”, la segunda vez dijo “yo pienso que es la cuenta de Yoma”. En ningún momento dijo “es la cuenta de Yoma”.
–¿Qué manejo tenía Emir Yoma con la cuenta Daforel?
–Un hecho, el día 10 de abril del año ‘93 creo que en la foja 130, Palleros a través de su empresa Debrol le dice a FM “páguenme un adelanto de la comisión”, del séptimo embarque creo, 400 mil dólares en la cuenta tal de Daforel. Otro hecho fue que entre agosto de 1994 y 1996 hay 36 millones de dólares que la sociedad uruguaya Elthan Trading le aporta a Yoma S.A. Dentro de ese esquema hay una o dos transferencias que pasan por la cuenta Daforel y llegan acá al Banco Baires, al Feigin, al Banco Macro. El único punto en común es la cuenta Daforel por la que pasaron los 400 mil dólares que están en el juzgado contra los 36 palos que están blancos en la Argentina.
–¿Emir recuerda haberle dejado a Sarlenga un sobre con el número de cuenta?
–Ni loco. ¿Qué sobre, qué papelito? Uno lee las declaraciones de Lourdes y ve el trato que tenían. Luisito de acá, Luisito de allá, eran todos gomías. Ella, dice, llamaba mucho a Jorge Alcalde. En verdad Alcalde llamaba a las oficinas de Emir porque vivía hablando con ella.
–¿El nombramiento de Alcalde, Miguel Scarinche y Carlos Gómez en Fabricaciones Militares fue a propuesta de Emir?
–Los nombra Erman González y así lo declaró en el expediente: “Yo lo conocía a Alcalde de La Rioja”, dijo. También dijo que Alcalde le propuso nombrar a Scarinche y Gómez. Emir lleva a Fabricaciones Militares un expediente sobre los cables de Anguillán, con notas de Karim Yoma. El expediente dura como diez meses, en él casi todas las notas son con Gómez. Luego aparece un expediente en Fabricaciones Militares. Pero el propio Sarlenga dice que Alcalde no tiene nada que ver con el tema de las armas. Alcalde se fue en el ’92, mucho antes de todo este escándalo.
–Los embarques y los decretos comenzaron en 1991.
–Hay dos del ‘91. Alcalde es un comprovinciano, que tampoco tuvo nada que ver, es amigo de Omar Yoma. Iba a verlo a él. Con Julio Maier y Daniel Pastor, nosotros lo defendimos a Alcalde en una causa que tenía en la Corte. Yo llevé el recurso extraordinario en el año ’92. Nosotros atendíamos en las oficinas de la calle Paraguay. Yo laburaba allí. Acá se explican las visitas de Alcalde. Y aunque fueran íntimos amigos, ¿esto qué prueba? El juzgado creyó haber descubierto un grupo de riojanos amigos de Yoma, en verdad en esa época en cualquier lado iban a encontrar riojanos. Estaba lleno de riojanos.
–Entre el ’92 y el ‘93 hay un intervalo en los embarques hacia Croacia. ¿Sabe el motivo?
–Hay un lapso muy largo entre el ‘92 y el ‘93 que hay vacaciones. Hasta que aparece la carta de Sarlenga a Diego Palleros en la que le dice por qué no reflotamos Panamá. Sarlenga dijo que Yoma apareció por el Renar a registrar unas armas. Antes de eso ya había siete cartitas entre Palleros y Sarlenga, en la que se dicen “mandame armas para acá”. “Te mando un presupuesto para allá.” “Nombrame a Debrol representante allá”, todo eso es anterior a que Yoma aparezca en el Renar.
–¿Emir se reunió con Palleros antes de que éste se fugara?
–Hasta el mismo Palleros dice que se habían peleado. Lourdes dice que Palleros fue una vez. Sarlenga dice tres o cuatro reuniones. Emir dice nunca lo vi a Palleros. Palleros dice nunca lo vi a Emir.
–Sarlenga reconoció que actuaba con conocimiento de Yoma. ¿Cómo lo explica?
–No se sabe bien por qué, pero siempre sé que dijo que detrás de las armas estaba Yoma. Los que lo afirmaban creían ver en Yoma al alto empresario vinculado al poder político que había señalado Palleros. Sarlenga salía en libertad, por eso imputó a Yoma.
–¿Por qué?
–Porque era el candidato ideal que sobrevolaba sobre toda esta novela. Qué es lo que tenía que hacer, amalgamarlo sobre tres o cuatro hechos irrelevantes. No dijo ningún hecho relevante. Acá no hay prueba y sin ellas acá no hay estado de derecho.
–Usted no puede desconocer que durante los primeros años del gobierno de Menem, Emir tenía un fuerte predicamento.
–No está probado en la causa.
–No hablamos del expediente sino de la realidad
–Yo supongo que debe tener un poder bárbaro por lo que leí en las revistas. Nunca lo vi con ministros, no lo vi en la Casa de Gobierno.Yoma fue el sospechoso de siempre del gobierno menemista y esta es la primera vez que declara como imputado.
–El otro día Juan Bautista Yofre reconoció la influencia de Emir Yoma en el gabinete.
–En el expediente no lo dijo. Yofre es un campeón, dice las cosas frente a la prensa en las escalinatas de los tribunales pero no las dice en la causa.
–Si, como usted dice, Emir no tiene nada que ver ¿el jefe de la banda es Carlos Menem?
–Yo no creo que haya banda. Desinteresadamente yo colaboro con los abogados de Menem y no hay en esto ningún choque de intereses.
–¿Menem pudo estar ajeno a esta maniobra?
–No tiene por qué haberla conocido. Salvo la firma de los decretos, no hay ningún elemento objetivo en la causa que lo involucre.
–¿Habla con Menem sobre la causa?
–A menudo, y está indignado porque es una persecución absolutamente arbitraria. Si hay o no fantasmas detrás de esto no lo hablamos. Yo no soy muy menemista. No nací ahora, ni con el menemismo.
–Sarlenga denunció que los abogados Fernando López Mestre y Gustavo Romano Duffau fueron a verlo como enviados suyos buscando que cambiara su declaración, ¿qué tiene para decir?
–Conozco a los dos abogados. De la denuncia me enteré por los diarios. Según leí en los diarios, López Mestre fue a verlo con el hijo de Sarlenga y Romano Duffau fue recomendado por un riojano, creo. Además no creo que estos pibes hayan sido tan boludos como para proponerle plata y una planta de agua mineral en no sé donde. Es muy rara esta denuncia.
–¿Qué vínculo tenía Yoma con el traficante Monzer Al Kassar?
–En la causa Emir dice que lo vio una sola vez. Lourdes también.
–¿Cómo es un día de Emir en prisión?
–Emir de ánimo está fuerte. Tiene ideas, trae propuestas, recibe la visita de su mujer y de los chicos los fines de semana. Está mal porque le sacaron los celulares. Todos los presos tienen celulares y él no. Antes hablaba por teléfono con su familia y con Carlos Menem, ahora no puede.
–¿“Todos” son los genocidas Jorge “el Tigre” Acosta y el ex almirante Emilio Massera?
–Massera ya no está. Emir está preso junto a unos señores mayores.

 

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