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 Miguel Angel Santoro debutaba
anoche como técnico de Independiente pero, pese a la consigna,
el equipo que estrenaba DT no pudo ganar, pese a ir dos veces en ventaja
durante el partido. Unión pudo rehacerse, tuvo en Andrés
Silvera a su goleador y transformó al arquero visitante, Ariel
Rocha, en la figura del partido.
Independiente no había empezado bien en la cancha, porque Unión
lo presionaba llegando con muchísima más facilidad, gracias
al buen trabajo de Matías Donnet. El equipo visitante había
llegado bien recién a los 23 con un remate de Vuoso que atajó
Castellano, y luego una buena contra entre Garnero y Vuoso que se pinchó
en los últimos metros. La apertura del marcador llegó a
los 37, tras un saque lateral largo de Martínez, que Vuoso peinó
hacia atrás en el área y Forlán paró con el
pecho para rematar abajo y fuerte dentro del arco, dejando a Castellano
sin respuesta.
El segundo tiempo arrancó muy movidito. De entrada, llegó
la igualdad transitoria de Unión: centro de Donnet, toque de Parmigiani,
entrada fulminante de Silvera, que sacó un bombazo rastrero que
pegó en un palo y entró. Poco duró la alegría
de los santafesinos: menos de un minuto después, Vuoso le ganó
un anticipo a Vera y la tiró cruzado al segundo palo de Castellano.
Así se hizo un partidazo.
Cambiasso tuvo el tercero, pero solo contra Castellano la estrelló
contra el palo izquierdo, y Unión comenzó a crecer, encerrando
al visitante –ya con uno menos, por expulsión de Zelaye–
contra Rocha. Por eso no extrañó cuando Silvera encontró
la pelota por la derecha, en el área chica, y mientras el arquero
esperaba el centro, el goleador remató al primer palo, volviendo
a empatar el partido. Un resultado que terminó siendo justo.
QUILMES-BANFIELD,
A LAS 11
Final de la B Nacional
En medio de una gran expectativa,
Quilmes y Banfield, que llega con una luz de ventaja, disputarán
hoy la segunda y decisiva final de la Primera B Nacional por el primer
ascenso a Primera. El encuentro comenzará a las 11.00 y será
dirigido por el internacional Horacio Elizondo.
Banfield llega con la ventaja de haber ganado 2-1 el choque de ida y le
bastará con un empate para ser campeón y ascender. Pero
si Quilmes consigue una victoria, aunque sea por la mínima diferencia,
se quedará con todas las palmas por su mejor ubicación en
la tabla de la fase regular, en la que finalizó primero en la zona
metropolitana contra el segundo puesto conseguido por los visitantes.
El perdedor de esta serie se sumará al Reducido por el segundo
ascenso en un nuevo intento por llegar a Primera y el próximo miércoles
a las 16.45 visitará a Nueva Chicago en el partido de ida de las
semifinales de ese mini torneo. La restante semifinal del reducido será
protagonizada por Instituto de Córdoba y San Martín de Mendoza,
que se clasificó al igualar ayer 2-2 con Almirante Brown de Arrecifes.
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