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Tangos, cuecas y �Sau Sau�
en la fiesta popular

Miles de admiradores y curiosos asistieron a la gran fiesta en el estadio de La Rioja. Los novios bailaron el �Danubio Azul� y hubo números de folklore argentino, chileno y polinesio en su homenaje. Después que Menem cortó la torta de 600 kilos, la feliz pareja abandonó el festejo y partió rumbo al zoológico privado del flamante marido en Aminga. Por la noche, hubo un asado para los íntimos y para la familia en la hostería de Anillaco.

Por L.B.

Con sus bucólicos paisajes, con su hermosa gente, esta tierra bendita grita ¡Vivan los novios!�, gritó el animador en el polideportivo Carlos Menem cuando el homónimo llegó con esposa y comitiva. El público contestó con entusiasmo y así empezó la fiesta popular para celebrar el casamiento del riojano �tres veces gobernador de su provincia y dos veces presidente de la República�, como insistía el locutor. La fiesta fue mejor que la de la residencia porque la gente, al contrario que los políticos y famosos, concurrió en masa al locro con números artísticos, entre los que se contaron desde cuecas hasta danzas de la isla de Pascua tipo hawaianas.
Entre cuatro y cinco mil personas llenaron prácticamente el estadio que está a pocos metros de donde se realizó el civil. Sobre un costado del amplio recinto estaba la mesa principal con los recién casados en el centro, los Menem a la derecha y los Bolocco Fonk a la izquierda. Frente a ellos había mesas para los invitados especiales que habían participado en la recepción en la residencia, de lo cuales hubo muchos que se quedaron en el camino. Sobre la pista de básquet había otro recinto rodeado por rejas y un cordón de policías de civil, dentro del cual se sentaron otros invitados especiales del PJ y el gobierno provincial, y la gran mayoría de la gente que se sentaba en las tribunas después de hacer la fila para recibir su plato de locro caliente, pan y refrescos. Los periodistas estaban en otro corral al costado de la pista y los fotógrafos llamaban la atención de la pareja a los gritos. 
La gente siguió con buena onda la fiesta pero sin participar, más bien como espectadores de lo que sucedía en la pista y sobre todo en la mesa principal. �Cualquier otro se hubiera casado en Buenos Aires y ni venía para acá, pero Carlos es riojano de ley� decía un gordo desde la tribuna. Una señora defendía la fortuna de su comprovinciano: �Si yo fuera presidente hubiera hecho lo mismo, pero él se hizo la casa aquí en La Rioja, otro se hubiera gastado la plata por ahí�.
Desde la tribuna, Figuretti hacia chistes con un megáfono que a veces lograba imponerse al poderoso equipo de música que atronaba el espacio y las adolescentes perseguían a Camilo García sin prestar demasiada atención al resto del espectáculo. Entre el murmullo, el megáfono y las adolescentes fue imposible entender al locutor que trataba de generar consignas de adhesión y simpatía. Cecilia Bolocco de Menem se acercó entonces al primer vallado y arrojó el ramo de novia que fue rápidamente atrapado por una jovencita que lo exhibió como trofeo.
�A pedido de Cecilia se escuchará a continuación el `Danubio Azul�� se pudo distinguir que decía el animador, al tiempo que se sonaban los primeros compases del vals y la pareja festejada pasaba al frente. �¡Menem presidente!, ¡Menem presidente!� comenzó a gritar la tribuna. �Eso, macho�, gritó el gordo del principio. �¡Vamos Carlos!�, gritó otro mientras las mujeres y los niños aplaudían su destreza como bailarín. A Menem se lucía descansado, pese a que según dijo había pasado la noche leyendo proverbios árabes en la casa de su amigo Elías Saad, mientras la hasta entonces novia pernoctaba en la residencia de los gobernadores. Luego salieron a la pista de baile los padres de la novia y los hermanos del novio, sumados al vals.
Pese a los proverbios, no hubo esta vez danza del vientre. Un grupo de jovencitas con el ombligo al aire, corpiño floreado y vincha de flores irrumpió moviendo las caderas al son del ukelele en lo que todos pensaron era un baile hawaiano. Los chilenos explicaron que era un Sau Sau de la isla chilena de Pascua, donde también se bailan ese tipo de danzas cadenciosas. Las bailarinas, que después se sacaron una foto con la pareja, son chicas de una escuela especial de La Rioja que aprendieron esta danza polinesia en homenaje a la señora de Menem. Después vinieron gauchos que bailaron malambos, cuecas chilenas y tangos. Menem no bailó el tango con que conoció a su actual esposa en un cumpleaños del senador Antonio Cafiero, pero se dirigió resuelto a la torta de 600 kilos y cortó los primeros pedazos. Cecilia le dio un pedazo de torta en la boca y él retribuyó el gesto. Allí terminó la fiesta pero no los festejos. Menem, ya con Bolocco, partió hacia Anillaco. La caravana recorrió los cerca de cien kilómetros que separan a la capital Anillaco, con parada en el zoológico privado que tiene en Aminga.
La comitiva llegó a la casa de Amado Menem y luego se iba a comer a la hostería Los Amigos, en la entrada del pueblo, rodeada de los viñedos que antes pertenecían a los Menem y ahora son de Carlos Spadone. Alfonso Millán, el encargado de la hostería, ya tenía preparado el asado y dio a entender que la pareja se quedaría a dormir en Anillaco y que hoy viajará a Buenos Aires. �Ya les dije que tengo calentita la suite nupcial� dijo, con la ilusión de que esta noche se olvide de los proverbios árabes.

El casamiento en internet
El gobierno de la provincia de La Rioja habilitó una página de internet con fotos de la ceremonia y de la fiesta de casamiento de Carlos Menem y Cecilia Bolocco. La dirección es www.larioja.gov.ar/casamiento.htlm
 y la página invita a �compartir este feliz momento enviándonos un e-mail�. La página muestra fotos de los invitados, del lugar de la fiesta y de su desarrollo. 


�Hay gente que piensa que enloquecio�
Tiene la misma tonada que Cecilia Bolocco, los cabellos rubios y la simpatía de las chilenas. Vino al país para participar de un seminario para mujeres periodistas en el Freedom Forum. Terminó cubriendo el fenómeno que generó de este lado de la cordillera el casamiento de la animadora y el ex presidente. �En Chile tenemos otra forma de ser, somos más recatados y pudorosos�, explicó Virginia Herrera, columnista de la revista semanal El Sábado que publica el conservador diario El Mercurio. En diálogo con Página/12, destacó que en su país �mucha gente cree que (el matrimonio de Bolocco con el riojano) es para entrar en el mercado argentino y de Latinoamérica�. 
�¿Qué reacciones provocó el casamiento?
�En general están divididas las opiniones. Mucha gente cree que ella lo hace para entrar en el mercado argentino. Se especuló que Telefé le había propuesto hacer su programa en Argentina y evidentemente, a partir de la boda, ha sido noticia en América latina. Otra parte de la gente cree que ella enloqueció. Ha tenido una vida sentimental llena de fracasos y Menem la pudo haber tratado mucho mejor de como la trataron antes. Ante las cámaras se ha mostrado como una adolescente: �Estoy tan enamorada�, �es el amor de mi vida�, esas cosas. En Chile la diferencia de edad no es común. Se cree que cuando una joven anda con un mayor hay un interés monetario. En Chile somos más recatados y más pudorosos. En este caso, se trataba de la diva número 1, la mujer más destacada, la única Miss Universo. Había hecho programas que tuvieron rating aunque no fueron valorados intelectualmente. A pesar de todo eso, en mi país los noticiarios anunciaron que iban a darle al casamiento una cobertura especial, que nunca supera los 20 minutos. No era una noticia lo suficientemente seria como para salir en la tapa de los diarios. Acá, en cambio, esto parece hecho para los medios de prensa. 
Entrevista: Martín Piqué.

 

La vista del estadio, con los sectores para la familia, la prensa y para todos los que quisieran asistir y compartir el locro. Eduardo Menem fue de los primeros en bailar con su flamante cuñada Cecilia.

 

 

 

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