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 Cuando la situación del Racing Club en el partido y en la tabla de los promedios se agravaba hasta la desesperación, Diego Milito consiguió un poco de oxígeno sobre la hora al convertir el empate 1-1 como visitante de Colón de Santa Fe. Milito se acomodó fuera del área y despidió un derechazo cruzado que batió a Leonardo Díaz, a pesar de que los méritos habían sido de los locales, quienes tuvieron oportunidades para golear.
Después de su golazo, el delantero festejó casi hasta el delirio y, como se sacó la camiseta cuando ya estaba amonestado, fue expulsado por el árbitro Horacio Elizondo. Racing le lleva ahora cuatro puntos de ventaja a Argentinos Juniors en la lucha por evitar la temida Promoción, pero los de La Paternal tendrán la oportunidad de achicar la diferencia cuando visiten a Los Andes. El gol de los santafesinos lo había obtenido Claudio Graf, a los 22 minutos del primer tiempo, luego de eludir a Gastón Sessa, todo consecuencia de una acción insólita, ya que se originó en un rechazó del chileno Pablo Contreras que dio en la espalda de su compañero Claudio Ubeda. Un papelón más dentro de una partido en que proliferaron las torpezas que de ocho a diez mil personas padecieron en suelo santafesino. Y el empate del local, además.
La igualdad fue absolutamente negativa para Colón, porque mereció más, porque fue incapaz de completar la tarea y porque prácticamente se quedó sin esperanza de meterse en la Copa Mercosur 2001. Racing llegó a Santa Fe para desplegar un esquema conservador, pero después del gol de Graf el que se retrasó fue Colón, que le cedió el dominio del trámite a Racing, que se arrimó con un par de situaciones de relativo riesgo, con remates de media distancia de Chatruc y Arano.
En el segundo tiempo Colón recuperó el dominio y se mostró más entero que su adversario, desordenado e impreciso. Racing se quedó para peor sin Sessa, lesionado a los 15 minutos del complemento. Hubo incluso un cabezazo de Ubeda contra su propia valla que casi provoca un segundo gol, pero salvó el recién ingresado Gastón Pezzuti estirándose arriba y hacia su derecha. Cuando estaba Sessa todavía, a los 8 minutos, hubo también un disparo de Graf desde 35 metros que rebotó en el travesaño. Colón despilfarró y despilfarró, hasta que Racing lo embocó.
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