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Por
Raúl Kollmann
 Luis
Zamora, quien fuera referente del Movimiento al Socialismo, vuelve a la
política. Un grupo de intelectuales, artistas, ex militantes de
partidos de izquierda, gente que viene de hacer experiencias en cooperativas,
hospitales y barrios decidieron poner en marcha un movimiento que, en
principio, se va a llamar Autodeterminación y libertad.
No es un partido ni una organización ni cree en la conformación
de estructuras verticales ni tiene un programa acabado, sino que es un
grupo de gente que decidió juntarse en base a algunos puntos básicos
.buscar nuevas formas de socialismo, estimular una horizontalidad sin
jefes.y la idea es, en una carrera contra el tiempo, intentar conseguir
las 4.000 firmas necesarias para presentar una lista en la elección
de octubre, postulando a Zamora como primer candidato a diputado en la
Capital Federal. El movimiento tiene sede en la vivienda de uno de sus
integrantes, funciona después de las 18 ya que todos trabajan,
tiene apenas un teléfono y busca voluntarios para ayudar a recolectar
las firmas necesarias.
Como se sabe, Zamora dejó la política partidaria hace varios
años después de haber llegado al Congreso Nacional en 1989.
En aquella oportunidad, Izquierda Unida (IU) obtuvo 600.000 votos, con
casi 300.000 en la provincia de Buenos Aires.
Zamora fue en esa ocasión candidato a vicepresidente de IU acompañando
en la fórmula a Nestor Vicente. Ambos habían disputado una
masiva interna abierta en el mes de diciembre de 1988 para determinar
el orden de la fórmula.
También se recuerda la llamada Plaza del No, una concentración
multitudinaria realizada en Plaza de Mayo, sin dudas la mayor convocatoria
que logró la izquierda en los últimas décadas. Fue
de las primeras movilizaciones contra el gobierno de Carlos Menem, en
especial contra su política de privatizaciones.
A mediados de los 90, Zamora se alejó del MAS casi en silencio,
evitando la confrontación pública. Desde entonces trascendieron
varios hechos atípicos: siendo diputado nunca cobró su dieta;
cuando dejó el cargo, aunque todos los legisladores tuvieron derecho
a una jubilación de privilegio, Zamora no la cobró y durante
los últimos años se dedicó y aún se dedica,
mientras va rehaciendo su actividad de abogado, a vender libros para lograr
el ingreso familiar.
Algunos le dicen movimiento, otros lo llaman encuentro, ámbito
o red, pero lo concreto es que se trata de un grupo de gente que tiene
algunos puntos en común y que afirma .no queremos un partido-ejército
para tomar el poder y no creemos en el criterio de que un grupo de iluminados
le enseña a la gente. De manera que nos juntamos para pensar, buscar
una salida., según le explicó a este diario un integrante
del movimiento.
El movimiento se llamaría Autodeterminación y libertad porque
justamente la idea es el grupo no tenga jefes, las actividades no son
obligatorias y se van designando personas, en forma rotativa, para determinadas
tareas. .Autodeterminación significa tomar las cosas en nuestras
manos, una democracia de los de abajo., insisten en el grupo.
Algunos de los puntos en los que se basa el movimiento son:
- Anticapitalismo, es decir disconformidad con el actual sistema.
- Búsqueda de nuevas formas del socialismo.
- Horizontalidad, un movimiento sin jefes.
- Búsqueda de las nuevas experiencias que están haciendo
los pueblos como el zapatismo, sectores del Movimiento de los Sin Tierra
en Brasil, el movimiento antiglobalización surgido en Seattle.
- Reivindicar la identidad latinoamericana.
- Rescatar el término imperialismo y la denuncia de la dominación
económica y cultural.
Entre las tareas que afronta el nuevo movimiento está el intento
de presentar una lista en la elección de octubre. La justicia electoral
requiere de 4000 firmas –personas con nombre y apellido, número
de documento, dirección y hasta nombre del padre y la madre–
para legalizar una fuerza que pueda participar de los comicios en la Capital
Federal. Además, el plazo de presentación de listas se cierra
45 días antes, demanera que las firmas y los trámites burocráticos
tienen que ser completados a la velocidad del rayo. El funcionamiento
para todo se realiza en el departamento de uno de los integrantes del
movimiento, después de las 18, a través del teléfono
4953-9563.
“Está claro que no queremos partidos porque justamente somos
algo en formación –redondea una de las mujeres del grupo–.
Queremos ser contracultura y contra-poder. No tenemos posiciones definidas
en muchísimos temas en verdad. Lo principal es estimular y estimularnos
a participar, a comprometernos con lo que está pasando. Acá
no somos profesores buscando alumnos, sino gente tratando de pensar en
voz alta, buscando un camino.
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