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 San Lorenzo vive por estas horas
su vigilia más esperanzada, y con el mismo fervor sus hinchas agotaron
ayer a la tarde las populares para el trascendental partido de mañana,
ante Unión, en el que un empate los consagrará automáticamente
campeones del torneo Clausura. El plantel se entrenó ayer por la
mañana y el técnico Manuel Pellegrini ratificó el
equipo titular; los jugadores de Unión, en tanto, se manifestaron
abiertos a la posibilidad de una incentivación por parte de River
–algo estrictamente penado por el reglamento de la AFA–, pero
negaron que se hubieran producido ya contactos. Se estima que la recaudación
del partido ascenderá a medio millón de pesos.
El líder se entrenó ayer por la mañana en el campo
principal del Nuevo Gasómetro para evitar el contacto con la prensa,
ya que habitualmente lo hace en la cancha auxiliar, a 150 metros de la
zona de los vestuarios. El entrenamiento fue muy liviano y consistió
en ejercicios con pelota y algunos movimientos tácticos. Hoy a
las 10 realizarán el último entrenamiento y luego quedarán
concentrados para el partido de mañana. Pellegrini ratificó
a los once que saldrán al campo: Saja, Serrizuela, Ameli, Coloccini,
Paredes, Tuzzio, Michelini, Erviti, Romagnoli, Estévez, Romeo.
“Voy a hablar con los jugadores –advirtió Pellegrini–
porque todos vamos a sentir la presión, y tendremos que recurrir
a la experiencia y la madurez para soportarlo. Hace muchos partidos que
venimos presionados por la necesidad de no perder.”
Esa ansiedad se vivió ayer en la Ciudad Deportiva, ya que miles
de aficionados hicieron cola delante de las boleterías, llegando
a formar una fila de hasta diez cuadras, por Varela, doblando por Fernández
de la Cruz hasta Perito Moreno. Cuando se anunció que las populares
se habían agotado, algunos hinchas insultaron al presidente de
San Lorenzo, Fernando Miele. El dirigente informó que en caso de
que el equipo logre el título, jugará un partido ante Central,
el próximo sábado, con cuya recaudación y derechos
de TV se pagará el premio prometido al plantel, de dos millones
de pesos.
En Santa Fe, el plantel de Unión se manifestó a favor de
la incentivación, pero aseguraron que no hubo ningún llamado
de parte de allegados a River para derrotar mañana a San Lorenzo.
“De todas maneras, no creo que llamen porque tienen muchos problemas
–dijo el capitán Ariel Donnet–. Se fue Gallego y tienen
jugadores expulsados, aunque igual no bajaron los brazos.” Pero el
entrenador de Unión, Nery Pumpido, manifestó que “la
incentivación no tiene nada que ver con jugar mejor”.
SIN
DELGADO, SIN GUiLLERMO, SIN BARIJHO
Bianchi remienda la delantera
Por F.M.
Se confirmó que el desgarro
sufrido por Guillermo Barros Schelotto ante el Palmeiras por la Copa Libertadores
le demandará al menos tres semanas de recuperación, con
lo que Carlos Bianchi tendrá que improvisar una nueva línea
de ataque para la revancha del próximo miércoles en Brasil.
Según el propio jugador, existe una remota posibilidad –si
es que Boca logra superar la semifinal– de que llegue en condiciones
al partido que correspondería a la segunda instancia de la final.
La lesión del mellizo se produjo cerca del final del primer tiempo
ante el Palmeiras (2-2), cuando recibió un fuerte cruce del brasileño
Alexandre. “Cuando choqué con él en la mitad de la
cancha, intenté correr la pierna, pero no pude, así que
me dio de lleno”, comentó Barros Schelotto. “Esto me
deja fuera de la otra semifinal, pero mi intención es llegar para
jugar el segundo partido de la final. Esperemos que Boca pueda ganar igual
y llegar a la final”, sostuvo.
El delantero se lamentó de que la lesión llegara cuando
estaba atravesando un buen momento futbolístico. “Este era
un momento en el que tenía una gran confianza para encarar, me
sentía muy fuerte, estaba llegando al gol, pero a veces la cantidad
de golpes sumados te llevan a las lesiones”, concluyó.
Sin Delgado ni Guillermo, sin el expulsado Antonio Barijho, Bianchi tendrá
ahora que improvisar una línea de ataque. Uno de los que estaría
seguro es el chaqueño Christian Giménez, el otro podría
ser o bien Fernando Pandolfi, quien no está rindiendo bien, o el
inexperto juvenil Roberto Colautti. Pero lo más probable es que
Bianchi decida jugar con un solo delantero –Giménez–
y sumar a Walter Gaitán en el medio, para que Juan Román
Riquelme pueda jugar más suelto y adelantado.
El plantel tuvo ayer el día libre y hoy volverá a entrenarse
en Casa Amarilla. Boca tiene previsto viajar a Brasil el lunes por la
tarde.
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