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Escándalo en el cierre de Instituto-Argentinos

Madorrán no les cobró un gol legítimo a los visitantes, los jugadores protestaron y el árbitro tuvo una reacción poco común, que derivó en forcejeos.

La policía cordobesa rodea
a jugadores y colaboradores
de Argentinos, tras el final
del partido.

En un partido que finalizó en un escándalo, Argentinos rescató un valioso empate 0-0 en Córdoba ante Instituto, y con sólo igualar el próximo sábado en la revancha mantendrá su lugar en primera división. Una vez terminado el encuentro se produjo un tumulto entre el árbitro Fabián Madorrán y los jugadores y cuerpo técnico de Argentinos, que protestaban por un gol legítimo que el juez no convalidó. Lo llamativo fue la reacción que tuvo el árbitro, que tras dar por finalizado el encuentro corrió más de cincuenta metros para increpar y expulsar al volante Mariano Herrón, situación que provocó bochornosos forcejeos entre los jugadores, Madorrán, sus colaboradores y la policía cordobesa.
Con su esquema tradicional, Argentinos estaba rescatando un resultado favorable de Alta Córdoba. Sin embargo, cuando ya se jugaba tiempo de descuento, Federico Insúa sacó un zurdazo que, luego de rebotar en el travesaño, picó dentro del arco de Klimowicz, sin que el árbitro Fabián Madorrán y el línea Darío García lo percibieran. Ahí se produjo la protesta de los jugadores visitantes, que derivó en un escándalo cuando Madorrán, una vez finalizado el encuentro, corrió cincuenta metros desencajado para mostrarle la tarjeta roja a Herrón. El arquero suplente de Argentinos, Marcelo Ojeda, intentó frenar al enfurecido árbitro, pero no logró su objetivo.
En ese momento se metió en la gresca el técnico Sergio Batista, quien tuvo que ser contenido por sus colaboradores para no atacar a Madorrán. Todo en medio de innumerables empujones, agarrones e insultos. Para colmo, la violencia se trasladó a la tribuna que ocuparon los hinchas de Argentinos, que fueron reprimidos por la policía.
Tras el encuentro, Batista remarcó que Madorrán perjudicó a su equipo, aunque aclaró que tal vez lo hizo sin intención. “Estoy con bronca, porque el árbitro, tal vez sin querer, nos perjudicó al anularnos dos goles que eran válidos”, remarcó el entrenador. Además del gol no cobrado a Insúa, a los ocho minutos del segundo tiempo, el juez anuló un tanto de Carlos Yaqué por una supuesta falta del delantero sobre Cristian Smigiel.
Para colmo, para la revancha no estarán Pena y Herrón, y aparentemente fue informado Monserrat. Claro que Argentinos tiene dos futbolistas en la Selección Sub-20, Ariel Seltzer y Nicolás Medina, por lo que podrá utilizar el artículo 225 para reemplazar a dos de los suspendidos. En tanto el árbitro se quejó por un golpe que recibió: “No individualicé a nadie, pero me pegaron una patada y un golpe en el codo, que me duele bastante. Por eso, me tuvieron que aplicar un sedante”, sostuvo Madorrán.

 


 

Quilmes venció a Belgrano

Quilmes consiguió un triunfo importante en su cancha ante Belgrano por la mínima diferencia, que le permite soñar con quebrar la racha y conseguir por fin el deseado ascenso que tanto se le viene negando. El gol lo conquistó Agustín Alayes de cabeza. En la primera etapa, Favio Schiavi había errado un penal.
De todas maneras, la ventaja no es holgada, teniendo en cuenta que con una victoria, por el resultado que fuera, el sábado en Córdoba, Belgrano conservará la categoría, sumiendo a Quilmes en una nueva frustración.
Algo de eso campeaba en el aire del estadio Centenario, cuando Brazenas concedió un penal dudoso sobre Domínguez, y Schiavi lo pateó muy alto, desperdiciando una oportunidad magnífica. Pero siempre el conjunto quilmeño fue superior a su rival, y la merecida ventaja llegó en el segundo tiempo, cuando Domínguez ejecutó un tiro libre desde la derecha y Alayes, elevándose en el área chica por encima de los zagueros, cabeceó abajo, señalando el único tanto.

 

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