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 La muerte del guitarrista de
Titàs, Marcelo Fromer, se sumó a la serie de accidentes
e incidentes que vienen diezmando en los últimos meses a varios
de los principales grupos de rock de Brasil. Las fatalidades y disputas
silenciaron temporalmente, y en algunos casos definitivamente, a bandas
con trayectoria internacional como Titàs, Paralamas do Sucesso,
Rappa y Raimundos. Fromer, quien murió el jueves tras tres días
de coma en un hospital, formaba parte de Titàs desde la fundación
del grupo, en 1982, y compuso junto con sus socios Tony Belloto y Arnaldo
Antunes éxitos de la banda como “Televisión”,
“Somnífera Isla” y “Nombres a los Bueyes”,
entre otros. La muerte del guitarrista, atropellado por un motociclista
el lunes, sorprendió a Titàs en momentos en que se preparaba
para comenzar a grabar la próxima semana en Río de Janeiro,
tras casi cinco años del último lanzamiento del grupo, Domingo.
Los integrantes del grupo aún no dieron pistas sobre si continuarán
con los planes de grabación, si buscarán un sustituto para
el guitarrista y fundador o si se disolverán. Lo mismo ocurre con
Paralamas, una de los grupos brasileños de rock con mayor éxito
en el exterior y cuyo líder, vocalista y compositor, Herbert Vianna,
sufrió en febrero un accidente de avión que lo dejó
paralítico y con graves secuelas. Los músicos del grupo
“O Rappa” también están inactivos desde noviembre
pasado, cuando su baterista y líder Marcelo Yuca, fue tiroteado
por asaltantes. Las balas dejaron paralítico al popular músico
de rap, y con dificultades para mover sus brazos. Un incidente —y
no un accidente— fue el que provocó la disolución de
Raimundos, anunciada el miércoles por el presidente de la grabadora
WEA-Brasil, Sergio Afonso. De acuerdo con el empresario, tres de los miembros
del grupo —Digao, Fred y Canisso— decidieron disolver la banda
nacida en Brasilia en 1993 luego de que el vocalista, Rodolfo, se convirtiera
a la religión evangélica y considerara la música
de Raimundos incompatible con su nueva fe. Desde su aparición en
el universo musical brasileño, Raimundos grabó seis discos
y vendió cerca de dos millones de unidades en Brasil y unas 500.000
en otros países de América Latina.
Las tragedias que tienen en luto al rock brasileño comenzaron en
1996, cuando un accidente de avión provocó la muerte a los
cinco integrantes de As Mamonas Assassinas, una festiva banda de adolescentes
con pocos años de vida, muchos éxitos en Brasil y que ya
comenzaba a ser conocida en el exterior. Un año después
fue el turno del cantor y compositor Chico Science, líder de un
movimiento musical conocido como Mangue bit, que combina la música
tecnológica y los instrumentos populares, y quien perdió
la vida en un accidente automovilístico.
Ahora, cuando los admiradores de Titàs apenas se reponen del golpe
sufrido con la muerte de Fromer, el juez de Río de Janeiro Luiz
Antonio Valiera do Nascimento decidió ahondar la herida causada
por el accidente de Herbert Vianna. Según una sentencia conocida
el jueves, el líder de Paralamas do Sucesso tendrá que responder
en un juicio por homicidio culposo (sin intención) como consecuencia
del accidente en el que murió su esposa, pese a los problemas físicos
y psicológicos que sufre. La periodista inglesa Lucy Needham murió
en el accidente que, de acuerdo con la justicia, fue responsabilidad del
músico. Al parecer el líder de Paralamas realizó
maniobras arriesgadas en el avión ultraligero en el que viajaba
acompañado de su esposa, y que cayó frente a una playa del
litoral sur de Río de Janeiro el 4 de febrero: el magistrado podría
incluso involucrar a Vianna en una violación del artículo
216 del Código Penal, por “atentar contra la seguridad del
transporte marítimo, fluvial o aéreo”.
La decisión del juez se conoció apenas una semana después
de que los otros dos integrantes de la banda anunciaran que había
comenzado a ensayar nuevamente con Vianna y que querían que la
música se convirtiera en una terapia de recuperación. “Herbert
mostró una capacidad increíble para recordar letras, acordes
y armonías de varios temas, que están intactas en su memoria”,
declararon Bi Ribeiro y Joao Barone. “No es necesario decir que nadie
puede sustituir a Herbert, y a ninguno se le pasó algo semejante
por la cabeza. Vamos a esperar el tiempo que sea necesario para volver
a tocar”, cerraron.
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