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 Su primera víctima fue
Federico Polak, a quien no le quedó más remedio que alejarse
del PAMI, cansado de sus presiones, casi públicas. La renuncia,
precedida por diálogos propios de un culebrón, sucedió
el viernes. El ministro de Salud, Héctor Lombardo, disfrutó
la victoria, oportuna, luego de su blooper cardiológico de hace
unas semanas. Y ahora parece querer ir por más, al menos eso sospechan
en el Frepaso, donde temen que la segunda víctima sea Héctor
Moguilevsky, secretario de Regulación y Políticas Sanitarias,
virtual viceministro de Salud.
Desde la Casa del Frente observan con atención los pasos de Lombardo,
quien tras su disputa con Polak podría pedirle la renuncia a Moguilevsky,
de origen frepasista. Los voceros frentistas creen que los últimos
movimientos de Lombardo responden a la pelea, algo disimulada, que mantiene
con su colega porteño, el radical alfonsinista Aldo Neri. Los hombres
del socio menor de la coalición están dispuestos a defender
a Moguilevsky, si el ministro decide pedirle la renuncia, y ya anunciaron
que se enfrentarán públicamente con el ministro si es necesario.
Las versiones sobre el conflicto entre Lombardo y uno de sus secretarios
surgieron el sábado a la tarde. Ese día, el ministro no
quiso aprobar un viaje que Moguilevsky tenía previsto hacer a Estados
Unidos para representar al país en la 128ª Sesión del
Comité Ejecutivo de la Organización Panamericana de la Salud
(OPS). Según los voceros del Frepaso, Moguilevsky habría
recibido una curiosa explicación de la negativa: “El ministro
no va a firmar el viaje porque vos sos amigo de Aldo Neri”, le habrían
dicho al hasta ahora secretario de Regulación y Políticas
Sanitarias.
El viaje de Moguilevsky a Estados Unidos incluía una serie de compromisos,
además del encuentro de la Organización Panamericana de
Salud. Tenía acordada una reunión en Washington con las
máximas autoridades de la Food and Drug Administration (FDA), con
quienes tenía pensado firmar un acuerdo que incluiría, además,
a Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología
Médica (Anmat) la entidad argentina que, como la FDA, certifica
la calidad de las comidas. Fuentes frepasistas informaron ayer que “lo
más importante del viaje era el objetivo de impulsar la candidatura
de una argentina como directora general de la OPS”. Se referían
a Mirta Roses, actual vicedirectora de esa organización.
Detrás de todos estos resquemores, de la desconfianza que reina
en torno a Lombardo, está la sorda batalla que mantiene con Neri.
La llegada del radical, hombre de confianza de Raúl Alfonsín,
se produjo por una decisión sorpresiva del jefe de gobierno Aníbal
Ibarra. Neri reemplazó a Marcos Buchbinder, un hombre de estrecha
confianza de Lombardo, quien ahora parece querer tomarse revancha a través
de Moguilevsky.
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