Hoy a partir del mediodía, en un hotel céntrico de Buenos Aires, la Confederación Sudamericana (Conmebol) se reunirá para definir el destino de la Copa América. Y se mantiene aún la incertidumbre sobre si se le arrebatará la sede a Colombia o no. Los colombianos no se resignan a perder la organización del evento, al igual que le sucediera con el Mundial ‘86 que finalmente se jugó en México. Ayer quemaron sus últimos cartuchos argumentales para tratar de retener la sede con una diplomacia de alto vuelo instrumentada por el propio primer mandatario Andrés Pastrana y distintas gestiones efectuadas por el presidente de la FCF, Alvaro Fina.
De todos modos, los dirigentes de las otras nueve asociaciones que forman parte de la CSF pidieron el cambio de sede, y algunos de ellos insisten en que “no hay posibilidad de retorno” a la posición adoptada en Asunción el pasado martes 5, cuando Colombia fue ratificada como organizadora. Así, esta semana, México y Uruguay fueron los primeros países en ofrecerse como alternativas para organizar la Copa, aunque posteriormente surgió el nombre de Brasil y la propuesta fue vista con buenos ojos por la mayoría de los directivos de la CSF. Los brasileños oficializarían tres ciudades de la zona sur (Curitiba, Porto Alegre y Florianópolis) como nueva sede.
Alvaro Fina llegó ayer a Buenos Aires y manifestó que quitarle la sede a su país sería como “darle un pasaporte a la violencia y al terrorismo”, al tiempo que se espera para hoy el arribo del “secuestrado” Mejía Campuzano. Según comentó ayer el vicepresidente de la Federación Colombiana, su captura se debió “a una equivocación y no porque se hubiera tenido en cuenta su condición de miembro del Comité Organizador y de la CSF” y que, por tal motivo, ahora espera que “se cambie la decisión”.
Asimismo, el presidente Pastrana, por medio de sus subalternos, se comunicó ayer con sus pares, cancilleres y dirigentes deportivos de la Argentina, Brasil, Ecuador, Perú, Chile, Uruguay, Venezuela y la CSF en pos de lograr apoyo a la “aspiración y el derecho” de Colombia de organizar el torneo. “Seguimos siendo optimistas de que se ratifique el derecho de Colombia, y esperamos a todos para iniciar la fiesta del fútbol”, señaló el presidente, quien el jueves había dicho que la suspensión suponía “una bofetada” y “el peor de los atentados” que se pueda cometer contra su país, sugiriendo además que su seleccionado no participe “por razones de dignidad” si se celebra en otra parte. Una eventual ausencia de Colombia expondría a ese país a una dura sanción, ya que la inasistencia a un campeonato sudamericano será multada con una suma de 50 mil dólares y la suspensión por dos años para participar en todas las competencias organizadas bajo la dirección o auspicio del organismo.
De todas maneras, esta posibilidad preocupa más a la Confederación que a los mismos colombianos, quienes consideran que nada puede ser peor que perder la sede de la Copa como perdieron hace quince años la organización de la Copa del Mundo. La pugna quedó planteada y recién hoy se develará el destino final del certamen continental, que por ahora lo único que mantiene es su fecha de realización, entre el 11 y 29 de julio.
Sin embargo, en caso de que se cambie de sede, también los nuevos organizadores pedirían una postergación de una semana para el inicio, lo que supondría un nuevo conflicto por la cesión de los jugadores para los distintos seleccionados.

PEKERMAN HARIA UN CAMBIO MAÑANA ANTE FRANCIA
El Chori Domínguez por Herrera

Alejandro Domínguez reemplazaría a Esteban Herrera en el partido que el Seleccionado Argentino Sub–20 jugará mañana ante Francia, en Vélez Sarsfield, por los cuartos de final del Campeonato Mundial de la categoría. En consecuencia, Lux; Burdisso, Coloccini y Colotto; Ponzio, Nicolás Medina y Seltzer; Maximiliano Rodríguez y Romagnoli; Saviola y Domínguez serían los once titulares para jugar con los franceses. Así, el delantero de Quilmes, que al principio de la competencia parecía relegado en la lucha por la titularidad, tendría su chance en la formación inicial.
En los cuatro partidos jugados hasta el momento, Esteban Herrera, delantero de Boca, no acompañó a Javier Saviola en un nivel acorde con las expectativas. De los dieciséis goles que convirtieron los argentinos, Herrera marcó dos –ante la débil Jamaica– y no tuvo un buen rendimiento en el balance de su juego. Precisamente, su reemplazante ante China, el Chori Domínguez, marcó el gol que significó la clasificación para cuartos y, además, en 28 minutos se desempeñó mejor, más ensamblado en la estructura colectiva del equipo.
Ayer, el plantel seleccionado realizó ejercicios tácticos tanto en defensa como en ataque, practicó jugadas con pelota detenida y ejecutó tiros desde el punto penal, pensando en la posibilidad de recurrir a esa modalidad, si no puede vencer a los franceses durante los noventa minutos.
El único jugador que no participó del trabajo de hoy fue el volante Maximiliano Rodríguez, quien sufrió un traumatismo en el pie derecho en el partido con los chinos. El cuerpo médico del Seleccionado dispuso que el volante de Newell’s se entrenara en forma diferenciada y luego informó que la evolución es “buena”, por lo que se descuenta que será titular ante Francia. Argentina retornará al trabajo hoy en horario matutino en Ezeiza sin tomar contacto con la prensa.

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