El espía entre nosotros

El domingo pasado, el monje negro de la caída fujicracia peruana, Vladimiro Montesinos, fue capturado en Caracas. Al día siguiente, fue trasladado a Lima, donde dijo que confesará todo, algo que inquieta a la clase política peruana y a las Fuerzas Armadas. Un incidente diplomático estalló entre Venezuela y Perú por dudas sobre la captura de Montesinos.

La República

De la caja negra que significa Montesinos capturado, saldrán verdades que pueden desestabilizar al país reencontrado con su democracia. No sabemos cuántos políticos y empresarios están temblando por las revelaciones que se anuncian. Tener controlada, como lo hizo Montesinos, la cosa pública es hablar de muchos nombres y dinero. El sismo podría adquirir características del tsunami que no llegó a darse en el sur. Lo que sí parece seguro es que las Fuerzas Armadas, de cuyo férreo control derivó su poder el asesor, serán aún más heridas y remecidas de lo que ya han sido. Nunca en su historia se vieron, como ahora, tan afectadas en su autoridad moral. Es ostensible que requieren de un esfuerzo nacional por su rehabilitación entendida como recuperación de legitimidad. (Editorial)

El Comercio

El proceso de transición democrática peruano y también la captura incruenta del siniestro ex asesor Vladimiro Montesinos empiezan a rendir frutos concretos en la mayor confianza que merece el Perú en el contexto internacional (...) Todo esto no es casualidad. En verdad hubiera sido imposible si el Perú no estuviese viviendo una nueva etapa, consecuencia de los duros sacrificios para derrocar un régimen autocrático y reconstituir las instituciones del Estado de derecho (...) Los peruanos hemos aprendido la lección de que el crecimiento económico está ligado a la estabilidad política y democrática. Debemos ahora consolidar, de modo optimista, la confianza en nuestra viabilidad democrática, que será así apreciada por el entorno internacional. (Editorial)

Expreso

Vladimiro Montesinos se debe estar riendo en su secuestro de la Base Naval de Callao de ser su criminal persona la manzana de la discordia que ha llevado a las relaciones bilaterales entre Venezuela y el Perú a una gravísima crisis en la historia de las dos repúblicas latinoamericanas. No será la primera ni la última que el ex asesor de inteligencia desate, preludio más bien de lo que sucederá en el frente interno cuando comience a revelar uno a uno a sus cómplices que todavía andan sueltos por ahí, si los “cívicos” lo dejan (...) Pero la buena vecindad peruano-venezolana debe estar muy por encima de un sujeto de la calaña de Montesinos. (Editorial)

Megacanje y contraataques

El gobierno colombiano quiso anunciar el megacanje de rehenes con la guerrilla de las FARC como un logro del proceso de paz. Pero la principal guerrilla colombiana anunció que extenderá la lucha armada a las ciudades y atacó una base militar en el sur. Los países sudamericanos acordaron postergar la realización de la Copa América en Colombia, que debía comenzar la semana que viene.

Cambio

Todo esto es medio esquizofrénico. Revisemos cómo han pasado las cosas. Cuando el proceso de paz arrancó, el gobierno luchó durante un año para establecer una agenda temática y lo consiguió, pero luego fue incapaz de lograr que la mesa avanzara en su estudio. Entretanto, Marulanda insistió en el tema del canje y el gobierno le dio alas al asunto con la convicción de que, a cambio, eso permitiría trabajar en la agenda. Al final, y para variar, ganó Tirofijo: hubo canje y no avances en la agenda. Es decir, las FARC encontraron un camino publicitario para salir del lío que tenían con cientos de uniformados secuestrados, pero en el proceso como tal no hubo avance. La agenda sigue virgen. (Mauricio Vargas)

El Espectador

En los últimos acontecimientos, desde nuestra frustrada Copa América hasta el intercambio humanitario, pasando por la ya legendaria imagen del primer mandatario a la espera de que “el guerrillero más antiguo del mundo” se sentara con él a darles la largada a los diálogos de paz, las FARC se han encargado de recordarle al poder que ellas son un Ejército revolucionario, que quieren las riendas del Estado, por las buenas o por las malas, con mesas de negociación o sin ellas, financiadas por la droga o por lo que sea, no importa, hay un objetivo, y su manera de hacer política está marcada por la contundencia de las armas en el acercamiento a influir en las grandes decisiones. Una de ellas: el presidente que nos tocó en suerte. (Sergio Otálora Montenegro)

El Tiempo

Hay algo que no tiene discusión: un torneo internacional de fútbol es, de lejos, el evento orbital por excelencia para promocionar un país, con su cultura, economía, turismo, orgullo patrio y todo lo demás incluido. Tanto es así que para el próximo, Japón, gran superpotencia, tuvo que conformarse con media Copa, o sea una Copa rota, partida por la mitad con Corea del Sur (...) ¿Acaso en 1982 no existía la ETA en España y en 1978 el dictador Videla no estaba entretenido desapareciendo a más de 30.000 jóvenes, lo que dio origen a las Madres de Plaza de Mayo? Pero hicieron su Mundial y nunca nos dimos cuenta de que la cosa estaba tan peligrosa por esos lares. Amanecerá y ojalá brindemos. (José Blackburn)

Dictador por 1280 millones

Con la colaboración del gobierno de Serbia, el ex presidente yugoslavo Slobodan Milosevic fue extraditado al Tribunal Internacional de La Haya, acusado de crímenes de guerra en Bosnia y en Kosovo. La decisión serbia generó una crisis de poder en el interior y Yugoslavia, compuesta por Serbia y Montenegro, pero desbloqueó 1280 millones de dólares de ayuda al país.

The New York Times

Con Milosevic en La Haya, los serbios estarán tentados de ver un Tribunal de La Haya claramente sesgado, ya que Franjo Tudjman, el ex presidente croata recientemente fallecido, nunca enfrentó acusaciones formales, aunque era claramente culpable de crímenes de guerra en Bosnia. Así que los gobiernos occidentales necesitan mejorar la credibilidad del Tribunal Internacional. Tienen que ejercer las presiones que sean necesarias para asegurarse de que el juicio contra Milosevic sea transmitido en la radio y la televisión serbia. (...) Serbia apenas está comenzando a admitir su historia; sus mitos, tanto los moribundos como los perdurables, deben ser destruidos. (Peter Maass, periodista que cubrió la guerra de Bosnia)

Le Monde

Milosevic no fue extraditado el jueves a La Haya por la sola fuerza del derecho y la moral. El dinero jugó su papel. El primer ministro serbio, Zoran Djindjic, resolvió entregar a Milosevic al Tribunal Internacional porque Estados Unidos amenazó con suspender la ayuda económica que necesita urgentemente. Y peor aún si se tiene en cuenta que Djindjic tuvo que violar reglas del derecho interno serbio para lograrlo (...) El hombre de Belgrado ha martirizado a sus vecinos. Pero también es la causa de la desdicha serbia. De guerra en guerra, quien prometió a los serbios la preponderancia dentro de la ex Yugoslavia, les dejó el territorio más pequeño que hayan tenido en su historia, arruinando además su economía. (Editorial)

Il manifesto

Por cierto, el mundo se ve de una manera muy diferente desde La Haya que desde Belgrado. Querría esperar que el jueves ya se haya escrito el último acto de la tragedia balcánica. Y que al menos el tribunal de La Haya considere a Slobodan Milosevic único culpable de todo. Sería demasiado simple, e demasiado barato. El país que Slobo deja a sus espaldas, martirizado, reducido a la miseria, que acaso ya no tiene la fuerza de reaccionar, no es sólo la creación de su líder de una década. También Occidente tiene sus culpas. Espero que el mundo globalizado sienta en algún momento el sentimiento de responsabilidad que ahora siente el pueblo serbio. (Dunja Badnejvic)

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