Por
David Cufré
En
la pelea con los gobernadores justicialistas, el Gobierno hizo ayer una
concesión y planteó una exigencia. Lo primero fue que saldó
una parte de la deuda con las provincias, al girarles 63 millones de pesos.
Lo segundo, lo que más le interesaba a Domingo Cavallo, fue anticipar
que si quieren mantener abierta la canilla de financiamiento de la Nación,
deberán comprometerse a un riguroso programa de ajuste fiscal.
Hoy el Gobierno no consigue financiamiento para sostener el gasto
público presupuestado, alertó anoche el ministro de
Economía, en una confesión que puede poner nerviosos tanto
a los gobernadores como a los mercados. De hecho, Cavallo se apropió
del discurso del establishment financiero para exigir a las administraciones
del interior que acomoden sus cuentas. Pero para no tensar más
la cuerda, al mismo tiempo comunicó que la Nación pagó
a las provincias lo que les adeudaba de los programas sociales.
Después de pelearse con los gobernadores justicialistas durante
una semana, el Gobierno decidió hacer su propia movida. En parte,
esa decisión se fundamentó en que los gobernadores se negaron
a reunirse ayer con Fernando de la Rúa, Chrystian Colombo, Ramón
Mestre y Cavallo. Y seguían amenazando con no reunirse tampoco
hoy porque la Nación no les aseguraba cuándo se pondría
al día con la deuda. Por tanto, las máximas autoridades
del Poder Ejecutivo hicieron la reunión sólo con gobernadores
aliancistas o de partidos provinciales (ver recuadro aparte). Colombo
y Cavallo aprovecharon la conferencia de prensa posterior para enviarles
un mensaje a los hombres del PJ. No compartimos su decisión
de no dialogar con el Gobierno, arrancó el jefe de Gabinete.
Y luego subrayó que a partir de mañana (por hoy),
cada provincia irá al Ministerio de Economía a analizar
su caso particular.
De ese modo, Colombo dio por cerrado el capítulo de las negociaciones
en bloque entre el Gobierno y las provincias, y abrió otro en el
que cada gobernador deberá ir a plantear su caso ante un subsecretario
de Estado de Economía. Pero Colombo comprendió la dureza
de una respuesta semejante, y tendió un puente para retomar las
negociaciones al decir que siempre estamos dispuestos al diálogo.
La intención del Gobierno fue mostrar que en esta discusión
no son los gobernadores los que tienen la sartén por el mango,
por más confrontativos que éstos puedan parecer. Pero tampoco
le conviene profundizar la ruptura. En primer lugar, porque el Gobierno
no está pasando precisamente por su momento de mayor fortaleza.
Y en segundo término, porque la disputa con las provincias influyó
en la disparada del riesgo país.
En función de este último análisis, Cavallo anunció
que ayer mismo se giraron a todas las provincias, incluidas las
justicialistas 63 millones de pesos, correspondientes a las partidas
para atender el gasto social. El ministro destacó que con
esto se cumplió con el cien por cien de lo que la Nación
debía pagar en el primer semestre por el gasto social. Se
pagó con un día de demora -ironizó-, porque correspondía
hacerlo el viernes que fue cuando terminó el semestre. Por
otra parte, Cavallo dijo que la deuda de 178 millones de pesos que la
Nación tiene con las provincias desde 1999, por partidas del Fonavi
nunca giradas, ahora se saldará con bonos.
Finalmente, presentó su propio balance del stock de deudas que
la Nación y las provincias se reclaman mutuamente. De acuerdo a
su cálculo, la Nación le exige a los distritos del interior
331 millones de pesos, mientras que reconoce deudas con éstos por
317 millones.
Los gobernadores de La Pampa, Rubén Marín; Jujuy, Eduardo
Fellner, y Formosa, Gildo Insfrán, manifestaron ayer antes
de las palabras de Cavallo y Colombo que no se reunirían
con el Gobierno hasta tanto tuvieran una fecha concreta de cobro. Y remarcaron
que los incumplimientos de la Nación ponían en duda el pago
de sueldos y aguinaldos en varias provincias. Sin embargo, ahora que el
Ejecutivo les giró parte del dinero, habrá que ver si cambian
de actitud para sentarse a discutir sobre la otra parte de la deuda: 310
millones de pesos del Fondo Fiduciario, quenecesitan para cubrir vencimientos
de deuda. Frente a la postura más intransigente de las provincias
chicas, Carlos Ruckauf, Carlos Reutemann y José Manuel
de la Sota siempre estuvieron dispuestos a sentarse a hablar con el Gobierno.
Y hoy lo plantearán en una reunión en el Consejo Federal
de Inversiones, que comenzará a las 11 de la mañana.
Pero mientras los gobernadores justicialistas deciden qué hacer,
Cavallo ayer les reclamó que profundicen el ajuste fiscal, para
que tanto la Nación como las provincias puedan recuperar la confianza
del mercado financiero y obtener financiamiento. Hoy no conseguimos
financiamiento para sostener el gasto público que hemos presupuestado
y tenemos que ver cómo hacemos para reducir en donde haya un gasto
superfluo, enfatizó. El ministro parece haber escuchado la
demanda del establishment financiero, que quiere que se profundice el
recorte de gastos para asegurar que habrá fondos para repagar los
servicios de la deuda.
Los
del palo también piden
Confirmado
el faltazo de los justicialistas, el Gobierno tuvo que conformarse
con reunirse ayer con los mandatarios de los diez distritos que maneja
la Alianza. A similitud de problemas, los pedidos de los gobernadores
del oficialismo no variaron en mucho a los que vienen ventilando en
público los justicialistas. Básicamente, reclamaron
que el Ejecutivo cumpla con el envío de los recursos prometidos
porque en varios distritos tienen problemas con el pago de sueldos
y aguinaldo. Domingo Cavallo les confirmó el pago de parte
de la deuda y diferenció entre las provincias que venían
haciendo un esfuerzo por reducir el gasto público a la
mayoría de las aliancistas las ubicó en este casillero
y las que no. Sería injusto poner a todas las provincias
en la misma situación, dijo el ministro. Como respuesta,
los gobernadores de la Alianza le plantearon que el gobierno no tenga
preferencias por los distritos opositores concretamente mencionaron
a Buenos Aires al momento de enviar recursos, y que se mantenga
un trato igualitario. |
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