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El Frepaso otra vez con un pie afuera del plato

Alessandro tuvo una durísima discusión con Cavallo en la Casa Rosada cuando el ministro les comunicó las medidas a los diputados. Hoy se reunirán los miembros del Frente para definir si siguen o se van del Gobierno.

El jefe de la bancada aliancista Darío Alessandro se plantó ante Cavallo. Los gritos se hicieron escuchar.

Por Romina Calderaro

“¡En una discusión se exponen argumentos, no se grita!”, se plantó Darío Alessandro en plena reunión cuando se cansó del tono con el que el ministro de Economía, Domingo Cavallo, acusaba de no entender nada a los diputados de la Alianza que cuestionaban el nuevo ajuste. “Cualquier otra medida hubiera sido más recesiva”, machacaba Cavallo. “Nos bancamos muchas cosas, pero ésta no. Es hora de afectar los intereses de los que más tienen”, dijo el jefe del bloque de diputados de la Alianza. “Creo que éste es el final, han decidido crear un polo de centroderecha y en mi opinión es hora de que el Frepaso vuelva a tributar al progresismo. Hicimos lo que pudimos”, dijo a Página/12 un diputado que participó de la reunión en la que Cavallo informó su nuevo paquete. Hoy al mediodía, el bloque de diputados del Frepaso se reunirá para definir su futuro dentro de la coalición, debate que protagonizarán los principales referentes de la fuerza que en algún momento lideró Carlos “Chacho” Alvarez, quien no tiene intenciones por ahora de volver al “día a día” de la política.
La reunión entre los diputados de la Alianza y Domingo Cavallo no fue precisamente cordial. Cavallo les explicó en la Casa Rosada exactamente lo mismo que hizo horas más tarde en conferencia de prensa, y Alessandro le respondió que el nuevo ajuste sólo generaría más recesión. El frepasista incluso fue más allá y planteó una alternativa: por qué no gravar a los sectores de altos ingresos, por caso el petrolero, en virtud de la gran renta que acumularon. “De ninguna manera”, respondió Cavallo, “algo así jamás ocurrirá mientras yo sea el ministro de Economía porque eso significaría cambiar las reglas de juego”.
Alessandro fue directo: el Frepaso no acompañará estas medidas. Lo que todavía no queda claro es el alcance exacto de esa declaración. Las opiniones ayer estaban divididas. Estaban los que planteaban “hasta aquí llegamos” y los que no se animaban a pronosticar, en este contexto, un alejamiento definitivo de la fuerza. “Qué sé yo, está Juampi (Cafiero ministro de Desarrollo Social) trabajando bien en el gobierno, Adriana Puiggrós (secretaria de Ciencia y Tecnología) haciendo lo suyo. No es tan fácil decir nos vamos mañana”, reflexionaban otros. “El caso de Aníbal Ibarra es distinto porque él en la ciudad sí mantuvo la Alianza”, pensó en voz alta una fuente.
En tiendas de Ibarra dividían en dos el planteo. “Lo primero que hay que decir es que a la Ciudad no entrará el ajuste porque la ciudad se financia con sus propios recursos”, dijo a este diario un estrecho colaborador de Ibarra. Y agregó que “no van a contar con el apoyo de Ibarra para ajustar a los sectores de menos recursos”. Trascendió también que Juampi Cafiero -quien no terminó de creerle al ministro de Economía que no recortará los planes sociales– dijo ayer en una reunión que si el partido decide orgánicamente dejar el gobierno, él no opondría resistencia. En el caso hipotético de que eso ocurriera, el gobierno de la Alianza perdería a un funcionario que, reconocen propios y ajenos, está trabajando bien en un contexto por demás desfavorable. Cabe recordar que su viaje a General Mosconi en pleno conflicto con los piqueteros –viaje que nadie le ordenó- fue el principio de la solución del conflicto.
Cuando se reúnan, los hombres y mujeres del Frepaso no sólo plantarán la bandera de su disconformidad con el ajuste: quieren también exponer los proyectos alternativos que, según dijo Alessandro, se vienen trabajando en el Congreso desde hace rato.
“Lo intentamos, lo intentamos de muy buena fe. A veces, demasiada. Pero el gobierno ha elegido tomar otro camino y hay que dar el debate institucional. Creo que éste es el final, que deberíamos volver a tributar al progresismo”, dijo a este diario un diputado del Frepaso que supo saborear otros sapos en aras de comprometer al Frepaso con la acción de gobierno y que ahora cree haber encontrado su límite.
¿Y Carlos “Chacho” Alvarez? En las últimas semanas el fundador del Frepaso volvió a atenderles el teléfono a sus operadores, pero siguediciendo que está muy lejos de volver a ocuparse de la coyuntura o, en otras palabras, del día a día. “Pero el Frente está unido en este tema. Todos estamos contra este paquete”, dijo un hombre que logró hablar con el ex vicepresidente en los últimos días.
Algunos diputados comentaron que Cavallo quería ir más lejos aún de sus anuncios: en un principio, había hablado de recortar planes sociales y de bajar todas las jubilaciones, incluidas las mínimas. Y que la reacción adversa del Frepaso y el radicalismo lo habría hecho retroceder en esos puntos. Otros no fueron tan optimistas: “nos dijo eso para que pensemos que habíamos logrado algo, pero Cavallo tenía todo cocinado”.

 

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