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Aníbal Ibarra decidió crear un registro único para los beneficiarios de programas sociales en la ciudad. Quieren optimizar la asistencia y transparentar los mecanismos de ayuda.

Con la intención de transparentar los mecanismos de asistencia social en la ciudad y optimizar la ayuda que reciben los sectores necesitados, el gobierno porteño anunciará la semana próxima la creación de un Registro Unico de Beneficiarios de Programas Sociales, destinado a centralizar la información sobre los destinatarios y, a la vez, evaluar la eficacia de los programas en marcha. El anuncio lo hará Aníbal Ibarra, en un acto al que están invitados el arzobispo de Buenos Aires, Jorge Bergoglio, y el ministro de Desarrollo Social, Juan Pablo Cafiero, quien piensa implementar un mecanismo similar en su cartera.
“El gobierno porteño destina 100 millones de pesos anuales a asistencia social, sin contar los gastos en personal. El propósito no es ahorrar recursos sino optimizarlos, para que no haya gente que se quede sin ayuda mientras otros reciben asistencia de dos o más programas”, explicó a Página/12 la vicejefa de Gabinete, Liliana Chiernajowsky.
El registro consistirá en un sistema informatizado donde deberán volcarse todos los datos de las personas que reciben asistencia y de su grupo familiar, incluidos el nivel educativo, la cobertura de salud y el tipo de vivienda en que vive. El registro deberá estar completo para el 1º de abril del año próximo.
“Tendremos entonces un mejor mapeo de la situación social de la ciudad, para saber a quién estamos llegando con la asistencia y quienes quedan afuera”, agregó la funcionaria. El registro incluirá información de los programas de las secretarías de Promoción Social (que concentra la mayor parte de la asistencia), Educación (becas y comedores), Desarrollo Económico (programas de empleo), Seguridad (Planes Trabajar para la prevención del delito), Salud (programa materno infantil) y la Comisión Municipal de la Vivienda.
El registro, que será creado por decreto, estará gestionado por una Unidad Ejecutora, coordinada por la vicejefa de Gabinete e integrada por representantes de las secretarías involucradas. Esa unidad tendrá la misión de evaluar y hacer un seguimiento de los programas en curso así como proponer la creación de otros nuevos para satisfacer las demandas.
La información del registro será pública. “Queremos una absoluta transparencia en el manejo de los planes, para evitar situaciones como las ocurridas con los Nuevos Roles Laborales (que se otorgaron a dirigentes de Franja Morada)”, dijo Chiernajowsky.
“También se apunta a terminar con posibles manejos de clientelismo”, agregó la funcionaria, en referencia a los 220 comedores comunitarios que reciben subsidios oficiales, y cuyos beneficiarios no están registrados oficialmente. “De aquí en más, los comedores deberán censar a las personas a las que asisten”, precisó.
El lanzamiento del registro se hará en un acto, al que fue invitado el cardenal Bergoglio: la Iglesia Católica tiene una amplia participación en la asistencia social, a través de Cáritas. También estarán presentes Luis Moreno Ocampo, en representación de Transparencia Internacional, representantes de la agrupación Conciencia, y el ministro Cafiero, que aspira a extender esta experiencia al ámbito de su cartera.

 

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