Principal RADAR NO Turismo Libros Futuro CASH Sátira


QUE OPERACIONES EN CAJA DE AHORRO QUEDARAN EXENTAS
Cómo será el nuevo impuesto

El subsecretario de Ingresos Públicos, José María Farré, explicó, caso por caso, cuál será el alcance del impuesto a las cajas de ahorro. Cavallo dice que no quiere gravar a las familias, pero existen dudas.

Subsecretario de Ingresos Públicos, José María Farré. El mentor de los impuestos de Cavallo.

El Ministerio de Economía salió a aclarar ayer cuál será el alcance de la extensión a las cajas de ahorro del impuesto a las Transacciones Financieras. “Sólo se gravarán aquellas transacciones que se detecten como mecanismos de evasión de movimientos que antes se hacían en cuentas corrientes”, se dijo mediante un comunicado. Y el subsecretario de Ingresos Públicos, José María Farré, se encargó en conferencia de prensa de comentar, caso por caso, qué operaciones en caja de ahorro deberán pagar y cuáles no. Sin embargo, más allá de la “predisposición” que muestra Economía de no gravar a las familias con el nuevo impuesto, existen dudas sobre que ello no vaya a suceder en la práctica.
De acuerdo con el proyecto de ley que el Gobierno envió al Congreso, el impuesto con una tasa máxima de 6 por mil (0,6 por ciento) se aplicará sobre “los créditos y débitos efectuados en cuentas –cualquiera sea su naturaleza– abierta en las entidades regidas por la Ley de Entidades Financieras”. Esto significa que se busca extender el impuesto que hasta ahora regía para las cuentas corrientes –con una tasa del 0,4 por ciento que Cavallo anunció se llevará al 0,6 por ciento– a las cajas de ahorro.
La norma también plantea que, además, también serían base imponible “todas las operatorias que efectúan las entidades mencionadas... incluso a través de movimiento en efectivo”.
Según el proyecto, sólo estarán exentos del gravamen “los créditos en cajas de ahorro o cuentas corrientes bancarias hasta la suma acreditada en concepto de sueldos del personal en relación de dependencia o de jubilaciones y pensiones, y los débitos en dichas cuentas hasta el mismo importe.
Farré explicó los diversos casos que también estarían exentos o que, por lo menos, Economía se compromete expresamente no gravar cuando se reglamente la ley para no perjudicar a las familias que utilizan las cajas de ahorro como reserva, precisamente, de sus ahorros. Son los siguientes:
El salario, para el caso de los trabajadores en relación de dependencia, como ya se dijo, cuando sea depositado en la caja de ahorro. Y el trabajador podrá extraer hasta dicho monto de la caja sin pagar el impuesto. Farré aclaró ayer que si el sueldo no se gasta a la largo del mes, entonces se irá acumulando a la largo del año y por lo tanto también se elevará, por el mismo monto, el límite de débitos sin gravamen.
Si una persona tenía acumulados fondos en su caja de ahorro hasta se entrar en vigencia el nuevo impuesto, entonces podrá realizar en el futuro todos los débitos necesarios hasta agotar ese stock de ahorro sin gravamen alguno. Según Farré, los bancos tendrán la capacidad de identificar el saldo acumulado y luego excluir de la base imponible todos los retiros hasta dicho saldo.
Cualquier traspaso de fondos de plazos fijos a caja de ahorro, y viceversa, no estará gravado siempre que se realicen dentro del mismo banco. Tampoco se gravará con el impuesto ninguna acreditación por interés o capital de bonos o títulos en cajas de ahorro.
Según el comunicado que emitió Economía por la tarde, también estarán exentas “las extracciones habituales que las personas hagan en efectivo de sus cajas de ahorro”. Sin embargo, tal como aclaró Farré después, esto será así hasta el monto del salario.
En cambio, en el caso de los monotributistas deberán pagar por dichas extracciones –así como también por todos los débitos automáticos de servicios públicos, tarjeta de crédito, etc.– una tasa del 0,25 por ciento. En el caso de los trabajadores autónomos, en tanto, deberán pagar la tasa será del 0,6 por ciento, pero, supuestamente, en el futuro podría descontarlo como un pago a cuenta de IVA o Ganancias.
Si un trabajador autónomo o un monotributista cobrara por sus servicios en efectivo, y luego decidiera pagar cash su tarjeta de crédito –según prometió Farré– no estará alcanzado por el impuesto.

 


 

PANORAMA NEGRO PARA EL FUTURO
Desocupación eterna

De acuerdo a un relevamiento efectuado por la UCES (Universidad de Ciencias Sociales y Empresariales), apenas el 7,8 por ciento de las empresas del área metropolitana (Capital y Gran Buenos Aires) prevé crear puestos de trabajo en la segunda mitad del año, contra el 22,7 por ciento que planea un recorte de personal y el 69,5 por ciento que no espera cambios en su dotación.
Cavallo anunció ayer que hoy serían dados a conocer los nuevos índices de desocupación, correspondientes a la encuesta de mayo pasado. Sin embargo, el cronograma del Indec prevé tal difusión para mañana. Sea como fuere, como adelantó Página/12, la tasa de desempleo de todo el país se ubicaría entre el 16,5 y 16,7 por ciento, sensiblemente por encima de octubre, cuando fue del 14,7 por ciento. En tanto, en el Gran Buenos Aires, las desocupación superaría el 17 por ciento.
De acuerdo al informe de la UCES, “el pesimismo de las empresas para lo que resta del año se refleja también en que sólo el 18,4 por ciento estima que la situación económica será mejor en los próximos seis meses, mientras que el 31,2 por ciento prevé que las condiciones económicas serán peores”.
Consultados por cuándo empezaría la tan ansiada reactivación, apenas el 16,3 por ciento de los empresarios estima que comenzará antes de fines de este año, como aseguró el ministro Domingo Cavallo, mientras que el 31,2 por ciento apuesta a que se iniciará en el primer semestre del 2002 y un nada despreciable 19,8 por ciento asegura que no habrá recuperación hasta la segunda mitad del año próximo.

 

PRINCIPAL