Las diferencias entre el director
técnico de River, Ramón Díaz, y algunos directivos
del club se siguen incrementando. En este caso, el conflicto reapareció
ayer por la demorada incorporación del delantero de La Coruña,
José Turu Flores, quien es uno de los elegidos por
el entrenador para sumarse al plantel. Cuando parecía que la transferencia
podía concretarse ayer, ahora aparecieron distintas trabas. En
consecuencia, Díaz acusó a la dirigencia de no cumplir con
lo pactado, respecto de la llegada del ex jugador de Vélez.
Luego del entrenamiento matutino en el estadio Monumental, muy molesto,
Díaz indicó: Habíamos quedado en algo con los
dirigentes y no cumplieron. Me parece que hay falta de voluntad, y no
es correcto que la Comisión Directiva se oponga a la llegada del
Turu Flores.
Pero fiel a su estilo, Díaz fue más allá: Hubo
entre seis y siete reuniones y todos estaban de acuerdo. Hablé
con Flores, y los dirigentes de La Coruña bajaron de un millón
de dólares a 550 mil y ahora pasa esto. Y agregó:
La gente de (José María) Aguilar y (Hugo) Santilli
los dos candidatos a la presidencia de River en las elecciones de
fin de año estaban de acuerdo y ahora no. Me parece que no
pasa por lo económico. Por primera vez desde su llegada,
Díaz puso en el tapete el clima político del club.
Los dirigentes de La Coruña, dueño del pase del jugador,
enviaron el lunes pasado un fax en el que pusieron como condición
para concretar el pase, a préstamo por un año, que River
pague los 550 mil dólares en efectivo. Las autoridades de River
debían responder ayer a la una del mediodía (seis de la
tarde en España), si aceptaban cumplir con esa forma de pago. Pero
habría una fuerte oposición en relación a este punto,
y la Comisión Directiva tiene dudas para aprobar la incorporación.
El total de la transacción (préstamo, prima, sueldos, premios
y traslado domiciliario) estaría cerca de 1.600.000 dólares,
cifra que para muchos directivos es muy elevada. Flores ganaría
550 mil dólares de prima, siete mil de sueldo mensual, un premio
de 130 mil dólares, y la misma suma por el traslado domiciliario.
En el último caso, la intención de River es bajar esos gastos,
y además que haya consenso en el seno de la Comisión.
Quedamos en traer jugadores a préstamo y no llegan. Necesitamos
sí o sí un delantero, reiteró una vez más
ayer el técnico. Hasta ahora sólo se sumaron Angel Comizzo,
Esteban Cambiasso, el chileno Alejandro Escalona -que ayer cumplió
la revisión médica y el marcador central Fernando
Spinelli. Y se despidió con promesa de bomba: Lo que dije
hoy fue livianito, porque hay mucho más.
Circuló el nombre del delantero Esteban Fuertes, quien está
en el Lens de Francia. Además, también tiene alguna posibilidad
Diego Klimowicz (Lanús). Ayer trascendió que el volante
Raúl Cascini (Toulouse) estaría cerca de llegar a Núñez,
y que River podría comprar el 20 por ciento del pase de Matías
Lequi (Central). Por ello, la reunión de Comisión Directiva
de mañana será fundamental para aprobar o no la llegada
de Flores. Y además, para tratar de calmar el ánimo del
riojano.
�No
hay pelea con Cardetti�
Luego del empate ante Palmeiras,
el último domingo por la Copa Mercosur, el autor del segundo tanto,
Martín Cardetti, corrió hacia el banco de suplentes para
festejar con su compañero Leonardo Astrada. En ese encuentro, el
primero fue suplente y Astrada fue reemplazado. Precisamente, ambos son
los jugadores que estuvieron distanciados del técnico Ramón
Díaz, en su etapa anterior en el club. Pero en la tarde de ayer,
el entrenador aclaró que no está ni enojado ni peleado
con Cardetti. Tiene las mismas oportunidades que todos. No existe ningún
problema con él. Los conflictos los inventan los periodistas. Si
el otro día no jugó ante Palmeiras fue por una cuestión
táctica.
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