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Por Santiago Rodríguez
 Carlos Ruckauf pensaba hasta
no hace mucho que la gobernación de Buenos Aires sería el
trampolín desde el que saltaría a la Presidencia; estaba
seguro de que él sí podría romper el maleficio que
–dicen– ha impedido hasta ahora el ingreso triunfal de un mandatario
bonaerense a la Casa Rosada. Pero la crisis en que está sumida
la provincia y los problemas que tiene por delante amenazan con fagocitarse
definitivamente su sueño presidencial y parecen confirmar la profecía
que los funcionarios nacionales repetían hace unos meses: “Ruckauf
quiere adelantar la sucesión de Fernando de la Rúa porque
no llega al 2003 sin que la provincia le estalle”. El conflicto en
Buenos Aires ha adquirido una dimensión tal que el camionero Hugo
Moyano –aliado suyo hasta no hace mucho– se dio el lujo de comparar
al gobernador con el paracaidista francés que quedó enganchado
de la Estatua de la Libertad. “Ruckauf viene en picada, viene como
este tipo que quedó colgado en la Estatua de la Libertad. Y si
la estatua no lo sostiene, se cae al mar”, ironizó el líder
de la CGT rebelde.
Veamos cuáles son los 10 mayores tormentos de gobernador:
1 Cesación de pagos: La provincia no tiene fondos para cumplir
con sus obligaciones y por eso Ruckauf echó mano a la rebaja de
salarios y la emisión de patacones. El gobernador sostiene que
la razón de todos los males es la falta de financiamiento internacional
que dejó a la provincia sin posibilidades de acceder al crédito
que hacía posible el pago de los salarios de los empleados públicos
y el funcionamiento del Estado provincial. También atribuye la
crisis en el distrito a la demora y el incumplimiento en la remisión
de los fondos de la coparticipación por parte de la administración
central. Jamás mencionó –hasta ahora– la herencia
recibida.
2 Patacones: Ruckauf pelea contra viento y marea para garantizar
la paridad entre el bono y el peso y para que sea aceptado como medio
de pago en todas las operaciones. El arranque fue errático: en
los cajeros no hubo patacones suficientes, faltaron bonos de baja denominación
para dar vueltos y muchos comercios no los aceptan o sólo los reciben
por una parte de la compra. Para el clásico platense de mañana
entre Estudiantes y Gimnasia, por ejemplo, las entradas no se podrán
pagar en bonos porque los clubes dicen que el operativo de prevención
es costoso y la policía no toma patacones. Es posible que la decisión
de los bancos privados de aceptarlos mejore la situación.
3 Docentes: Los chicos no tiene clases desde antes de las vacaciones
porque los maestros no retornaron a las aulas tras la finalización
del receso invernal, hace tres semanas. Los gremios docentes anunciaron
que el lunes tampoco habrá clases porque recién entonces
decidirán si levantan o no la medida de fuerza. Desde que se desató
el conflicto, los sindicatos rechazaron los términos de la conciliación
obligatoria a la que apostó el gobierno provincial para ponerle
punto final y la declaración de ilegalidad de la huelga, la última
medida que tomó Ruckauf para tratar de quebrar el frente docente.
Hay zonas donde los fondos a los comedores no llegan desde hace dos meses
y también atrasos en el pago de las becas escolares.
4 Judiciales: Los empleados de los tribunales bonaerenses también
ratificaron la continuidad de las medidas de fuerza. La paralización
del sistema judicial ha llegado a tal punto que el Colegio de Abogados
de La Plata reclamó ayer a la Suprema Corte de Justicia que adopte
medidas para asegurar “garantías mínimas” para
la impartición de justicia, pero los que están en pie de
guerra son los propios jueces: la entidad que los agrupa advirtió
que el pago en patacones afectará su “independencia funcional”.
El juez de San Isidro Fernando Maroto –el primero en presentar un
amparo contra el pago en bonos– denunció ahora penalmente
al gobernador pordesobediencia, malversación de caudales públicos
y violación de los deberes de funcionario público a raíz
de la crisis.
5 Estatales: Los trabajadores públicos están que
trinan contra el ajuste. De hecho, la multitudinaria marcha que el jueves
último tuvo por destino la sede de la Gobernación en La
Plata no sólo se nutrió de docentes y judiciales, sino también
de empleados de diversas reparticiones públicas. Los trabajadores
de la salud sostienen que los recortes impuestos por Ruckauf han dejado
al sistema hospitalario “al borde del colapso”. El titular de
ese gremio denunció que faltan drogas oncológicas y advirtió
que lo peor está todavía por venir. El temor es que “cuando
llegue el tercer cuatrimestre los proveedores no se presenten a las licitaciones,
sabiendo por anticipado que no les van a pagar por sus servicios”.
6 Policía y seguridad: Ruckauf pregona la “mano dura”
para combatir el delito. Mientras las denuncias sobre abusos policiales
y torturas en comisarías bonaerenses son frecuentes, la inseguridad
sigue siendo uno de los principales problemas del conurbano y figura al
tope de la lista de preocupaciones de los habitantes de la provincia.
7 Municipios: Las comunas cargan con el peor peso de la crisis
en el distrito y deben salir a dar respuesta a las crecientes necesidades
sociales con recursos cada vez más exiguos porque de cobrar tarde
y mal la coparticipación provincial, pasaran ahora a percibirla
en bonos. Cada ajuste o demora en la remisión de los fondos coparticipables
aumenta la conflictividad social. Los intendentes peronistas siempre se
mantuvieron en su mayoría bajo en ala de Duhalde, aunque hasta
hace unos meses Ruckauf conseguía entusiasmarlos cuando les hablaba
de sus proyectos para el día en que llegara a la Casa Rosada. De
un tiempo a esta parte, han comenzado a dar indicios de su autonomía
con respecto a La Plata.
8 Legislatura: Ruckauf lograba sortear antes la falta de mayoría
peronista en la Legislatura desde los medios y sobre la base de su buena
imagen. En cambio, agobiado ahora por la crisis y desfavorecido en las
encuestas, no le resulta sencillo desatender los planteos de la oposición,
a la cual consiguió de todos modos arrancarle el apoyo al ajuste
en la provincia a cambio de su aval a los recortes a nivel nacional. Ayer,
de hecho, se reunió en La Plata con Federico Storani, Luis Patti
y Eduardo Duhalde, para analizar la situación del distrito. La
Alianza provincial lo responsabilizó por la crisis y convocó
a “una amplia concertación social y política”
para superarla (ver aparte).
9 Duhalde: Oficialmente apoya a Ruckauf y sigue diciendo que es
su candidato para el 2003. Sin embargo, las aspiraciones presidenciales
del ex gobernador –quien maneja a su gusto los destinos del PJ bonaerense–
son inocultables y están sustentadas en el alto porcentaje de intención
de voto que cosecha en las encuestas. También está fuera
de discusión la pretensión de su vicegobernador, Felipe
Solá, de asumir la conducción de la provincia. Solá
no comparte el modo de relación de Ruckauf con la nación
y el resto de las provincias, ni tampoco la forma en que administra el
distrito, y si bien se cuida de no jugar en su contra, tampoco se desvive
en hacerle favores. Vale recordar que en los primeros días de conflicto
docente, Solá declaró que el gobernador les debía
“una explicación” a los maestros.
10 PJ nacional: Ruckauf mantiene un pacto de no agresión
con el cordobés José Manuel de la Sota y el santafesino
Carlos Reutemann, quienes son mucho menos explícitos en sus apetencias
para el 2003 y ofrecen la imagen de tener sus distritos más ordenados
y menos conflictivos, pero su relación con los gobernadores de
las provincias más chicas es pésima. Esos mandatarios sostienen
que muchas veces se vale de las mesas de negociación con la nación
como tribuna para criticar al Gobierno central y armar espectáculos
de pelea con Domingo Cavallo, pero después termina arreglando por
las suyas y los deja pagando. Carlos Menem, quien todavía mantiene
unacuota de poder y una excelente relación con un puñado
de gobernadores, considera lisa y llanamente que Ruckauf es un traidor.
STORANI,
PATTI Y DUHALDE EN LA MESA DEL GOBIERNO
Para ver si acuerdan en el recorte
Preocupado por la situación
financiera de la provincia, el gobernador Carlos Ruckauf se reunió
ayer con los presidentes del PJ, la UCR y el Partido Unidad Bonaerense
–Eduardo Duhalde, Federico Storani y el ex policía Luis Patti,
respectivamente– para analizar la reforma política y del Estado
provincial. En el encuentro, realizado en La Plata, se notó la
ausencia del Frepaso, que decidió no responder a la invitación.
Ruckauf estuvo acompañado por el vice Felipe Solá, y explicó
los alcances del recorte de estructuras estatales previstos en la ley
12.727, por la cual se creó el bono “Patacón”
y se redujeron los sueldos de la administración pública.
Storani se manifestó a favor de aprobar un “programa de mayor
austeridad” que no implique “la posibilidad de despidos”.
“Debe abordarse una reforma del Estado sobre la base de una convocatoria
más amplia, una concertación social que incluya a los gremios
estatales, los gremios privados, las cámaras representativas de
la producción, tanto del sector industrial como del sector agropecuario”,
declaró.
Luego de la reunión, Storani difundió un documento con fuertes
críticas a la gestión del gobernador: “Las escuelas
están paralizadas, faltan insumos en los hospitales, existe un
inédito atraso en los pagos y un incierto destino de los bonos”,
dice el texto. Patti, por el contrario, propuso un sistema “unicameral”
tanto en la Nación como en Buenos Aires y planteó la necesidad
de reducir el número de concejales.
El Frepaso bonaerense no participó de la cumbre por orden de Graciela
Fernández Meijide y Rodolfo Rodil. La decisión no fue compartida
por el senador Eduardo Sigal, quien manifestó públicamente
su desacuerdo. “Como se sabe, la dirección del Frepaso decidió
no concurrir a la convocatoria lanzada por el gobernador Ruckauf. Mi posición
personal es que, justamente por la gravedad que ha asumido la crisis,
es necesario el diálogo”, declaró ayer a la tarde a
través de un comunicado.
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Cuando la tormenta repercute
en las encuestas
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Por Rosendo Fraga *.
La crisis política
Históricamente, la provincia de Buenos Aires sufrió
las crisis nacionales en menor medida que el promedio del país.
En cambio, ahora sucede a la inversa y por primera vez la provincia
más importante enfrenta una situación peor que el
promedio nacional.
En esta particular circunstancia se plantea una paradoja política,
ya que frente a las elecciones del 14 de octubre, el PJ aun realizando
la peor elección en el distrito desde 1987, puede ganar en
forma aplastante por 15 o 20 puntos, pese a la aguda crisis por
la cual atraviesa la provincia. Es que si el PJ obtuviera el 35
o el 36 por ciento de los votos –4 o 5 puntos menos que en
1997 cuando perdió frente a Fernández Meijide–,
igualmente podría ganar por 15 o 20 puntos, ya que el voto
no justicialista, a diferencia de lo que sucedió en 1997
cuando se concentró en una sola fuerza que fue la Alianza,
ahora está dividido en tres tercios entre Alfonsín,
Farinello y Patti.
Pero aun con esta particular victoria electoral las eventuales proyecciones
tanto de Ruckauf como Duhalde para una candidatura presidencial
en el 2003 parecen haberse diluido. A cualquiera de los dos no les
será fácil ganar una interna del PJ después
de haber fracasado en el gobierno provincial.
Es que si bien la crisis por la cual atraviesa la provincia no parece
suficiente para poner en riesgo la elección legislativa del
PJ el 14 de octubre, por la división del voto opositor mencionada,
sí puede ser suficiente para impedir la proyección
nacional de quienes gobernaron el distrito en los últimos
años, ya que en términos políticos ambos comparten
la responsabilidad de la situación de los bonaerenses.
* Director del Centro de Estudios Unión para la Nueva Mayoría
Por Artemio Lopez *.
Deterioro evidente
En la percepción de la opinión pública, el
deterioro de la gestión de Ruckauf es muy evidente, sobre
todo durante el último trimestre. Al principio, lo que impactó
negativamente sobre su gestión fue el fracaso de la política
de seguridad de mano dura. Pero con la crisis financiera abierta
en el último trimestre, y con la imposibilidad de pago en
pesos a sus empleados públicos, su figura se comienza a erosionar.
En el último estudio que daremos a conocer, realizado entre
el 15 y el 20 de agosto en el Gran Buenos Aires, ante la pregunta
sobre cuál era la peor gestión de gobierno, la respuesta
fue muy desfavorable para la administración Ruckauf: el 29,5
por ciento no contestó, pero inmediatamente el 19,7 de los
consultados respondió que la provincia peor gobernada es
Buenos Aires, mientras que el 15,0 por ciento contestó Salta,
y el 9,8 Jujuy.
Al interior del justicialismo, Ruckauf tiene las dificultades propias
de los gobernadores de la provincia de Buenos Aires, que por el
poderío del distrito que gobiernan despiertan el recelo de
sus pares, quienes consideran hegemónicas las pretensiones
bonaerenses. A esta restricción hay que agregarle otra, que
es que él no ejerce el poder real del aparato provincial,
en manos de Eduardo Duhalde. Por eso hay dos restricciones políticas,
dentro del PJ, para Ruckauf: una interna, que es el poder de Duhalde,
y una externa, el recelo de sus pares. Todo esto lo coloca en una
situación de relativa debilidad.
En la medida en que su imagen decae y se deteriora su poder al interior
del justicialismo, las chances electorales del gobernador bonaerense
aparecen en un momento de mínima. Es muy difícil pronosticar
a futuro, pero las dificultades financieras de la provincia lo colocan
en una situación desmejorada para competir por la presidencia.
* Director de la Consultora Equis.
Por Enrique Zuleta Puceiro *.
Maleficio bonaerense
Carlos Ruckauf vive con trágica anticipación el
extraño maleficio que ha bloqueado a los gobernadores bonaerenses
el acceso a la presidencia. Contra lo que intuye la sabiduría
popular, la larga serie de frustraciones que jalonan la historia
de las gobernaciones bonaerenses no tiene nada de extraño
y reconoce en todos los casos causas claras y evidentes. Lo que
Ruckauf no ha podido sortear es el costo directo de sus éxitos
iniciales. De hecho, el éxito de los gobernadores de Buenos
Aires se ha vinculado casi siempre a su capacidad para succionar
recursos nacionales de una entidad cada vez mayor. Bajo estas condiciones,
el éxito en la gestión provincial suele ser un triunfo
pírrico, con un severo costo en el nivel nacional. El nivel
de reconocimiento por parte de los habitantes del Gran Buenos Aires
es así inversamente proporcional al del resto del país.
“Si al Conurbano le va bien –dicen los ministros de hacienda
provinciales–, a nosotros nos va muy pero muy mal.”
En una Argentina sin destino ni proyectos superadores, esta lógica
centrífuga destruye a cualquiera, y Carlos Ruckauf no ha
sabido ni podido sustraerse al castigo. Su intención de voto
de cara al 2003 ha descendido desde 12.5 puntos hasta el modesto
5.1 de agosto, superado ampliamente por el 10.9 de Carrió.
Si bien sigue siendo una suerte de “primer espada” del
PJ, está lejos de representar una alternativa en ascenso.
La chance de emular a otros gobernadores del PJ, hasta ahora exitosos
en el intento de cargar la crisis en las espaldas del Gobierno nacional,
ha fracasado. Aumentan así las posibilidades de sufrir un
voto castigo mayor que el de la Alianza. Desde esta óptica,
el panorama electoral vuelve a convertirse en una incógnita.
Con cifras a la vista, nadie puede hoy pronosticar una victoria
opositora como la que se auguraba hasta hace pocas semanas.
* Director de Ibope.
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El
lunes, los delantales seguirán en las perchas
El lunes continúa la huelga de los docentes de la provincia
de Buenos
Aires. A pesar de la reiterada amenaza
de declarar la ilegalidad de la medida
de fuerza, los gremios ratificaron que asistirán a la audiencia
de conciliación
y después resolverán qué hacer.
Las
escuelas vacías son la postal
de la educación provincial.
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La pulseada entre los docentes
bonaerenses y el gobernador Carlos Ruckauf está todavía lejos
de resolverse. Pese a que el mandatario provincial confirmó que le
descontará los días a los docentes que no trabajaron por la
huelga que realizan desde el 6 de este mes en contra de la versión
bonaerense del ajuste, los gremios del sector educativo no dieron marcha
atrás. Tanto el Sindicato Unico de Trabajadores de la Educación
de Buenos Aires (Suteba), como la Federación de Educadores Bonaerenses
(FEB) y la Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica
(AMET) resolvieron continuar con el paro, al menos hasta el lunes inclusive,
a la espera de los resultados que puedan surgir de una nueva reunión
con los funcionarios provinciales en La Plata, en el marco de la conciliación
obligatoria dispuesta por el Ejecutivo local. Mientras tanto, en el medio
del tironeo quedaron más de dos millones de alumnos que no pudieron
reanudar el ciclo lectivo.
Como el conflicto educativo en la provincia está por ingresar en
su cuarta semana, Ruckauf redobló la apuesta para quebrar el paro
docente; tras calificar de “ilegal” la medida, recordó
que se descontarán de los sueldos los días perdidos por la
huelga. “La posición del gobierno es que los docentes tienen
que darle clases a los chicos, porque una cosa es un conflicto y otra el
paro por tiempo indeterminado, que implica privar a los alumnos de educación”,
dijo Ruckauf.
La respuesta desde los sindicatos no se hizo esperar. “Cuando los paros
eran nacionales, (Ruckauf) los alentaba, y además no descontaba;
ahora que son provinciales, por los mismos motivos por los cuales él
se sentía solidario, es decir en contra del ajuste, dice que va a
descontar”, dijo a Página/12 Hugo Yasky, secretario general
del Suteba. “Las actitudes de Ruckauf y las críticas de Duhalde
(había calificado de ‘desvergonzados’ a los maestros) son
una respuesta a la marcha impresionante que hicimos el jueves en el centro
de La Plata”, enfatizó Yasky.
“El gobernador no puede declarar la ilegalidad del paro, porque eso
es ámbito del Ministerio de Trabajo de la Nación”, dijo
Yasky, ante la amenaza de Ruckauf, que podría implicar despidos y
sanciones a los gremios. “Ruckauf debería saber esas cosas,
porque en su momento estuvo vinculado al mundo sindical”, añadió,
recordando el pasado del gobernador como abogado gremial. Por su lado, desde
el entorno de Ruckauf salieron a reinterpretar los dichos del mandatario:
“Quiso decir que era ilegal lanzar una nueva medida con una conciliación
obligatoria en marcha”, dijeron desde La Plata.
Yasky precisó que el lunes harán una suerte de “consulta
popular” entre todos sus afiliados, para definir si continúan
con la huelga o no. Por otro lado, la FEB decidió en un congreso
seguir con el paro, aunque facultó a su consejo directivo para que,
una vez concluida este lunes la audiencia de conciliación en el Ministerio
de Trabajo bonaerense, decida los pasos a seguir. Por su parte, los docentes
técnicos agrupados en AMET también mantienen la huelga, al
menos hasta pasado mañana.
A su turno, José Octavio Bordón, director general de Cultura
y Educación de la provincia, prometió que va “a trabajar
todo el fin de semana” para destrabar el conflicto y dijo que “no
se puede perder el optimismo”. El funcionario informó que el
lunes hará “una propuesta concreta” a los docentes y se
mostró confiado en resolver el conflicto.
En tanto, los patacones volvieron a generar problemas entre los docentes;
según denunciaron miembros de la FEB, varios maestros no pudieron
cobrarlos porque los cajeros del Banco Provincia (BAPRO) no tenían
suficientes bonos. Los inconvenientes se registraron en cajeros de La Plata,
Campana, Olavarría, Mar del Plata, Quilmes y Avellaneda.
El pago en patacones que dispuso Ruckauf para los sueldos públicos
mayores a 740 pesos es uno de los motivos que esgrimen los docentes para
sostener la huelga, aunque los maestros reconocen que esa causa está
prácticamente perdida; los otros puntos son la rebaja salarial para
los salarios superiores a los 1200 pesos –los gremios pretenden que
no sesumen los cargos docentes para llegar a ese piso– , el congelamiento
de beneficios por antigüedad y por zona desfavorable y la falta de
fondos para los comedores escolares y para becas.
El viernes 17 el gobierno bonaerense anunció la conciliación
obligatoria para el conflicto docente, pero hasta ahora las negociaciones
no dieron resultados positivos. El lunes volverán a verse la caras
funcionarios y docentes, en La Plata, sin que pueda aventurarse qué
ocurrirá.
Dado que el conflicto ya llegó a su clímax, ahora sólo
queda esperar que las negociaciones se rompan definitivamente, o que lleguen
a algún acuerdo. Hoy y mañana, cada sector entrenará
sus brazos para un nuevo capítulo de esta cinchada con final abierto.
Informe: Alejandro Cánepa.
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Los residuos en la
vereda
Los empleados que trabajan en la recolección de residuos
también amenazan con darle un dolor de cabeza al gobernador
Carlos Ruckauf. El secretario de organización del Sindicato
de Choferes de Camiones, Claudio Tapia, informó que además
harán una movilización el viernes próximo hacia
la gobernación bonaerense, “ante la falta de respuestas
a los graves problemas sociales y laborales de parte de las autoridades
nacionales y provinciales”. Por otro lado, Tapia reveló
que “el 7 de septiembre se para automáticamente la recolección
de residuos en la provincia de Buenos Aires” si existen demoras
en el pago de sueldos.
El gremialista afirmó que si los camiones no pueden llegar
a La Plata el viernes, “los vehículos van a quedar en
la ruta, en el lugar donde se encuentren, con basura incluida, y
nosotros nos llevamos la llave y las autoridades los van a tener
que sacar con la grúa”. Por otra parte, Tapia informó
que el 3 de septiembre harán otra movilización hacia
la sede del gobierno porteño.
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