A los hinchas de Racing no les
importa. Que su equipo haya jugado un mal partido. Que se haya plantado
con cinco defensores, moviéndose cautelosamente. Que el rival hubiera
sido superior todo el primer tiempo. No les importa siquiera la mínima
diferencia, ese disparo desde la medialuna del reaparecido José
Chatruc. No les importa un comino. Porque los detalles quedaron apisonados
bajo la noticia: Racing ganó. Ganó, sumó siete puntos
en tres partidos, y se mantiene en el merodeo de la punta del Apertura.
A los hinchas no les importa en la medida que la escueta síntesis
del resultado les permita seguir avivando el rescoldo de su sueño,
su eterno sueño, el de un título después de más
de 35 años...
Es cierto que Central se plantó mejor en el primer tiempo, aprovechando
la disposición conservadora prevista por Reinaldo Merlo Maciel
como líbero entre Campagnuolo y una línea de cuatro clásica
pero también es real que si Sequeira hubiera cobrado el penal que
Mustafá le cometió a Estévez sobre los 25 (en lo
que fue la única llegada del visitante en el primer período)
la historia podría haber cambiado.
Quedaba claro que la prioridad de Racing era el empate en Rosario. Pero,
ante la mediocridad de la propuesta de Central, creció en la segunda
mitad, especialmente a través de las subidas de Vitali. Y fue en
una jugada iniciada por el lateral que llegó el único tanto
del partido: el ex Independiente, rescató una pelota cerca de un
vértice del área local, y la alargó para Chatruc,
quien desde la medialuna metió un derechazo bajo que superó
a los centrales y se clavó junto a la base del palo derecho de
Tombolini.
Arriba con el 1-0, el partido quedaba a pedir de Racing, que se limitó
entonces a jugar con la desesperación de Central que, pálido
y sin ideas, pugnaba por la igualdad sin argumentos futbolísticos
de rigor, apagado Pizzi y sin compañía para Arias.
Podría haber sido una victoria más amplia si Milito hubiera
mostrado más generosidad en dos réplicas que pudieron haber
asegurado el resultado. Pero ni siquiera esas chances desperdiciadas molestaron
a los hinchas...
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