Guillermo Cañas continúa demostrando su excelente nivel en el circuito internacional. Ayer derrotó 6-1, 6-3, 6-7, 6-2 al australiano Wayne Arthurs y se clasificó para la segunda ronda del Abierto de Estados Unidos. De esa manera, se convirtió en el único argentino que logró su pasaje ayer, ya que el resto cayó en la primera vuelta. José Acasuso perdió con el español Félix Mantilla, mientras que Gastón Gaudio cayó ante al bielorruso Max Mirnyi, futuro rival de Argentina en la Copa Davis.
Cañas, preclasificado 27º, se convirtió en el tercer argentino en segunda ronda, luego de que el martes avanzaran David Nalbandian y Mariano Zabaleta. El bonaerense consiguió neutralizar el poderoso servicio del australiano y consiguió un triunfo muy dificultoso, a partir de su mejor técnica y visión de juego. Después de dos horas y 21 minutos, Cañas logró por tercera vez consecutiva su pase a la segunda ronda. El argentino logró 10 saques directos, cometió sólo 20 errores no forzados y obtuvo 12 puntos en 19 subidas a la red.
“Es muy difícil superar a rival que lo único que hace es sacar y subir a la red, sin darte descanso”, explicó Cañas. “Tenés que estar todo el tiempo en control de los golpes para conseguir colocar la bola en ambos lados de la pista y pasarlo para que no conecte la volea”, explicó el ganador, que en la siguiente instancia se medirá con Mirnyi, vencedor de Gaudio. El bielorruso aprovechó su potente saque para dominar a Gaudio, para finalmente llevarse el triunfo 7-6, 6-3, 7-6. El argentino nunca consiguió aprovechar sus ocasiones para quebrar el saque del rival y apenas tuvo chances en el primer tie break.
El otro argentino que quedó eliminado ayer fue José Acasuso. El misionero se encontró con un Mantilla inspirado, que no le brindó ninguna chance. Con mucha solvencia, el español se llevó el triunfo por un claro 6-3, 6-3, 6-4. Con estos resultados, sólo quedan tres argentinos sobre el cemento de Flushing Meadows, dos de los cuales se presentarán hoy. Zabaleta se medirá con el estadounidense Taylor Dent, mientras que Nalbandian se enfrentará al francés Nicolas Escude.
La particularidad que mostró la jornada fue la llamativa facilidad con que cumplieron sus compromisos las favoritas Martina Hingis, Lindsay Davenport y Serena Williams: Entre las tres apenas estuvieron dos horas y tres minutos sobre los courts para alzarse con sendas victorias. La suiza, primera raqueta del mundo y preclasificada número uno, empleó sólo 37 minutos para demoler 6-0 y 6-2 a la rusa Lina Krasnoroutskaia, mientras que Davenport, cuarta favorita, necesitó de apenas 42 minutos para vencer a la francesa Emilie Loit por idéntico marcador. La menor de las hermanas Williams, décima cabeza de serie, consiguió el pase a la tercera ronda “gastando” apenas unos minutos más, exactamente 44, para doblegar por un doble 6-1 a la checa Denisa Chladkova.

MAX MIRNYI, EL VERDUGO BIELORRUSO
“Cuidado, podemos ganar”

El bielorruso Max Mirnyi, rival de la Argentina dentro de dos semanas en la serie por el ascenso al Grupo Mundial de la Copa Davis, lanzó hoy una clara advertencia: “Cuidado, podemos ganar”. Tras eliminar en la primera ronda a Gastón Gaudio, Mirnyi habló de la serie que se jugará del 21 al 23 de setiembre en la ciudad de Córdoba. “Definitivamente, tenemos chances de ganar. Son ellos quienes tienen toda la presión. Nosotros en cambio no tenemos nada que perder”, dijo ayer. “Conozco a los argentinos, son buenos compañeros en el circuito, y espero pasar un buen fin de semana en Córdoba, donde según escuché hay buena comida, la gente es amigable y la vida nocturna interesante”, añadió. Mirnyi, que será el puntal del equipo bielorruso junto a Vladimir Volchkov, no le teme al hecho de que la serie se juegue sobre arcilla, pese a que él es un jugador de saque y volea. “Tengo buenos resultados en esa superficie, le gané varias veces a Mariano (Zabaleta) y este año a Kuerten en Hamburgo”, recordó. Argentina intentará regresar al Grupo Mundial tras nueve años de fallidos intentos de recuperar la máxima categoría, en la que fue finalista ante Estados Unidos en 1981. Hasta ahora, el equipo argentino capitaneado por Franco Davín estará integrado por Franco Squillari, Guillermo Cañas, Gastón Gaudio y Luis Lobo.

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