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Por Felipe Yapur
 El elogio que Elisa Carrió le dispensó a Carlos �Chacho� Alvarez, en el que deslizó la posibilidad de su incorporación al ARI, provocó un revuelo hacia el interior de la fuerza política que se tradujo en fuertes declaraciones públicas. El primero en reaccionar fue el candidato a senador porteño, Alfredo Bravo. El veterano dirigente socialista aseguró que Chacho, antes de poder sumarse, debería realizar una �fuerte autocrítica� de su actuación en el gobierno de la Alianza. Anoche, Carrió y Bravo buscaban descomprimir la tensa situación.
Esta no es la primera discrepancia que ocurre puertas adentro del ARI con respecto al tema Alvarez. Pero sí la primera que sale a la superficie con virulencia. El primer choque surgió cuando se discutió el armado de la boleta de candidatos a diputados porteños. Carrió intentó incorporar a Liliana Chiernajowsky, la esposa de Chacho, pero chocó con la resistencia de los socialistas, que impugnaron la participación de la vicejefa de Gabinete porteño.
La diputada chaqueña terminó aceptando la posición socialista, donde pesa mucho el agradecimiento que tiene por Bravo y el PSD quienes la contuvieron poco después de que abandonara el bloque radical. Pero quedó pendiente una discusión sobre la posición de sus socios del ARI que para Carrió choca con el desarrollo de una política de convocatoria transversal y que se parece más a �la construcción de un típico partido chico�.
Es en esta transversalidad donde �Lilita� y Chacho coinciden. Ella ya dijo que �el ARI es un estadio superior a la experiencia del Frepaso que debe nutrirse de varios de sus dirigentes�. Alvarez aconsejó a muchos de sus seguidores �entre los cuales hay más de un diputado� que no duden en sumarse a esta nueva fuerza que, al decir de Carrió, es �un nuevo movimiento�.
El razonamiento del ex vicepresidente, según confiaron a este diario varios diputados chachistas, es que la Alianza no existe más, que el Frepaso, como socio menor de esta coalición, es una fuerza política en vías de extinción y que el único espacio de acumulación política que existe es el que lidera Carrió. Es aquí donde reside la razón del acercamiento entre la radical disidente y Alvarez, y los elogios que ambos se dispensan.
Ayer, a su regreso de Santa Fe y Mendoza, Carrió se encontró con la polémica que desataron sus declaraciones favorables a Chacho.
Bravo dijo que �hacen falta algunas explicaciones ante la ciudadanía por parte de Chacho Alvarez y la opinión (en este sentido) de la señora Elisa Carrió, a quien quiero mucho y es muy respetable, yo no la comparto�. Remarcó además que el ex vicepresidente le debe a los socialistas �una conversación personal para decirnos por qué nuestras opiniones nunca fueron consideradas dentro del Frepaso para ser llevadas al gabinete y por qué hubo tanta aceptación de la política del presidente Fernando de la Rúa, como el ajuste o el impuestazo, que también apoyó Alvarez�.
Después fue el turno del también socialista, Héctor Polino. El primer candidato a diputado nacional aseguró desconocer los �términos de la colaboración� que estaría prestando Alvarez al ARI, pero advirtió que �como paso previo a una eventual reinserción a la vida política�, el ex vicepresidente �debería hacer una autocrítica pública por los graves errores cometidos�.
Las declaraciones de ambos dirigentes y las diferencias internas en la calle preocuparon a más de un dirigente del ARI. Anoche, varios de ellos intentaron bajarle el perfil a la polémica: �No hay que darle mayor trascendencia a esta diferencia de opiniones. Es una discusión virtual�, señalaron. En esta misma línea, el diputado y miembro del comité de campaña del ARI, Oscar González, consideró que la discusión sobre Alvarez no debería sorprender: �Nadie duda que se trata de una persona decente, honrada, progresista y democrática. Pero todavía falta una reflexión, unaautocrítica sobre su corresponsabilidad en la aplicación de políticas impopulares que llevó adelante cuando integró el gobierno�. De todas formas González dejó una puerta abierta a la participación de Alvarez al remarcar que en �el ARI no se vota, pero tampoco se veta. Todo se decide por consenso�.
Anoche, Carrió se disponía a conversar con Bravo para superar las diferencias sobre el caso Alvarez.
Ironías de Graciela
Diferentes fueron las reacciones en el Frepaso ante la novedad de que Carlos Alvarez estaría colaborando con Elisa Carrió en el armado del ARI. Por caso, Darío Alessandro dijo que dialoga a menudo con el ex vicepresidente. Aseguró que �él está preocupado por la Argentina�, pero agregó que �el Frepaso ha tomado la decisión de integrar la Alianza y todo el apoyo político estará en esa estrategia, no en otra�. En cambio, Graciela Fernández Meijide prefirió la ironía. �Yo que lo conozco a Chacho, con lo vanidoso que es, debe estar furioso�, dijo en referencia al supuesto estado de ánimo de Alvarez luego de que Carrió lo �perdonara por haberse equivocado� y revelara que �está arrepentido� de sus actos. |
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