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�Para nosotros, llegar a la Cámara de Diputados es jugar en primera�

Vilma Ripoll es legisladora porteña y candidata a senadora nacional por la IU. Marca diferencias profundas con el ARI y propone no pagar la deuda y reestatizar a las privatizadas.

Por Romina Calderaro

Acababa de llegar de La Matanza, donde participó junto a Patricia Walsh y Patricio Echegaray del Segundo Congreso Piquetero. Vilma Ripoll, candidata a senadora porteña por Izquierda Unida (IU), tiene claro lo que quiere hacer si consigue una banca en la Cámara alta. “Hay que plantear la suspensión del pago de la deuda externa y empezar a cobrar impuestos al capital financiero. Hay que reestatizar las empresas privatizadas y las AFJP”, asegura. Jura que si ella o Patricia Walsh –la candidata a diputada de IU– llegan al Congreso, sólo cobrarán mil doscientos pesos. “El resto irá al partido y lo destinaremos a colaborar con las diferentes protestas sociales”, explica. Y opina que del ARI, la fuerza que conduce Elisa Carrió, los diferencia “que ellos no plantean medidas de fondo contra el modelo”.
–¿Por qué decidió, siendo legisladora porteña, postularse a senadora nacional?
–Creo que la posibilidad de acompañar la experiencia de que Patricia Walsh y Patricio Echegaray puedan llegar a la Cámara de Diputados es muy importante. Habitualmente, cuando planteamos cosas de fondo acá en la legislatura nos responden “éste no es el ámbito”. Entonces, para nosotros es muy importante llegar ahí porque es como jugar en primera. Desde esa ubicación queremos presentar la propuesta de país que tenemos y de solidarizarnos con las luchas sociales.
–¿Y qué es lo que promoverán en el Parlamento?
–Creemos que este planteo de “o se aceptan los ajustes o viene al abismo” es el cuco sistemático que el gobierno viene llevando adelante. Y para nosotros el país está al borde del abismo, abismo al que nos llevaron los diferentes gobiernos, pero no creemos que se salga con ajustes ni con la política del déficit cero. Llegó el momento de que empecemos a discutir medidas para que los grandes empresarios de este país, que se la llevaron toda, sean los que paguen el ajuste. Por ejemplo, se pueden cobrar impuestos a las grandes empresas. Vos fijate que con un impuesto del diez por ciento que se les pusiera a las empresas que cotizan en la bolsa, al capital financiero, se juntarían 20 mil millones de pesos, lo que significaría que no haya más IVA. Si no se paga más IVA a la canasta familiar significaría un 21 por ciento más de poder adquisitivo. En caso de las empresas privadas y las AFJP, nosotros planteamos la reestatización. Eso es vivir con lo nuestro. Y lo fundamental es la suspensión del pago de la deuda externa.
–El redactor de la ley de Déficit Cero, Horacio Liendo, dijo en una entrevista con Página/12 que no pagar la deuda, por el tiempo que sea, es una “quimera impracticable” que llevaría a los tenedores de bonos argentinos a sacar sus depósitos de los bancos por temor a que quiebren.
–No pagar la deuda es una pelea, nosotros no decimos que es fácil. Pero creemos que es mucho más difícil seguir viviendo si se profundizan las medidas que se están planteando, porque el déficit cero es un ajuste sin fin. Es mucho más difícil esa pelea que intentar una lucha nacional para suspender los pagos. Los que tienen plata en bonos de la deuda son las AFJP. Entonces, si vos estatizás las AFJP no van a poder hacer nada. Hay un punto en el que Liendo tiene razón: la propuesta de Alfonsín y el PJ de reprogramación consensuada es utópica. Es más utópica que suspender el pago. Porque nosotros creemos que es imposible creer que ellos, que nunca quisieron renegociar nada, van a querer negociar. Ellos van a querer negociar si nosotros programamos la suspensión del pago.
–Una pregunta remanida, pero vigente. ¿Por qué no se produce la famosa unidad de la izquierda?
–Nosotros seguimos intentando aumentar la unidad, pero no es fácil. Para mantener la unidad hay dos secretos: primero, priorizar lo que nos une. Y segundo, tener un método democrático de definición de lascandidaturas. Nosotros fuimos los primeros que hicimos las internas, pero eso no ocurre en todos los partidos.
–¿Qué los acerca y qué los aleja del ARI, de Elisa Carrió?
–Lo que nos une es que nosotros compartimos la investigación y las denuncias que está haciendo la diputada. Me parece que es muy valiente de su parte salir a hacer lo que está haciendo. Pero creemos que como organización política el principal de los problemas es que no plantean medidas de fondo. Y en eso se parece al Frepaso: su planteo de fondo es la transparencia, la denuncia de la corrupción. No es casual que Chacho diga que los apoya.
–¿Quién le parece que va a ganar las elecciones?
–La certeza que tengo es que a nivel nacional va a perder el gobierno y que el PJ va a hacer una buena elección, sobre todo en algunas provincias. Pero lo nuevo es que, en general, ya no aparece el voto castigo. Lo que hay ahora es ruptura política. Y esa ruptura que hay, hace que ya no se vote a los principales partidos. Eso es nuevo, porque antes, con uno se castigaba al otro. Y eso se expresa de forma negativa con el voto en blanco o impugnado, y de forma positiva empieza a manifestarse un crecimiento de la izquierda.

 

 

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