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Por
Carlos Noriega Los
atentados en Nueva York y Washington frustraron una reunión prevista
entre el canciller Adalberto Rodríguez Giavarini y el secretario de
Estado norteamericano Colin Powell, que debía realizarse en el marco de
la Reunión de Cancilleres de la OEA que ayer se clausuró en Lima. Sin
embargo, Rodríguez Giavarini conversó en privado con Powell algunos
minutos, sólo los suficientes para expresarle su pesar por lo ocurrido en
Estados Unidos, percibir la pesadumbre del secretario de Estado
norteamericano y diferir la frustrada cita para "un futuro".
Powell había recibido la noticia de los atentados mientras desayunaba con
el presidente peruano Alejandro Toledo. "Nuestros rostros se
transformaron y expresamos mudamente nuestra consternación, sin poder
creer lo que había sucedido", diría luego Toledo al recordar ese
terrible momento en el que les llegó la noticia.
--¿Cuál ha sido la reacción del gobierno argentino frente a
los atentados ocurridos en
Estados Unidos?
--El señor presidente de la República envió una carta al
presidente George W. Bush solidarizándose en estos momentos con el
sentimiento y el dolor del pueblo estadounidense. Creemos que estos actos
son repudiables desde todo punto de vista.
--¿Además de haber enviado esa carta de solidaridad y
condolencias, el presidente De la Rúa se ha comunicado telefónicamente
con el presidente Bush?
--No se ha podido comunicar. El presidente Bush no ha recibido
llamados telefónicos del exterior porque estaba en su gabinete de
emergencia nacional, al menos esa es la información que tengo hasta este
momento (cuatro de la tarde hora argentina). Nuestro embajador en
Washington me ha informado que el presidente Bush recibió en la sala de
situación de emergencia la carta de condolencias que le envió el
presidente De la Rúa.
--Usted se reunió brevemente con Colin Powell poco después de
conocida esta tragedia. ¿Qué fue lo que conversó con el secretario de
Estado norteamericano?
--Le expresé las condolencias del pueblo argentino y del gobierno
del presidente De la Rúa. Teníamos previsto una reunión con el
secretario Powell y él me dijo que esa reunión tendría que realizarse
en un futuro dadas las circunstancias. Yo le dije que eso era
comprensible.
--¿Cuál era el estado de ánimo de Powell?
--Estaba francamente afectado. Me comentó que estaban
absolutamente consternados, que era una cosa inesperada y terrible. Eso es
todo lo que conversamos.
--¿Qué tenía previsto tratar con Powell en esa reunión que
se frustró y ha quedado diferida para otra ocasión?
--Todo lo vinculado a los temas de las relaciones bilaterales entre
Estados Unidos y Argentina.
--¿El tema de la crisis económica era parte central de esa
conversación?
--Sí, por supuesto, pero no sólo lo relacionado a lo económico.
También otros temas relacionados a la defensa, la seguridad, el comercio,
los derechos humanos, el Consejo de Seguridad de la ONU, la situación
internacional.
--¿Tiene información si existen víctimas entre los ciudadanos
argentinos?
--Hasta este momento (ayer) no tenemos información sobre muertos o
heridos entre los ciudadanos argentinos. Hemos puesto teléfonos
disponibles para que los familiares de los ciudadanos argentinos puedan
solicitar información. También hemos puesto teléfonos para que los
ciudadanos argentinos y sus familiares puedan llamarse y conversar, y así
tener noticias sobre cuál es su situación. He dado órdenes concretas a
la embajada en Washington y al consulado en Nueva York para dar todos los
servicios que podamos a los ciudadanos argentinos que están allá.
--¿Qué efectos políticos cree que tendrán estos atentados?
--No lo podría evaluar todavía. Hay que esperar con mucha calma y
prudencia que se aclare esta situación para tener clara la dimensión de
esta tragedia mundial. Creo que van a ser muy significativos los efectos
económicos, pero sería una imprudencia anticipar hacia qué dirección
puede marchar esto.
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