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 La marcha del Frente Nacional contra la Pobreza salió ayer desde la Plaza del Congreso rumbo a cien ciudades del interior. La movilización recorrerá el país con siete caravanas y el objetivo de difundir la consulta popular prevista para el 10 diciembre, en la que se votará sobre la creación de un seguro de empleo y formación. Las columnas volverán dentro de diez días para confluir en un acto de cierre en la Plaza de Mayo. �Partimos buscando ligar las luchas y la resistencia contra las políticas que generan la irracionalidad de la pobreza, la muerte de los pibes y la falta de futuro de los jóvenes�, señaló el titular de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), Víctor De Gennaro.
La iniciativa, explicó el titular de la CTA, apunta a que en la Argentina no haya ningún hogar por debajo de la línea de pobreza: con la implementación de un seguro de empleo y formación de 380 pesos para los jefes de hogar desocupados y de una asignación universal de 60 por cada hijo menor de 18 años, se aseguraría un ingreso mínimo de 500 pesos por familia.
En las caravanas van representantes de los distintos sectores que conforman el Frenapo: sindicalistas, pequeños y medianos empresarios, políticos y organizaciones religiosas y de derechos humanos.
La primera columna partió rumbo a Misiones y es encabezada por De Gennaro; la segunda se dirige a las localidades mesopotámicas de Paraná y Goya, con la titular de la CTERA, Marta Maffei; la tercera llegará a las provincias del noroeste con Luis D`Elía, de los desocupados; en los actos de la cuarta, que pasará por Tucumán, estará el economista de la CTA Claudio Lozano y el presidente del CELS Horacio Verbitsky.
El quinto brazo de la marcha abarcará el centro del país y la región de Cuyo y es encabezada por miembros de la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas; la sexta y la séptima van hacia el sur con Juan González, secretario general de ATE y Tati Almeyda, de la Asociación Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora.
La semana pasada, un grupo de 15 diputados nacionales, entre los que están Elisa Carrió, María América González y Marcela Bordenave presentaron en el Congreso un proyecto para que se convoque a la votación. De todas maneras los marchantes anticiparon que �si el presidente (Fernando de la Rúa) y los grupos económicos tienen miedo de convocar al pueblo a las urnas, nosotros decimos que le guste o no al gobierno, el 10 de diciembre vamos a votar en las iglesias, en las sociedades de fomento y en los sindicatos�.
Los micros fueron despedidos por unas doscientas personas. Hubo un homenaje por el día del maestro y antes de la salida el párroco de La Quiaca Jesús Olmedo bendijo la manifestación. Para cuando regresen, el 21 de setiembre, los marchantes apuestan a reunir 200 mil personas en la Plaza de Mayo en un acto que unirá el repudio al ajuste con el reclamo por una mejor distribución del ingreso.
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