Por Esteban Pintos
El anónimo sepulturero del cementerio de Viña del Mar es el último entrevistado. Señala una tumba, bastante humilde y cubierta de flores. Dice, mascullando las palabras: �Fue elegido por el pueblo, nomás...�. Habla en voz baja y es una interpretación inocultablemente chilena de la lengua española. Después de eso, negro. Así concluye el documental El último combate de Salvador Allende, del realizador Patricio Henriquez, que Canal 7 emitirá esta tarde a partir de las 15.30 (con repetición mañana jueves a las 10) en el programa �TV Educativa�. El trabajo, basado en el libro Allende-Crónica 1970-1973, del periodista y diplomático francés Pierre Kalfon (corresponsal de Le Monde en aquellos años), recorre minuto a minuto el golpe militar que derrocó a Salvador Allende y entronizó en el poder al general Augusto Pinochet, un día como hoy hace 28 años.
El documental parece seguir con una especie de mecánica del género. Los sucesos son narrados por entrevistados al momento de realizarse el telefilm (1998), recordando paso a paso el agitado día, con el detalle sobreimpreso de la hora en que se iban produciendo los hechos. Esta línea narrativa se entrecruza además con un repaso de los antecedentes en la historia política chilena de la década del sesenta y setenta. Participan con su testimonio, entre otros, Hortensia Bussi de Allende e Isabel Allende, esposa e hija del presidente constitucional, sus colaboradores más cercanos (chofer, escolta personal, edecán, consejeros políticos, médico, policía civil) y también el golpista general Javier Palacios, quien expresa el �orgullo� de haber dirigido la columna de tanques que encabezó el ataque al Palacio de la Moneda. Las imágenes que enriquecen estas participaciones poseen un alto valor testimonial ante todo y cuando no aparecen, material de archivo fotográfico asume el protagonismo visual. En todos los casos, el resultado es una sólida unidad narrativa que ubica al teleespectador en el momento y lugar exacto de aquello que se está reseñando. Un día difícil de olvidar.
Más allá de la factura técnica y las multiplicidad de voces, aspectos que enriquecen el resultado del documental de Henriquez, existe un valor agregado en la emoción del recuerdo de los entrevistados para con la figura del presidente muerto �su secretaria, hoy anciana, relata con picardía su propia decisión de no abandonar la Moneda cuando el final era inevitable� y en varias directas precisiones que entregan fundamentalmente el embajador y el agregado militar de los Estados Unidos en Chile. Según revela el diplomático Edward Korry, el gobierno de los Estados Unidos, a través de la CIA, derivó 2.700.000 de dólares para torcer el destino de la elección presidencial de 1964, en donde finalmente resultó electo Eduardo Frei. �Pero también la CIA consiguió dinero de El Vaticano, de la Iglesia Católica estadounidense, de las casas reales de Holanda y Bélgica, para ayudar a financiar la campaña de Frei e impedir la elección de Allende. Fueron sumas enormes de dinero, que ayudaron a apoyar a los indecisos a favor de Frei.� El ex agregado Paul Wimert, además, relata el contenido de una reunión que mantuvo con Richard Nixon y Henry Kissinger, en pleno Salón Oval de la Casa Blanca. �Nixon estaba furioso, golpeaba el puño contra su escritorio, y repitió varias veces que aplastar rápidamente a ese SOB (son of a bitch, hijo de puta).�
El último tramo del programa, correspondiente a los últimos minutos con vida de Salvador Allende, entrega momentos de alto impacto emotivo, entre los que cuentan el relato de su hija Isabel sobre el saludo final en una puerta lateral del palacio de gobierno (�nunca pensé que sería la última vez que lo abrazaría�, dice) y su esposa Hortensia sobre el solitario entierro en Viña: �Me tragué las lágrimas, no quería que me vieran llorar. Pero les dije a los que estaban presentes �Aquí estamos enterrando al presidente Salvador Allende. Vayan y cuenten a sus familias, para que todo el mundo lo sepa. Que no le falte una flor en su tumba��. Enseguida, vienen las palabras del sepulturero, lógicas, sinceras, ingenuas.
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